ria del Océano Atlántico en la parte occidental de la provincia de Pontevedra. Su lado setentrional principia en el Cabo del Hombre ó punta de Subrido, y por el S. en la punta del monte Ferro; corre casi deE. á O. en la estension de 6 leg. geográficas. Hacia la mitad de su long. forma en la costa del S. la grande ensenada y puerto de Vigo, que con justo motivo se reputa por el primero de la Península y aun, según la opinión de muchos, por el mejor de Europa; efectivamente, la estensa y deliciosa ria de Vigo reúne circunstancias inapreciables que hacen á dicho puerto merecedor de la celebridad y nombradla de que goza entre los marinos e inteligentes de todas las naciones.
A 31eg ONO. del indicado puerto en la misma entrada de la ría están situado las islas conocidas antiguamente por islas de los Dioses, y mas generalmente Cicas ó Siccas, las mismas que hoy dia se titulan Cíes y también Bayonas por hallarse cerca y frente al puerto de este nombre. Ambas islas se prolongan de N. á S. 4 millas escasas. La isla del N., que es la mayor, tiene de largo cerca de 2 1/2 millas; su estremo nombrado el Caballo con la punta de Subrido en la costa setentrional de la ria forma un canal de 1 2/3 milla; la long.
de la isla del S. es de 1 1 ‘2 milla poco mas ó menos, y entre su estremo meridional llamado Cabo de Vicos y la punta del monte Ferro se halla la boca del S. de la ría, que tiene unas 3 millas; el espacio que media entre ambas islas constituye el paso de Porta, cuyo ancho es como de 1/3 de cable, y su fondo de 36 á 42 pies. Las dos islas son bastante altas en sus cumbres, y por lo mismo abrigan y defienden el puerto de Vigo de la gruesa mar del centro y de los tempestuosos vientos del ONO. hasta el SO , y ademas reúnen la singular ventaja de que por cualquiera de las enunciadas bocas del N. y S. pueden los buques entrar y salir con cualquier viento y marea, pudiendo en caso de empeño penetrar por el paso de Porta.
Toda la ria es muy sondahle y limpia (escepto las puntas), teniendo de 90 hasta 150 pies fondo lama y arena , y en los varios parages de su espaciosa bahía pueden fondear con seguridad y abrigo de todos vientos las embarcaciones de cualquier porte y capacidad, pudiendo anclar en ella á un tiempo innumerables escuadras, y hacer aguada en los muchos puertos de ambas costas. En consideración á estas ventajas la compañia Peninsular Inglesa designó á Vigo por punto de escala para sus barcos de vapor destinados á conducir la correspondencia y pasageros desde Inglaterra á España y Portugal, y lo mismo hizo la empresa Portuguesa establecida en Oporío.
Hay en una y otra costa de la ria muchas y buenas ensenadas para fondear los buques con seguridad. En las mismas islas Cies pueden tambieu fondear y hacer su aguada, porque las dos tienen cómodos surgideros y abundan de esquisitas aguas; en la del S. se ha construido una gran fáb. de sardina, de propiedad particular con un almacén provisto de vinos, comestibles y otros art., habiendo ademas un estanco de tabacos. Al E de dichas islas, frente á un placer de arena que tiene la del N. se halla un regular fondeadero de 60 á 72 pies; durante el invierno de 1832 y en los primeros meses de 1833 estuvo surta en dichas islas toda la escuadra portuguesa del emperador D. Pedro, sin que sufriese la menor averia á pesar de los recios temporales que reinaron en aquella época.
Entrando por el paso N. y siguiendo la misma costa se hallan ensenadas bastante profundas, limpias y seguras para embarcaciones mayores de todos portes, siendo las mas principales las de Barra, Limens, Cangas, Con, Domayo y San Adrián de los Cobres hay también la de Sta. Cristina de los Cobres y la del Ullo, que sirven para lanchas. La costa S. tiene igualmente varios puertos con las mismas circunstancias, y entre ellos se distinguen las playas de Samil, Coya , Vigo y Teis , sin contar la gran ensenada de que hablaremos.
En el seno de la misma costa desemboca un r. que conduce á la v. de Redondela y es navegable, como también el que viene de Puente-San Payo; pero ambos únicamente sirven para embarcaciones menores cuando la mar está llena.
Los bajos mas notables, ó acaso los únicos de esta ria son los Castros, Üorneira, Salgueiron y Pego hacia la costa del N.; y por la del S. no hay mas que las puntas de los cabos, que casi todas tienen alguna restinga en una y otra costa.
El ancho de la ria es muy diverso, y apesar de los bajos indicados y restingas de ambas costas, se encuentra en medio un canal de bastante estension muy limpio y de mucho fondo por el cual salen y entran los buques sin el menor riesgo; y también pueden salir fácilmente, aun con vientos escasos ó contrarios , voltejando y cuidando solamente de no cerrar las puntas ni aproximarse demasiado á ellas. Las mareas en esta ria son en los dias de conjunción ú oposiciou á las 3 de la tarde y ascienden de 13 á 14 pies.
En la costa del S exsisten los montes de Ntra. Sra. del Alba y de la Guia, que sirven de marcas para la entrada de las embarcaciones, como también el de Ntra. Sra. de la Peneda en el fondo de la ria. La costa del N. es una península llamada de Morrazo , circuida por esta ria y por la de Pontevedra; dicha costa es muy quebrada y mas escarpada que la anterior, pero su terreno también es ameno y productivo; en ella existe el puerto de Cangas, y la torre de su colegiata sirve de marca para los buques que entran en la ria por el paso del N. A dist. de 3 8/10 millas del puerto de Vigo en la misma costa S. se halla la punta de Rande, que con la opuesta de Bestias, dist. entre si menos de 1/3 de milla , forman la garganta mas estrecha déla ria ; habiendo en cada una de dichas puntas un castillejo arruinado desde ellas comienza una grande ensenada muy profunda y en la que pueden fondear innumerables embarcaciones abrigadas de todos vientos y con suficiente separación unas de otras dicha ensenade es memorable por la desgracia acaecida á la flota española que volvia de América en 1,702 , y el destrozo que los ingleses y holandeses hicieron con su armada á la de los franceses que defendía el puerto. Ademas esta ensenada puede servir de refugio para los buques que arriben faltos de anclas ó cables, pues varando en el fango permanecen con toda seguridad hasta provistarse de lo necesario, y después de alijar un poco salen sin averia en toda la ensenada desde el canal ó garganta formada por aquellas puntas hav desde 72 y 78 hasta 84 y mas pies de agua fondu lama.
Islas de San Simón y San Antonio. Siguiendo el rumbo de la ria al E. y á 2 tí/10 millas de las puntas de Rande y Bestias, y á 0 4/10 millas marítimas del puerto de Vigo, se encuentran dos islas de mediana altura denominadas de San Simón y San Antonio , que se prolongan de N. á S. ambas son ásperas y escarpadas en casi toda su apariencia esterior, y abundan de canteras de piedra sillar, formando diferentes tajos.
La de San Simón es la mayor y tiene de largo 906 pies en su mayor línea de N. á S. y 315 de ancho, siendo su circuito en pleamar, 2,070 , y de consiguiente puede considerarse el bojeo de ella como de 1/3 de milla aunque es peñascosa por el declive de toda la circuferencia, en su cima forma una verdadera planicie muy fértil, donde se crían buenas yerbas de pasto , variedad de plantas medicinales y aromáticas que ocasionan un olor muy grato en toda la isla. Al estremo N. de esta isla se halla la de San Antonio de figura al parecer circular y cuya superficie en su mayor parte está cubierta de enormes canteras, siendo mas peñascosa y escarpada que la de San Simón su long. es de 31-2 pies, de 489 su mayor anchura y de 1,020 todo el circuito. Ambas islas quedan incomunicadas entre si durante 7 ú 8 horas, porque entre ambas hay una mella por donde pasa el agua en pleamar , pero en lo demás del dia están unidas por’un placer de piedra y arena , y entonces constituyen una sola isla.
Situadas en lo interior de la ria , inmediatas á la costa del E. déla cual solo distan 2 1/2 décimos de milla y colocadas entre las costas del N. y S. reúnen en sí mismas y á su alrededor un conjunto de circunstancias muy agradables; allí se respira un aire vivificadory se siente mayor actividad y energía en las funciones intelectuales y digestivas es común y antigua lama en el país, que cualquiera caballería enferma ó estenuada que se traslade á estas islas , se cura muy pronto y se nutre completamente sin otro ausilio. Como se hallan internadas y distantes mas de 5 leg. de la entrada de la ria dentro délas puntas de la gran ensenada, se hallan muy abrigadas de los vientos dominantes, y por eso tampocollegan alli las marejadas, ni se perciben las resacas del flujo y reflujo; y los temporales mas fuertes nunca ofenden á sus inmediatos fondeaderos estos tienen ademas la ventaja de que su fondo es fangoso y limpio sin restinga ni peñasco alguno, y ofrecen la situación mas cómoda para hacer aguada y proveerse de víveres. A menos de 1/3 de milla de dichas islas pueden fondear los buques de mayor porte, y los de mediano pueden hacerlo por todas partes al rededor de las mismas desde 1/2 á un cable de distancia ; pero el principal fondeadero es del O. al NO. de la isla de San Simón; el canal que media entre la de San Antonio y el islote de San Bartolomé también presenta un fondeadero considerable por su limpieza y mucha agua.
A consecuencia de real orden de 6 de junio de 1838 se estableció en estas islas un Lazareto para la observación cuarentena y espurgo de los buques procedentes de países infestados ó sospechosos, que viniesen con destino á los puertos del Océano. Los muelles, hospitales, almacenes tinglados y demás obras análogas á dicho establecimiento, aprobadas» por la Academia de San Fernando conforme á los planos ejecutados por el ingeniero director de la carretera de Vigoá Castilla D. Alejo Andrade Yañez , satisfacen cumplidamente su importante objeto.