VILLAVEZA DEL AGUA

Lugar con ayuntamiento en la provincia de Zamora (7 l e g ) , partido judicial de Benavente (4), diócesis de Astorga (10), audiencia terr. y ciudad g. de Valladolid. SIT. sobre una ladera mirando al N.; su CLIMA es templado; se padecen tercianas.

Tiene 48 CASAS ; escuela de primeras letras en unión de Barcial del Barco, dotada con 1,100 reales, á que asisten 25 n i ños de ambos sexos; iglesia parr. (San Salvador), servida por un cura de ingreso ly libre provisión , y medianas aguas de pozo. Confina con Sta. Colomba de las Monjas, Barcial del Barco, Santovenia y Milles en su término se encuentra el desp. de Sta. Elena. El TERRENO es de buena y mala calidad, y de secano. A 1/4 de leg. del pueblo pasa el r. Esla «nido ya con el Orbigo, en que se halla una barca de paso.

Hay un monte de encina y carrascas , y un prado natural.

Los CAMINOS son locales, «escepto el de Zamora á Galicia y Asturias recibe la CORRESPONDENCIA en Bcnavente. PROD..- granos, legumbres y pastos; cria ganado lanar , caza de liebres, y pesca de truenas y barbos, POBL.. 40 v e c , 162 almas

C A P . PROD. 167,281 reales 1MP. 15,218. CONTR. 8,327 reales , 25 mreales Se conservan restos de un cast. en la cordillera inmediata al pueblo; en el terreno que ocupa hay una boca muy grande, 3ue parece ser el camino cubierto que sirviese para surtirse e agua los de la fortaleza en este punto se dice fue dada la famosa batalla contra los sarracenos , titulada dei Mato, cuyo nombre lleva todo el término de Villaveza. En el estremo O. de la cordillera hubo un puente de que se conservan residuos, que daba paso para Sanabria y Galicia como ahora la barca

VILLASANDINO

v. con ayuntamiento en la provincia, audiencia terr., c g. y diócesis de Burgos (6 leg.), partido judicial de Castrojeriz (1 4/2). SIT. en un llano, al O. de una cordillera de cuestas, que se comunican desde Castrojeriz á Villadiego; goza de buena ventilación y CLIMA templado y sano, y afecto solo á las estacionales.

Esta población que antiguamente se llamó Villasenda, trae la etimología de su nombre , de que estuvo dividida en 7 barrios, y por consiguiente habia otras tantas sendas para Ja comunicación. Consta de 350 CASAS , divididas hoy en 2 barrios llamados de la v. y Barriuso; en cada uno de los cuales hay una iglesia parr. (La Asunción y la Natividad), servidas por 5 beneficiados enteros y 5 medios en la primera de estas se conservan varias reliquias, donadas por D. Luis Gsorio, natural de esta v., y virey que fue de Milán , en el reinado de Felipe II, el cual las adquirió por donación que Ce ellas le hizo el rey D. Fernando de Alemania ; el citado ü. Luis y su esposa Doña Isabel Tedaldi, fueron sepultados en el presbiterio al lado del Evangelio , donde se conservan sus sepulcros de piedra en la otra iglesia de la Natividad , se ñauan también sepultados dos célebres guerreros llamados ios bandovales, q u e concurrieron con D. Pelayo á la batalla de Covadonga; se cree fueron ascendientes de los duques del Infantado; hay un hospital titulado de la Concepción con 4 camas y asistencia para enfermos pobres ; sus rentas consisten en 200 fan. de trigo, y un censo que paga la v. de Melgar ; escuela de instrucción primaria , y estramuros del barrio de la v., hay una casa fuerte con su torre ; en la circunferencia de este barrio, se ven algunos restos de una antigua muralla del tiempo de los árabes; en la parte NE. se conserva un arco de piedra , sobre el cual están las armas de Castilla en un escudo de piedra también. El término confina N. Grijalva; E. Olmillos, Saramon y Castrillo ; S. Villoveta y Villasilos , y O. Padilla de Abajo. El TERRENO es de mediana calidad ; le fertiliza el r. Odra ú Odrilla que lame los muros de la población; donde recibe las aguas de un arroyo; sobre aquel hay 3 puentes de piedra; uno de 40 arcos junto á la iglesia de la Asunción; otro en la confluencia de ambos con 4 arcos, y otro con 3 ; todos en dirección á los CAMINOS que conducen á los pueblos inmediatos, PROD.  cereales y legumbres ; cria ganado lanar, y caza menor. Se celebra un mercado los miércoles, cuyo permiso obtuvo en el año 4842; su tráfico consiste en granos, telas y paños, PORL.  262 veo,, 4,050 almas CAP. PROD. 3.709,500 reales IMP. 333,7 23.

CONTR. 29,866 reales, 46 mreales

VILLARROBLEDO

v. con ayuntamiento en la provincia y audiencia terr. de Albacete (41 leg.), partido judicial de La Roda (6), „ƒ g. de Valencia(36), diociudad de Toledo SIT. en llano con buena ventilacion y saludable CLIMA tiene 1,450 CASAS; la consisto rial; cárcel; un hospital con muy escasas rentas, consistentes en prod. de fincas rústicas; un pósito cuyos fondos no se ha podido averiguar á cuanto ascienden , fundándose esta ignorancia en que se dice hallarse repartidos entre los laoradores; varios pozos públicos, 2 charcas y algunos algibes particulares; 2 escuelas de instrucción primaria y una cátedra de latinidad, pagadas aquellas de los fondos municipales, y esta con las retribuciones de los discípulos; una igí. parr. (San Blas), magnifico y sólido edificio con una esÍ> aciosa y hermosa sacristía; otras 2 iglesia ausiliares de aqueta (Sta. Maria y San Sebastian); 3 conv. de monjas ocupados por religiosas, franciscas, carmelitas y bernardas; otro que fue de religiosos franciscos y se halla cerrado y amenazando ruina, aunque su iglesia esta abierta al culto; 2 ermitas (San Ildefonso y la Soledad), un hermoso edificio que servia para entrojar los frutos de las tercias reales confina el término con los de las Mesas, Provencio, San Clemente, Minaya, Muñera, Osa de Montiel, Rincón del Bonillo, Alcaráz , Tomelloso y Socuéllamos; dentro de él se encuentran varias quinterías llamadas casas de campo, con pozos y algibes hermosos, y las ermitas de Sta. Ana, San Antón y Ntra. Sra. de la Caridad; esta bastante espaciosa, situado en una plazeta con 2 calles de paseo arboladas el TERRENO atravesado por el arroyo Coreóles, de escaso caudal y curso interrumpido y por el riach. llamado Zancara, mas abundante y permanente, es bastante árido y de mediana calidad ; tiene monte de mata baja y 2 cortas porciones de encina y roble, de propiedad particular, PROD. cereales, legumbres, vino, azafrán, leñas de combustible y buenos Eastos, con los que se mantiene mucho ganado lanar y cario y las yuntas necesarias para la agricultura; hay caza de liebres, conejos y perdices, IND. la agrícola, alfarerías do tinajas, ladrillo, baldosa y teja, molinos harineros de viento y agua, telares de lienzo y ropas de lana’, una tenería y varios délos oficios y artes mecánicas mas indispensables, COMERCIO-, esportacion del sobrante de frutos y prod.

de la ind. é importación de los art. que faltan, POBL. 1,61-8 5,255 almas.

_HISTORIA. Féchase la fundación de este pueblo en el año 1292, como ald. de Alcaráz, edificada en un solar dist.

una leg. de su actual situado; pero á los 6 años ya se le trae á esta por medio de real decreto, dictado en razón délas continuas pendencias y desgracias que ocasionaba su proximidad á Socuéllamos, que también hubo de retirarse por su ?¡arte. Los primeros veciudad de Villarobledo que en esta ocasión ijaron sus domicilios fueron Pedro Lozano González, Diego Calero del Castillo, Diego Alarcon de Furres, Blas Domínguez, Juan Martínez de la Plaza y Andrés López Muñoz, de quienes se conservan aun varios descendientes. Atribuyese su erección en v. independiente al rey D. Juan II. En efaño 4 407 había sido tanto el aumento déla población que fue preciso crear 2 ayudas de parr. mas adelante buho de crearse aun otra. Modernamente no solo cedió este incremento, sino que se declaró en gran decadencia. En el año 4S37 emigraron 500 vec en razón de la escasez sufrida , sin que haya podido reponerse aun de tanto menoscabo. En el año 1836 ocurrió la célebre batalla á que dio nombre esta población, batiendo el general Alaix y el malogrado D. Diego León, conde de Belascoain, á las fuerzas carlistas espedicionarias de Gómez, engrosadas con las de Cabrera.

Ocupada esta población por las tropas carlistas en 19 de setiembre de 1836, al mando de Gómez, Cabrera, Quilez y el Serrador, fue sorprendida por una división del ejército de la reina que mandaba el general Alaix. El primero de aquellos gefes, que ocupaba con su división uno de los dos barrios en que divide al pueblo un barranco, confiado en que las tropas de la reina se hallaban á mas larga distancia, ó en que estas no le atacarian; solo tomó la precaución de establecer una corta avanzada algo dist. de la población; mas el segundo , situado en el otro barrio con el resto de las fuerzas carlistas, y mas desconfiado y precavido, envió un confidente á indagar la posición de las tropas de la reina , y una descubierta de caballería con uno de sus ayudantes. Á Ja media noche de aquel mismo dia . y á pocas horas de su salida, regresó el espía y la descubierta, con la noticia de v»n aC*UKi i s e n a l ‘ aban próximas y en movimiento hacia \ i larrobledo Gómez desechó este aviso, mas Cabrera acaudillo a los suyos, y sin tocar cajas, empezóse á prevenir á todo evento; pero por pronto que se ejecutaron sus órdenes, estaba jjróximo el amanecer del dia 20, cuando apenas dos compañías de aragoneses se hallaban armadas y formadas fuera del pueblo, ínterin las demás salían en confusión procurando unirse á ellas, como los ginetes que salían también desordenados. En tanto las tropas de la reina se aproximaban por momentos, y las avanzadas mandadas por el intrépido coronel de húsares D. Diego León, se tiroteaban con los primeros. Gómez en este momento mandaba tocar diana; mas ya no era tiempo de prevenirse al ataque ni de tomar disposiciones; pues interpuestas las tropas de la reina entre las dos mitades de las fuerzas carlistas, no podian estas comunicarse. Cabrera, Quilez y el Serrador, con parte de sus batallones, se batían á la primera luz del dia, contra toda la columna que los atacaba, ínterin la otra mitad carlista podia ganar el campo libre, saliendo del pueblo á la desbandada. Alaix procuraba entretener la brigada de de Cabrera, mientras atacaba á la de Gómez para impedir la reunión de ambas aquella contenia con horroroso fuego el ímpetu de las tropas de la reina, siendo imponente y terrible el aspecto que presentaba el llano de Villarrobledo el denodado coronel D. Diego León con 150 húsares de la Princesa, 60 caballos del L.° y 5.» de ligeros y algunos infantes, sufrió una brusca acometida de la caballería carlista; y retrocediendo calculadamente hasta que la hubo separado de la infantería que la apoyaba, cargó sobre ella con destreza y bizarría envolviendo á los ginetes carlistas, que aunque mas numerosos no pudieron resistirle tan fiera y arrojada carga, si bien sostenida con mucho valor por los contrarios, les puso al fin en consternación, huyendo á escape á incorporarse con las masas de su infantería, que reunidas ya y mandadas por Cabrera, se vieron desordenadas por sus propios ginetes ciegos de terror atropellaron la infantería, introduciendo en ella la confusión y el espanto; el valiente coronel de húsares, sin abandonar la carga, repasó también tras ellos las filas enemigas, colocándose á retaguardia, al tiempo que un oportuno movimiento, ejecutado á paso de ataque por las dos columnas de infantería mandadas por Alaix las estrechaban por el frente, de modo que fue completa la derrota, sin quedarles otro recurso que la dispersión; pues fueron muy cortas las masas que unidas pudieron retirarse con algún orden. Cayeron en poder de las tropas de la reina 1,274 prisioneros, entre ellos 55 oficiales y gefes superiores; 2,000 fusiles, municiones, acémilas, 44 muías y algunos artilleros que servían las piezas, que á duras penas pudieron retirar; una bandera y las cajas del tesoro de la espedicion de Gómez. Señalado laurel adquirieron en esta brillante jornada el general Alaix y el coronel Don Diego León. Este último gefe, tan bizarro cuanto desgraciado, debió á ella la bien adquirida fama que le acompañó hasta en la tumba el general D. Isidro Alaix fue condecorado con la gran cruz de San Fernando, y después lo ha sido con el título de vizconde de Villarobledo.

Es patria de Fr. Diego Morcillo Rubio Auñon, arz. y 2 veces vuey del Perú; del Dr. D. Alonso Ortiz, compositor del misal mozárabe; de D. Blas Ortiz, canónigo de Toledo ; del célebre teólogo D. Pedro Ortiz, etc

VILLANAÑE

v. que forma ayuntamiento con Bellojin, en la provincia de Álava (á Vitoria 6 leg.), partido judicial de Anana (5/4), dióc y audiencia terr. de Burgos (15), ciudad g. de las Provincias Vascongadas SIT. en un llano y márgenes del r. Omecillo; CLIMA templado, y reinan los vientos N. y E. Tiene 60 CASAS divididas en dos barrios; casa consistorial, y una torre coronada de almenas con foso y barbacana, mandada construir el año 692 por el gran almirante godo del Océano, Rui Pérez, y se conserva en buen estado en esta torre, después de la batalla en que se perdió el ejército cristiano y se apoderó el mahometano del reino, estuvo el infante Don Pelayo hasta que fue llamado á Asturias para proclamarle rey. Hay escuela de primera educación para ambos sexos, frecuentada por 70 alumnos y dotada con 1,231 reales; iglesia

parr. (Sta. Maria) servida por 2 beneficiados; 2 ermitas (Ntra. Sra. del Pilar y Ntra. Sra. de Angosto), y 5 fuentes en el centro de la población ademas de otras varias en las afueras.

El TERM. confina N. Cárcamo yCaranca; E. Villamaderne; S. Barrio, y O. Villanueva; comprendiendo dentro de su circunferencia el desp. de Medropio, la venta ó cot. red.

del Monte, á la izquierda del r., y un monte poblado de encinas y pinos. El TERRENO es de L.a , 2.a y 3 . a clase; le atraviesan los r. Omecillo y Tumecillo, con un puente sobre cada uno antes de su confluencia, CAMINOS la calzada de Bilbao á Madrid, en buen estado -. el CORREO se recibe de Miranda de Ebro, por balijero. PROD. trigo , centeno, cebada, avena, alholbas, maiz habas, arvejas, patatas, alubias, lino y frutas; cria ganado lanar y de cerda; caza de perdices, palomas, codornices, ánades, liebres y raposos ; pesca de truchas, barbos, anguilas, íoinas y cangrejos, IND. ademas de la agricultura y ganadería hay una ferreria y 3 molinos harineros, POBL.-. 42 v e c , 298 almas CONTR. y RIQUEZA (V. ÁLAVA , intendencia

VILLALMANZO

Lugar con ayuntamiento en la provincia, audiencia terr., ciudad g. de Burgos (6 1/2 leg.), partido judicial y diócesis veré nullius de Lérma (4/2). SIT. en terreno llano, á la der. de la carretera de Burgos a Francia, con buena ventilación y CLIMA frió, pero s a n o , y espuesto á fiebres inflamatorias. Tiene 170 r \ s \ s ; 32 lagares; 30 corrales, y 24 diseminadas por el término; aquellas forman cuerpo do población, aunque separadas unas de olr..s, cuya irregularidad conserva aun de resullas del horroroso incendio que sufrió en el año 1812 por el ejército francés, ;i su retirada «lo la batalla de los Arapiles hay escuela de instrucción primaria, dotada con 48 fan. de trigo ; 3 mesones; una venta del concejo, sobre ¡a calzada ; un alcementerio, estramuros de la población; 2 fuentes públicas, próximas á esta, de cuyas aguas se surte el vecindario; una iglesia parr. (la Asunción) servida por 3 beneficiados con la cura y 2 racioneros. El término confina N. Toirecilla y Villamayor de los Montes; E. Sta. Inés; S. y O. Lerma ; en él se encuentran muchas fuentes que forman un arroyo; sus aguas sirven para labar las ropas y regar la vega, y después se introducen en el r. Arlanza. El TERRENO participa de monte y llano; es de mediana calidad; le cruza la citada carretera, y un CAMINO de herradura que conduce á Villafranca, Montes de Oca y la Rioja. PROD. cereales, legumbres y vino; cria ganado lanar y cabrio, y caza mayor y menor, POBL. 467 vec, 670 almas CAP. PROD. 2.363,400 reales

LMP. 223,609. CONTR. 14,69o reales 1 mreales

VILLALAR

v. con ayunt, en la provincia, audiencia terr. „… „ƒ g. de Valladolid (7 leg.), partido judicial de La Mota del Marques (4), diociudad de Zamora (6) .. SIT. sobre un pequeno cerro , a la m i i r p – ! Z ( I – del r. Hornija, en la carretera que conduce de 1 ordesillas a Toro, goza de buena ventilacion y su CLIMA es propenso a tabardillos y fiebres intermitentes malignas tiene 48o CASAS, la consistorial, un rollo o columna, tristemente celebre porque en el se clavaron las cabezas de los gefes de los comuneros Padilla, Bravo v Maldonado, cuvos restos mortales que yacían al pie de dicho rollo, fueron exhumados en el año de 1821 y colocados en una urna, se depositaron en una de las parr. de la v. y luego fueron trasladados á la catedral de Zamora; hay escuela de instrucción primaria, de 4 . a clase , dotada con la de reglamento; dos iglesia parr.

(Sta. Maria y S. Juan). Confina el término con los de Vega de Val de tronco, Torrecilla del Bio, Marzales \ Pedrosa del Rey el TERRENO, bañado por td Hornija, es arenisco, flojo y de mediana calidad, CAMINOS los locales y la indicada carretela.

El CORREO se recibe \ despacha en La Mota, PROD. cereales, vino y muchas legumbres; se cria ganado lanar y mular IND. la agrícola COMERCIO, esportacion del sobrante de frutos, é importación de los art. que faltan, POBL.  136 v e c , 756 almas CAP. PROD. L.261,200 reales IMP. 126,120.

Es célebre por la batalla que se dio en sus campos entre las fuerzas reales y las de las Comunidades, el 23 de abril de 1521; siendo esta acción el golpe de muerte á aquel alzamiento y costando la vida á innumerables con los valientes capitanes Juan de Padilla, Juan Bravo y Francisco Maldonado, quienes hechos prisioneros fueron luego decapitados.

VILACOBA (SAN JUAN)

feligresia en la provincia de Pontevedra (5 leg.), partido judicial de Puenteareas (4/2), diócesis de Tuy (4 4/2), ayuntamiento de Salvatierra SIT. al E. de la cap. del partido, ó inmediaciones de un riach. afluente del Tea; el CLIMA es sano. Tiene 52 CASAS en los L. de Baliño, Casal, Lagoa, Pénela, Porta-Pereira y Reguengo. La iglesia parr.

(San Juan) es aneja de la de San Lorenzo de Oliveira. Confina con las feligresia de Lira, San Pedro de Batallanes y Guillade.

El TERRENO es de buena calidad, PROD.  trigo, maiz, centeno, patatas, legumbres, maderas y frutas; se cria ganado vacuno y lanar, POBL.  52 v e c , 208 almas, CONTR.; con su ayuntamiento (V.).

VELEZ-MÁLAGA

ciudad con a y u n t . y cabecera del partido judicial de su nombre en la p r o v . , d i ó c ‘ y dist. marítimo de Málaga, aduana de c u a r t a clase (5 l e g . ) , audiencia t e r r . y ciudad g. de Granada (13).

SITUACIÓN Y CUMA. Se halla á la dist. de 1/2 legua del Mediterráneo en la falda de una pequeña colina, esteudiéndose de N . á SE. por la llanura inmediata, que baña el r . á que da nombre la población •. combátenla libremente todos los vientos y con mas frecuencia el Aquilón, conocido del vulgo por t°rral, cuya circunstancia hace que su clima sea muy templado y saludable, sin conocerse otras enfermedades por lo común que tercianas y tabardillos.

INTERIOR DE LA POBLACion Y SUS AFUERAS. Tiene la ciudad 2,729 casas generalmente de 3 pisos y de una regular distribución i n t e r i o r , y como otras 4,500 esparcidas por el t é r m . ; 5 plazas, la d é l a Constitución, de la India, de la Esperanza, de las Carmelitas y de San Juan de Dios, con otras 3 pequeñas, San Francisco, el Carmen y la Pescadería.

En la primera ó sea la de la Constitución se ve un s o portal de 8 arcos que dan entrada al edificio del pósito, que ocupa uno de los lados de la plaza. A su frente se halla ja elegante casa de ayuntamiento edificada en 4 597 ; su loog. es igual á la de la misma plaza, y su altura de unas 35 varas, notándose en ella la sala de secretaria que sin duda es hoy de las de mejor gusto de la provincia Las calles son en lo general cómodas y anchas, si bien la mayor parte irregulares y en declive por razón de la colina sobre que están formadas su empedrado tampoco es muy bueno, pero en su d e fecto son limpias y aseadas, lo que se debe al esmero que en ello tienen los veciudad Hay una cárcel insegura y de cortas dimensiones, que consiste en una mala habitación baja i n salubre y sin ventilación; un patio pequeño, que es la estancia ordinaria de los encarcelados, y una especie de calabozos subterráneos húmedos y oscuros, que sirven para recogerse por la noche. Los establecimientos de beneficencia son el hospital de San Marcos para enfermos; la casa de maternidad para niños espósitos, y el hospicio de San Julián, donde se amparan y pernoctan los pobres transeúntes.

El primero cuenta con 3,64 2 reales de r e n t a , procedentes de varios censos que tiene á su favor; el segundo cobra28,080 r s . por repartimiento hecho á los pueblos del p a r t . , y el ú l timo posee 242 r s . de otros 2 censos, que se invierten en Jos reparos de la casa que sirve de albergue. Hay una escuela pública de primeras letras con la dotación de 5,500 r s .

anuales á l a q u e asisten 429 alumnos; otra de niñas concurrida por 4i discípulos, cuya maestra está dotada con 4,100 r s . al año pagados, asi como aquella, de los fondos de propios; una particular para niños sin mas dotación que las retribuciones de los 30 alumnos que á ella concurren , y 22 amigas también particulares distribuidas en los 6 cuarteles en que se divide la c . , asistiendo á todas ellas como unas 342 educaudas.

Las ig|. parr., conv. y ermitas que existen dentro y fuera de la población son las siguientes Ntra. Sra. de la Encarnación. Esta iglesia fue fundada por San Pedro , quien dejó en ella por primer obispo á su discípulo San E ^ e n e t o , como lo afirman Fabio Dextro, Veda, Usuardo, Julián Pérez y otros autores. Duró su silla episcopal 300 años hasta el martirio de su último oh. San Irineo que fue trasladada á Málaga. Conquistada Velez-Málaga en 27 de abril de 4487 por los reyes Católicos D. Fernando y Dpqa Isabel, se consagró su mezquita por el eminenUsi mo cardenal D. Pedro de Mendoza, arz. de Toledo, celebrando en ella la primera misa el dia 3 de mayo del mismo año , erigiéndola en parr., y dándole el nombre de que ya hemos hecho mérito , cuya erección fue confirmada en Jaén por los mismos príncipes en 7 de mayo de 4489. Es un edificio bastante sólido de orden semigótico, situado al N. de la ciudad y en su p a r t e mas elevada consta de 3 naves de 53 varas de long., 42 de l a t . la nave de enmedio, y 6 4/2 las c o l a t e rales.

Su elevación interior es d e 46 varas hasta el arranque d é l a armadura que es de tablazón labrada con bastante primor. Tiene un coro proporcionado con su buena sillería de obra reciente, y un magnífico órgano costeado por la fábrica al final del siglo pasado. Su retablo mayor, construido en Roma poco después de la erección parroquial, es magestuoso y c o n s t a d o 3 cuerpos, el primero jónico, el segundo compuesto y el tercero corintio , con bajos relieves en los pedestales de sus columnas, que representan diferentes pasages de la vida d é l a Virgen, y varias figuras del apostolado entre sus intercolumnios. El misterio de la Encarnación ocupa su centro, y en su último cuerpo hay un crucifijo; siendo todas estas esculturas de un mérito correspondiente á lo demás de la obra. La capilla del Sagrario, ue es de las mejores del obispado, fue edificada e n e l año e 4818, á espensas de su cofradía es de orden compuesto en su interior, aunque su frontis y pórtico pertenecen al jónico contiene un elegante y arreglado tabernáculo con una lindísima escultura en su c e n t r o , que representa al Buen Pastor, obra del célebre artista malagueño León la parte arquitectónica de la capilla y tabernáculo se debo al inteligente tallista D. Antonio de la J a r a , natural del mismo pueblo de Velez-Málaga. Esta preciosa iglesia se halla estramuros por haberse arruinado la mayor parte de su feligresia, pero tiene su ayuda de p a r r . , llamada Sta. Rosalía , que es una ermita poco notable, si bien con la ventaja de estar situada en el centro de la población actual. Los ministros y d e – mas dependientes que cuenta para su servicio, son un cura párroco, que lo es también de su anejo Cagis, 5 beneficiados curados, un medio beneficiado organista, un teniente de cura , 2 sacristanes mayores, otro menor y 4 acólitos tanto el curato como los beneficiados son perpetuos y sujetos á oposición en concurso general; perteneciendo su p r e sentación y patronato á la Corona, y la provisión al o r d i nario.

Consérvase en esta iglesia el cáliz, la patena y ornamentos con que dijo la misa el dia de su consagración, regalados por los mismos reyes sus conquistadores; las demás alhajas que posee nada ofrecen digno de atención; debiendo solo advertir que en su t o r r e , que es de 480 pies de elevación, se encuentra el único reloj público que hay en la ciudad.

San Juan Bautista. Esta parr., situado en la plaza de la Constitución, es un edificio de bastante solidez y de orden semigótico en su i n t e r i o r se compone de 3 naves de 58 varas de long., 13 de lat. la principal, y 11 las colaterales, siendo su altura do 17 varas hasta el arranque de la a r m a dura , que e s de tablazón de mucho mérito. Tiene un coro capaz con sillería de buen gusto, construida al final del siglo pasado, y un órgano grande pero regular; su adorno interior nada p r e s e n t a d o notable. De sus 12 altares solo deben citarse el de San Pedro y el de Ntra. Sra. de las Angustias , ambos de orden corintio y muy arreglados á los preceptos del a r t e . La capilla del Sagrario, reedificada en 1830, contiene un magnífico tabernáculo de orden compuesto y de igual época , obra del mencionado artista Jara-, la bautismal es de bastante mérito, labrada en el año de 1619 á espensas del señor D. F r . Alonso de Sto. Tomás, o b .

de Málaga, quien fundó también la capilla de música que todavía «existe; pero lo que mas llama ia atención en este templo es su elegante sacristía de planta y orden corintio, adornada lujosamente con cajonería de maderas escogidas, espejos y pinturas , sobresaliendo 3 esculturas del celebre Mena , que son un San J o s é , un crucifijo y una Sta. Bárb a r a su construcción tuvo lugar en 4789, habiendo sido costeada por el Sr. D. Manuel Ferrer y Figuereda , que asi mismo fue ob. de Málaga. Sirven esta iglesia un cura párroco, 7 beneficiados, un medio beneficiado organista, un teniente de cura , 2 sacristanes mayores sochantres, otro menor y 5 acólitos. Los curas y beneficiados de las dos p a r r . de que hemos hecho mérito forman la corporación capitular y de* piden reunidos en todos los asuntos concernientes á;sus iglesias.

Santiago. Suprimido conv. de observantes, fundado por los reyes Católicos en 10 de setiembre de 1499. Es un edificio , aunque capaz, de poco mérito , á no ser su escalera , que se presenta siempre entre los arquitectos como un buen modelo de las d e s u d a s e situado al S. delaplazuela que lleva su nombre; el templo se compone de 2 naves de orden toscano, de 40 varas de long. y 14 de altura hasta el arranque de la bóveda. Entre las muchas esculturas de que esta adornado, solo son de mérito sobresaliente un San Pedro de Alcántara, de 5 pies de elevación, y un crucifijo de tamaño natural hecho en América. Hay un retablo de orden compuesto en el altar de Jesús Nazareno, construido en el año de 1821 por el célebre Jara, y costeado por la hermandad; un órgano regular y una sillería decente en su coro alto. Esta iglesia fue también una de las p a r r . erigidas por los reyes Católicos, y como tal se consideró hasta la fecha do su cesión á los observantes, habiendo sido agregados sus ministros á la ya citada parr. de San Juan Bautista.

Su comunidad constaba al tiempo de la esclaustracion de 8 sacerdotes , 6 coristas y 4 legos; estando hoy la iglesia abierta al culto público con un capellán para su servicio.

San Antonio de Padua. Suprimido conv. de capuchinos, situado estramuros al S. de la población Lo fundó el licenciado Sebastian Diaz de Briviesca, beneficiado de San Juan y vicario ecl. de Velez-Málaga , en el dia 2 de enero de 1649, por concesión que con igual fecha hicieron en Granada ante Cristóbal López Coba , el provincial y definitorio de la orden , con beneplácito del P . General. Es un edificio capaz y de bastante regularidad la iglesia, que se halla abierta al culto público con un capellán para su servicio; es de una sola nave de orden toscano , contando 31 varas de long., 12 de lat. y 14 de altura hasta el arranque de la bóveda. La comunidad de este conv. se componía al tiempo de la supresión de 12 sacerdotes , 4 legos y 4 donados.

San José de la Soledad. Suprimido conv. de carmelit a s descalzos, situado en la parte occidental de la plazuela que lleva su nombre, y fundado en 1601 por el venerable padre Fr. Antonio de Jesús, primer carmelita que se descalzó, discípulo de Sta. Teresa y compañero de San J u a n de la Cruz. Este edificio ha sido de los mayores de la o r d e n , y todo él de una solidez estremada, si bien se encuentra hoy casi arruinado en su mayor parte la i g l . , que es muy c a p a z , consta de 3 naves de 46 varas de l o n g . , 11 de lat. la principal y 7 las colaterales; siendo su elevación de 22 varas hasta el arranque de la bóveda, que es de tablazón. Hay en este templo varias esculturas de bastante mérito, pero las mas sobresalientes son las de San José, San Juan Evangelista y una Magdalena también existe una magnífica pintura al óleo que representa la Concepción de Ntra. S r a . , la cual es la mas notable que se conoce en la ciudad e n t r e todas las de su clase. La iglesia está abierta al culto público con un capellán para su servicio; y su comunidad constaba, cuando la esclaustracion, de 8 sacerdotes y o legos.

San Marcos. Suprimido conv. de Hospitalarios, fundado como hospital en 1487 por los reyes Católicos, y cedido á los padres de San J u a n de Dios, poco después de la fundación de su orden. Es un edificio ne muy g r a n d e , donde permanece aun el hospital á cargo de la Junta de Beneficencia ; siendo las enfermerías bastante capaces y bien ventiladas. La iglesia es también pequeña, con 2 naves de unas 20 varas de l o n g . ; estando igualmente abierta al culto público con un capellán para su servicio. Su comunidad se componía, al tiempo de la estincion, de 5 religiosos y entre ellos un sacerdote.

Nuestra Señora de Gracia. Convento de clarisas, fundado en el año de 1503 por Doña Beatriz de Arellano, quien las dotó con una gran porción de fincas de todas clases, que en el dia están aplicadas al Crédito Público. Se halla situado en la espaciosa calle de su mismo nombre, y es un edificio de bastante estension y solidez. Su preciosa iglesia es de una sola nave de orden corintio, con 40 varas de long., 40 de l a t . y 15 d e a l t u r a , estando lujosamente adornada de bellos a l t a r e s , pinturas y esculturas, entre las que se d i s tingue un cuadro de Ntra. Sra. de Guadalupe de una b e lleza singular, pintado en América.

Jesús, María y José, Convento de carmelitas descalzas, situado en la parte occidental de la plaza de su nombre su fundación tuvo lugar en el año de 1699 por las venerables madres Manuela de San José, natural de Antequera, y Francisca del Carmelo, de Ecija, cuyos cuerpos se veneran y conservan enteros en el mismo conv. El edificio, aunque no de grande estension, está bien acabado y es de bastante solidez; constando su iglesia de una sola nave de orden t o s – cano con 31 varas de long. y 9 1/2 de l a t . , muy recargada de primorosos adornos, si bien ninguno puede citarse cómo modelo de bellas artes.

Nuestra Señora de los Remedios. Precioso santuario donde se venera esta Vi-gen como patrona de la ciudad Situada estramuros, en lo alto de un cerro á la parte oriental y como á unas 300 varas de la p o b l . , sobre una plaza c u a d r i longa de 150 pasos de long. y 105 de l a t . , habiendo sido mezquita en tiempo de los árabes. El edificio es de u na nave de orden toscano, con 40 varas de l a r g o , 25 de ancho y 12 de elevación hasta la bóveda. Se fundó en el año 1649 por la piedad de los fieles, con cuyas limosnas se sostiene el culto y el capellán que hay p a r a su servicio. Es iglesia muy concurrida de los v e c . , y está medianamente adornada con varios a l t a r e s , si bien nada se ve en ella de mérito recomendable.

San Sebastian. Esta ermita se halla al NE. de la c en el arrabal de su nombre, habiendo sido fundada en 1489 por los reyes Católicos, en memoria de la batalla que d i e ron contra los moros en la conquista, y por haber perecido en aquel sitio un escudero del r ey llamado Sebastian Sánchez Pelao, que se interpuso entre los enemigos y aquel para librarlo de un bote de lanza que contra él se dirigía.

Tiene 3 naves de poca estension y de mala arquitectura, sosteniéndose su culto y el capellán con varios censos impuestos sobre las casas y t i e r r a s limítrofes.

Nuestra Señora de la Esperanza. Ermita y ant. h o s pital de lazarinos, fundada en 1508 por Doña Beatriz de Arellano, quien la dotó con varios censos y algunas fincas que hoy pertenecen al mayorazgo del Sr. vizconde de Sancho Miranda. Sit. al Oriente de la plaza de su nombre; es de una sola nave de 16 varas de l o n g . , 7 de lat. y 7 de a l t u r a , y tiene un capellán para su servicio.

Nuestra Señora de la Cabeza. Ermita y cementerio situado

en Ja p a r t e occidental y á 1/2 cuarto de hora de la población, sobre una pequeña colina q u e descuella en la llanura. Tiene un atrio de 3 a r c o s , y consta de una sola nave de bastante solidez, con 20 varas de long. y 7 de l a t . , habiendo un c a pellán para su servicio. Al costado der. de la iglesia y bien ventilado se encuentra el cementerio, que construyó la municipalidad en el año de 1805. Otras muchas iglesia y e r mitas fundaron los reyes Católicos al tiempo de la conquist a , que ya no e x i s t e n , las que dotaron con tierras en el repartimiento que de estas se hizo.- tales fueron San Juan Evangelista, San Roque, Sta. Cruz, San Cristóbal y Ntra.

Sra. de los Reyes. Entre los edificios notables de esta c , ademas de la i g l . , pósito y casas consistoriales, de que h e mos hecho mención , se encuentra un palacio perteneciente á los Sres. marqueses de Veniel, residencia de los c a p i t a nes generales mientras la tuvieron en Velez-Málaga. Hay por último un bonito t e a t r o , construido en el año de 1803, y 6 fuentes públicas con sus correspondientes acueductos, si bien son escasas de agua y la mayor parte de no muy buena calidad.

TÉRMINO Y CONFINES. Su estension es de 2 1/2 leg. de N. á S. y 5 de E. á O . , confinando por N . con los t ó r m . de Viñuela y Benamargosa; por E. con el de Algarrobo; por S. con el mar Mediterráneo, y por O. con los de Benamocarra , Macbaraviaya y Renagalbon.

CALIDAD y CIRCUNSTANCIAS DEL TERRENO. En general es arcilloso, pizarroso y calizo por la p a r t e de los montes , y muy apropósito para criar vides, olivos y otras producciones.

Las tierras de r i e g o , que son las menos, se forman de la porción mas escelente y escogida de la a n t e r i o r , por cuanto las lluvias las a r r a s t r an tras s í , y cuando llegan los arroyos, r. y torrentes á la parte llana, la depositan en clase de lava mezclada con los estiércoles que en su curso recogen, formando el mejor abono, que para producir los preciosos frutos, de que hablaremos en su l u g a r , puede dársele. No hay t i e r r a s nuevas en el t é r m . que puedan r o turarse , por estar todas reducidas a c u l t i v o , ni bosques de ninguna especie de arbolado para madera de construcción y leña Tampoco se ven deh. para pastos ni prados de secano, encontrándose solamente en las márg. del r algunos pequeños sotos, que sirven para defensa de las haciendas, compuestos de cañas-veras, mimbres, sauces, chopos y álamos blancos.

(Continua en el original)

VASCONIA

la primera idea que ofrece este nombre , es la de una nación ant. enriscada allá en las escabrosidades del Pirineo central y occidental, con una demarcación que es preciso deducir de la reducción de los pueblos que le atribuye Ptolompo; pero asi este geógrafo como todos los del imperio romano, á quienes por lo mas debemos el c o nocimiento de nuestras antigüedades, tuvieron noticias muy mezquinas de esta nación. A pesar de ello, los escritores nacionales que les h a n sucedido hasta nuestros dias, se h an limitado á investigar lo poco que los antiguos supieron d e cirnos, dándose por muy satisfechos con atribuirse el honor de haber entendido y reducido mejor que otro las doctrinas de aquellos. Siguiéndolas según sú modo de ver cada uno, todo el conato ha consistido en rastrear los inciertos limites que por ellas cabe establecer, promoviendo á veces interminables cuestiones para la introducción de insignificantes diferencias. Numeroso es el catálogo de los escritores eminentes que se han esforzado en ilustrar las antigüedades vasconasjmas nadie ha concebido que h o y , entrando en esta cuestión con la debida emancipación mental, fuese posible razonar un sistema nuevo, que casi orille la a u t o r i dad de los mismos Estrabon, Plinio y Ptolomeo. no obstante ser estos los grandes maestros de la ciencia. El sabio Guillermo de Humboldt se ocupó ya en examinar las investiga- | ciones sobre los primitivos hab de España por medio de la lengua vascongada, y hasta allí mismo debe remontaisc quien pretenda conocer cual corresponde la Vasconia , d e jando las noticias suministradas por los geógrafos mayores para á su tiempo citarlas como comprobantes de la idea que entonces se tuviera de ella.

Ya hemos espuesto en diferentes art. de la presente obra nuestra opinión sobre la primera población de España , t r a y é n – dola de O r i e n t e , donde colocamos el ibón de las naciones, en orden contrapuesto al establecido por el eruditísimo Baílly, que lo puso en el Norte , con el necesario sacrificio de sus creencias mismas, hecho á un propósito apasionado. Una razón física esplicada por las historias sagradas y profanas, por las tradiciones de todos los pueblos y por las memorias conservadas en todo el Occidente marcan el curso de la población v de la luz moral regido por el de la luz física, y no hay duda, que al hablar de los vascones ti atamos de aquella ralea primitiva Asi supuesto, ¿podremos d e c i r , cual muchos escritores, que son los primeros iberos? En todo caso sería dando á esta voz un sentido figurado si por ello se entiende que son los primeros hab. de la I b e r i a , cierto. Y con frecuencia lo haremos nosotros mismos. Pero no se olvide, que también mas de una vez hemos establecido ser el nombre Iberia y la alcurnia ibera muy posteriores á aquella población y de procedencia opuesta los iberos son ya aquella reacción del N., que mas allá de los tiempos mythicos sabemos alcanzó ya hasta los Algarbes (antiguos cynetes ó c u neos) •. son los oriundos de aquellos orientales que, habiendo dominado los montes Rífeos, acrecentándose en el salvage origen de los hielos, degenerados por la dureza de estos so desprendieron luego sobre los poseedores de climas mas felices; desprendímientohorrible, que asoma casi periódicamente en la historia del mundo, siendo uno de los orígenes arrobadores de los progresos morales. Es preciso deslindar asi los orígenes y nombres de los vascones é iberos aquellos son orientales y estos del setentrion.

Siendo los vascones procedentes de aquella población hispánica, que viene significada en la mitología bajóla partición del mundo entre ‘los dioses, y en las fábulas del Hércules primitivo v de la conquista de Pan; en las letras sagradas bajo la dispersión de ios noachidas e t c . , ¿diremos con los apadrinadores de la lengua vascongada que es la traida por aquel pueblo originario que la recibiera del mismo Dios?

También hay un distinguido humanista moderno que , ilustrando los orígenes de los idiomas con una independencia digna de imitación, aunque fuera de apetecer otra ostensión en su trabajo, al llegar á este punto dice con harta j u s ticia «¿Quién no se lastima al ver que hombres eminentes han presentado como originario el dialecto vascongado, t e niendo con frecuencia frases dificultosas por palabras, y siendo el resultado de la amalgamación de distintos idiomas, dura y bárbara, como decía del francés cierto escritor, con relación al tiempo anterior á su cultura?» Es , sin embargo, muy de aprovechar la luz que produce el examen de este idioma; pues aunque sea tal como aquí se le califica, en medio de su degradación asoman aun innumerables raices orientales, que manifiestan ser donde este origen se ha conservado mejor, preponderando siempre sobre los demás allegados; sin que neguemos por esto que los trastornos sufridos en tan larga serie de siglos, durante la cual repetidas veces se han visto retroceder las naciones á su infancia, las frases mas cspresivas hayan parado en palabras de dificultosa pronunciación, ya como resultado de la misma escelencia de su origen, ya porque á estas mismas palabras so hayan unido otras de distintos idiomas, estremando su dureza.

La lengua vascongada es siempre un comprobante del origen oriental de esta nación.

Si la nación vascona data de la primitiva población de Españ a , ¿á qué época reduciremos su diferencia respecto de las demás regiones de la Península? ¿Cabrá establecerla desde su mismo origen , cuando este hermana á los antiguos vascones con el resto de los españoles? No hay duda q u e , á pesar de esta omonia originaria , hubo de existir desde entonces mismo cierta diferencia entre los hab. del Pirineo y los de las llanuras; por lo menos seria desde el principio un deslinde geográfico que pronto á la acción respectiva de las localidades vendría a ser característico. El hab. de Jos riscos y las escabrosidades, el hombre obligado á luchar con la naturaleza brava del origen de los rios, que solo se presta á la gran vegetación, para obtener una subsistencia siempre escasa y trabajosa, no puede menos de diferenciarse del dueño de las llanuras, que espontáneamente le rinden lo necesario, tras de lo que solo encuentra el hombre el abandono, la pereza y todos los vicios entretanto el montañés no puede menos de ser sobrio, ágil, a c t i v o , inquieto y laborioso , y he aqui el origen de la nacionalidad vascona, del que este mismo nombre es un recuerdo todavía.

La radical del nombre Vasconia ó Vascon, es conocidamente originaria, recibida como t a l e n diversos idiomas, y ha ido variando de formas, según las pronunciaciones Ask, Eusk, Osk, Ausk, y Vask ó Bask, de donde vienen las voces modernas Vascon ó Vasco, Vascuenz, Vascongados, Vizcaya y Gascuña. En el griego, donde también aparece esta radical, nos resulta esplicada, derivándose de ella el verbo askeo, estar inquieto, agitado, e t c . , cuyo concepto cuadra tanto al pueblo del Pirineo no hay duda que esta fue su razón denominante y este el significado de la voz Vasconia ó Enskaldunia. El ilustrado Cortés le da también est e sentido; pero mientras nosotros acudimos al griego solo por una espheacion, en la inteligencia de que el griego y el vascuenz han recibido de un origen común la radical mencionada, él supone que la voz Vasconia se ha formado del participio Ascon nosotros, que escaseamos mucho mas los orígenes griegos, no encontramos razón para admitirlos en unas regiones desconocidas á aquella nación hasta que la conquista romana franqueó la entrada en ella á los estrauj e r o s , quienes vinieron ponderándonos su aislamiento y su barbarie. Otros han esplicado la voz Vasconia diciendo que «es de origen vascongado, compuesta de la palabra vaso »que significa monte, y el caso del nombre co, puesto según »reglas del idiona; de «suerte que vasocoy por contracción »vasco, viene á significar lo mismo que del monte ó monetarias, de cuya palabra formaron los latinos el sustantivo uVasconia, siguiendo los preceptos de su lengua.» Pero toda esta esplicacion está rebosando de ignorancia. La e s puesta anteriormente cuenta ademas en su apoyo los dictados de inquietos y ligeros que dieron á los vascones Avieno v Silio Itálico, acreditando asi ser estas las principales cualidades características de este pueblo, y que por consiguiente pudieron ser también sus denominantes s basta esta razón para aducir en apoyo de nuestra doctrina los testos de aquellos dos insignes españoles, sin que avancemos á suponer que, conociendo ellos el significado del nombre vascon, quisieron traducírnoslo en los sinónimos latinos tnquietus y levis; lo que seria una suposición harto aventurada.

Esta primera consideración de la nación vascona, por lo que hace al concepto geográfico, viene á quedar arrinconada tal vez mas allá de 16 siglos antes de la era cristiana; acaeciendo por las gargantas del Pirineo la grande irrupción íbera que hemos indicado. Entonces los vascones, arrollados por los bárbaros del Norte, se ladeaion á la invasión , dejando libre paso á aquellos paia que se derramasen por los mejores t e r ritorios tfe la Peníusula, especialmente al N . , 0 . , S. y cent ro de ella. Los vascos apoyados de sus riscos, quizá d e s preciados por aquellos bárbaros á cuya vista se dilataban regiones mas felices, volvieron al dominio esclusivo del valle del Ebro desde su nacimiento hasta su confluencia con el Segre la Vasconia quedó entonces casi con la integridad de su pureza, deslindada de otra nación gemina y que g e neralmente se liama, aunque con poca propiedad, ibera; los montes Idúbeos y los Pirineos limitarou la ralea primitiva libre del general contagio; pero de todos modos habia sido grande para ella misma la catástrofe sufrida; la d e s gracia hizo al vasco mas indómito y mas fiero; la antigua cultura de los paises comarcanos, cuyos efectos aspiraba con resultado contra la natural tendencia de su situación á la dureza, habia sucumbido á la invasión; esta se repitió mas tarde y como 6 siglos antes de Jesucristo con mayor resultado sobre la Vasconia misma-, los vascones por fin participaron de la barbaiie céltica ó s c y t h i c a , aunque no se cruzasen entre ellos las castas como en otros paises, donde apareció la nación celtíbera. Asi pudo decir Estrabon, que todos los montañeses del N. de la Iberia, los yalecios, los astures, ios cántabros y los vascones, se asemejaban en su modo de vivir. Allá puede fecharse el origen de aquella ferocidad tan decantada por los historiadores y poetas romanos, y la introducción del politeismo e n t r e los vascones, que generalmente, aunque sin razón alguna, se ha atribuido á los griegos y á los romanos, constando que en tiempo de Sertorio les era común el culto de los dioses á la manera de Roma y tenían fama entre los romanos mismos de ser los mas grandes conocedores del porvenir por el vuelo de las aves (Lamprul., invit. Alex. Sev.). Muchos siglos antes de nuestra era hacian sacrificios humanos al modo galo, con la particularidad de creer que las almas de las víctimas q u e daban endiosadas por el sacrificio (Prudencio). Eran sumamente belicosos ligeros en sus armas y modo de guerrear, ni siquiera llevaban cubiertas sus cabezas; eran terribles en los encuentros y su ímpetu arrollador irresistible á sus cont r a r i o s en casos de absoluta necesidad no escrupulizaban comer la carne humana (Valerio Máximo), y les era privativa aquella heroica institución tan celebrada de los antiguos, por la cual, según espresion de César, ciertos valientes vinculaban sus vidas á un caudillo para no sobrevivirle, muriendo á su lado en la batalla ó suicidándose si no conseguían fenecer eu el trance.

Los vascones, sin conocer en su aislamiento mas estranjeros que los bárbaros, cuyas invasiones no habian acertado á atajar en las gargantas del Pirineo, conservaron largos siglos la ferocidad que estas desgracias les produgeran y que aquellos les comunicaran, estableciéndose en s us confines occidentales y del Sudeste, donde la última irrupción mencionada produjo la nación celtíbera Estrabon atribuyó aun la fiereza y barbarie de los cántabros y vascones, cuya vida vino á ser la misma, al poco trato y sociedad con las naciones cultas. ¿Creeremos hallar ya un hecho histórico c i e r t o , perteneciente á este pueblo, en la grande espedicion de Aníbal sobre Italia? Nada tendí ia de estraño que un pueblo t a n dado á la guerra y que como sus vecinos los cántabros y celtíberos, la buscaría dentro de sí mismo cuando no la encontrase en el e s t r a n g e r o , bu- Diese enviado algún contingente voluntario á la fama de aquella espedicion, negociado por el púnico; pero es poco Erobable esta negociación con un pueblo que siglos después abia de ser aun calificado de bárbaro y fiero, por su poco comercio y sociedad con las naciones cultas. Menos podia ser este contingente obligado; pues « Anibal en su espedicion á los Vacceos no pudo llegar á los Várdulos, ni mucho menos á los Vascones….» (Cortés); y estos pueblos quedaron con la integridad de su primitiva independencia.

Cuando Silvio Itálico va nombrando bajo las banderas de Anibal los pueblos principales de España, lo hace por mera amplificación histórica, y pinta las gentes conocidas en su tiempo como si lo hubieran sido en el que acaeció la espedicion aquella. Desde la primera entrada de los Escipiones en España se cree fechar las relaciones entre vascones y romanos; p e r o , en todo caso, hubieron de ser muy débiles; fallando razón que los robusteciera cierta apartada la Vascunia del teatro de la guerra entre cartagineses y romanos, permaneció en absoluta incomunicación con unos y otros, sin alternar en una lucha que miraba como agena. D. Miguel Cortés y López se esfuerza en probar que Tiberio Sempronio Gracho engrandeció ya una. población vascona y le dio su nombre para que sirviese de monumento de su gloria; mas lejos de persuadirnos sus razones, por mas fuerza que les dé el profundo respeto, que justamente tributamosáeste escritor distinguido, creemos que aquella ciudad estuvo en la Celtiberia, cercana a l s i t i o d e s u memorable triunfo, obtenido en las faldas del Moncayo, á algunas millas de la Vasconia (V. lloréis, Grachuris y Agreda); y que los habitantes de esta región eran mirados aun por los romanos como desconocidos, indómitos y temibles en medio d é l a situación pacifica que estaban conservando. Por fin se cambiaron las cosas al asomar la guerra sertoriana.

La partp meridional de la Vascouia fue muy adicta á Sert o r i o ; en su partido se inmortalizó Calahorra (V.), y descolló la admirable institución vascona de aquerenciarse los soldados con su caudillo hasta la m u e r t e , de lo que ya hemos hablado. Después do asesinado Sertorio, todos estos valientes sirvieron de holocausto á sus manes y á la Tierra, madre de todos los mortales; véase el curioso epitafio puesto á aquellos héroes Hinc multce quce se manibus Q. Ser toril Turmas, et Térros Mortalium omnium parenti Devovere, dnm, eo sublato, Super esse tcederet, et portiter Pugnando invicem oecidere, Morle ad prcesens óptala jacent.

Válete, posterL.

«Aquí se han sacrificado numerosos batallones á los mane« de Q- Sertorio, y á la T i e r r a , madre de todos los mortales.

Después de la perdida de su gefe, la vida les eia insufrible carga. y supieron hallar la muerte, objeto de sus anhelos combatiendo entre sí. Descendientes, adiós.» Algunos han atribuido este monumento á soldados romanos que se inmolaran á la memoria de sus generales Publio y Neyo Escipion; pero se acomoda mejor á los vascones y á esta época.

También hubo vascones que estuvieron contra Sertorio, quien por este motivo castigó á ios cascantinos; Pompeyo recorrió la región y, para afianzarla en el dominio romano, erigió en ella la ciudad de Pompegopolis (Pamplona, v.). Desde entonces las continuas relaciones con los romanos fueron reduciendo su anterior dureza, aunque sin menoscabo de su ardimiento guerrero. Asi fue, que posteriormente en la conquista de las Galias por Julio César asomaron también los vascones por la otra parte del Pirineo en ausilio de sus vecinos, y ademas de su genial denuedo, llevaban al frente generales muy diestros en pelear á la romana, amaestrados á las órdenes de Sertorio. Sin embargo, P. Craso los batió con menos g e n t e , haciéndoles una matanza horrorosa, á favor de un ataque ejecutado oportunamente por retaguard i a , con el cual logró el astuto Craso desconcertarlos en lo recio de la pelea y depararse la mas completa victoria. Es notable que una nación tan belicosa y que de este modo llevaba sus armas á otros paises, contra los romanos nada diese que hacer á Augusto en la guerra cantábrica y astu- V A S 615 riana; quiérese esplicar esto recordando, que las correrías de los cántabros sobre las ciudad aliadas y pacíficas solo se e s tendieron á losautrigones, á los turmodigos y á los vacceos setentriouales; pero asi se satisface solo el concepto de que no figurase en ella por la razón que e s t r s regiones; mas no al que desease averiguar cuál era su condición en aquella época, supuesto que no hostilizó á los romanos y á los que se les habían sometido ó aliado como los hostilizaron los cántabros, ni aprovechó aquella coyuntura para aliarse con estos en defensa de la independencia común. La historia de aquel tiempo escrita por los latinos, que solo se esmeraron en referir sus conquistas, ó por los griegos, que también se cuidaban poco de las cosas de los vencidos en cuanto su r e lación no habia de adular á sus señores, no es estraño que adolezca de bstas lagunas que ya no es posible llenar á no ser con enlaces ideados. Aunque las repetidas reducciones y tropelías de los romanos hubiesen hecho servir á los vascones de la parte medía del valle del Ebro á las últimas montañas, no se hallarían muy supeditados después de la catástrofe de Sertorio, cuando hicieron la mencionada ostensión de su independencia á favor de los galos; ni aun quedarían muy deprimidos por el destrozo sufrido en aquella guerra cuando las noticias que alcanzamos de su estado en tiempo de Augusto nos prueban lo poco que aun habia influido en ellos el trato con los romanos, no obstante fechar de mas atrás el principio de este influjo. Estrabon nos dice que era uno su modo de vivir y el de los cántabros, ponderando su fiereza y barbarie; sabemos también que mientras el conato de aquel emperador consiguió generalizar la lengua latina, y aun los conocimientos del griego en toda la Península, los vascones conservaron todavía, con sus ant.

costumbres, su propio idioma. No obstante el aislamiento nacional y repugnancia á lo advenedizo que esto indica y que siempre han prevalecido en el pueblo vascongado, permaneció pacifico en tiempo de los emperadores. Aun alcanzaban en tiempo de Augusto desde el Agreda al Segre los lim. de esta ralea castiza, y ni toda la prolongada dominación romana fue bastante á arrancarle sus costumbres nacionales é idioma fuera de la parte de barbarie que antes presentaban aquellas. Su valer descolló aun en aquel tiempo dando el imperio á Vespasiano una cohorte vascona que Galva habia alistado y que después habia formado parte do las legiones de Egipto y J u d e a , la cual embistiendo denodadamente por el costado una de las alas del ejército de Vitelío produjo la derrota general de este.

En el siglo III de Jesucristo volvieron á sufrir la invasión de los bárbaros del N . , que otra vez se derramaron en la Península por las gargantas del Pirineo; y repetida esta invasión en el siglo V se abre una era del mayor sufrimiento y gloria para el pueblo vasco sus riscos, santuario de la primitiva independencia española, ai rinconada en ellos por lo dominación estranjera, van á ser constantemente acometidos por otros enemigos, avezados también á las montañ a s , y apenas dejaran de aparecer enrojecidos con la sangre de los continuos asaltos, hasta que al fin la libertad indígena prevalezca. ¿Cuál era la demarcación vascona que encontraron estos invasores? Arreglada á los pueblos que les atribuye Ptolomeo, cuya guia es el mejor documento que tenemos del imperio romano , para conjeturarl a , cerrando esta región las Españas, tocaba con el r. Bidasoa y era suyo el cabo de Higuer con todo el t e r r . de San Sebastian y» Oyarzun bajaba confinando con los várdulos por Tafaila; pasaba el Ebro abrazando á Calahorra; seguia al Oriente por sobre Tarazoua á Alagon, dejando á Mallen para los celtiberos; y abrazaba á Huesca y á Jaca.

Tenia 15 ciudad y todas acudían á ventilar sus pleitos al conv.

jurídico de Zaragoza (Plinio). En este estado fue asaltada por los suevos, que se estrellaron contra la pujanza enskara.

Los vascones acometidos por aquellos bárbaros, al mando de Requiario, hicieron la guerra de montaña que les es p r o pia ; y aunque consiguió vencerlos aquel en los llanos y en algunos valles, no pudo avasallarlos. Detrás de los suevos se abrió la obstinada contienda con los godos. Leovigildo los d e r r o t ó , se posesionó de sus pueblos, y luego, por blasón de su triunfo, edificó en los Caristos una ciudad á que se dio, y aun conserva, el nombre de Vitoria (581). Pero el resultado de estos acontecimientos fue la conquista del pais, mas no de los h a b . m u c h o s de ellos pasaron á establecerse á la otra parte del Pirineo, en la Gascuña; y otros se d i s pusieron á volver por su independencia. Gundemaro tuvo que acudir también personalmente á su reducción (611). Lo mismo se vio precisado á hacer, con todas sus fuerzas, Suintila; y después que se le sometieron, atajados por todas partes», «e limitó á recobrar la presa y á precisarles A enviar cierto número de operarios á la construcción de Olite. También dieron que hacer á Recesvinto y obtuvieron de él el desagravio de los abusos sufrid »s. Nuevamente alzados contra Warnba , acudió este en persona con un grande e|éreito, que los acosó hasta sus últimas guaridas, arrasando sus fortificaciones y posesionándose de sus pueblos y ald Pero nada bastó á su reducción definitiva y basta el rey Rodrigo hubo de ensayar sus revueltas. Asi este pueblo libre protestaba contra el dominio de un señor; pues tal era su práctica inconcusa en falleciendo el rey va estaban sobre las armas y era corriente una guerra en eí principio de lodo reinado. Nunca lograron los godos ejercer soberanía absoluta sobre estas montañas. Los vascos formaron siempre una nación, cuyos distintivos fueron la independencia, el aislamiento y el denuedo siempre hablaron su antiquísimo idioma y siempre constituyeron una confederación de pequeñas repúblicas, hermanadas solo con el vínculo de su origen y habla común.

Los árabes que amagaron la libertad vasca después que los godos, llamaroná este pais Djalikiah, y lo comprendieron también en el nombre de Afrank, común á las Asturias y Galicia, á los pueblos galo-romanos, y á los ver • daderos francos del N. del Pirineo. Los vascas’, alternando entre sublevaciones y rendimientos, según lo exigían las circunstancias, lograron que prevaleciese su independencia nacional en medio de los embales árabes, asturianos y francos, que todos atentaron contra ella. En esta época empezaron á asomar parte de ellos con el nuevo nombre de Navarros, y en el a r t . Navarra puede verse como su posición militar continuada vino á producir una monarquía en menoscabo del ant. sistema allí se hallará lo demás concerniente á esta parte de los pueblos vascones. La constitución especial del pais, que hemos mencionado, y que continuó al través de todas sus vicisitudes, al paso que facilitó este cambio político en parte de la Yasconia, reuniendo varias de sus repúblicas federadas para formar la base del poderoso reino pirenaico, fue causa de que no toda esta nación cor r i e s e igual s u e r t e ; perpetuándose el sistema primitivo en el rincón donde hoy mismo las tres provincia Vascongadas Guipúzcoa, Álava y Vizcaya, nos presentan los restos de aquel insigne pueblo.

VASCONGADAS (PROVINCIAS)

ciudad g. (*) comprensiva de las 3 comandancias generales y provincia de Álava, Guipúzcoa y Vizcaya, cuyos límites tiene. Confina N. con el mar Cantábrico y con Francia ; E. con Navarra, S. y O. con la ciudad g. de Burgos tiene 2 leg. de frontera y 30 de costa. Cuenta 5 com. militares, que son las del cast. de la Mota, Guetaria , Pasages, Fuerte de Sta. Bárbara de Hermni y Puent e l a r r á ; en todas las cuales hay puntos fortificados, y algunos de ellos importantes para e l a r m a de artillería. El personal se compone de un capitán general residente en Vitoria, de un segundo cabo, que es á la vez gobernador de la citada capitanía y comandancia general de la provincia de Álava; de otros dos comandantes generales residentes en Bilbao y San Sebastian, siendo también el de este punto gobernador de la c . ; de 2 sargentos mayores y 5 comandantes, con todos los demás subalternos que son consiguient e s al Estado Mavor y oficinas militares, incluso el juzgado de guerra. La administración militar tiene un intendente, un pagador, varios comisarios y otros empleados, á cuyo cargo está todo lo concerniente á la hacienda militar, y muy especialmente los hospitales de tropa. Esta ciudad g . , en la que se encuentran las fáb. de armas de Eybar y Placencia, forma la piimera y principal línea de defensa que la cap. de la nación tiene por e s ta p a r t e ; asi es que en los parages estratégicos d e l t e r r . que comprende, se han dado batallas notable’ en todas las guerras habidas con la Francia

(*) Vé3se lo que se dijo en la nota del a r t . yavarra, ciudad e j . , donde se manifestó y a , que estaba ahora reunida con la llamada a n t e r i o r m e n t e de las Provincial Vascongadas.