ZARAGOZA (PROV. DE)

una de lastres en que se encuentra dividido en la actualidad el ant. reino de Aragón en lo civil y administrativo es de primera clase; en lo j u dicial depende de la audiencia terr. de Zaragoza; en lo militar corresponde á la ciudad g. denominada de Aragón, constituyendo también una de las comandancias generales que componen este distrito ; y finalmente en lo eclesiástico pertenece á las diócesis de Zaragoza , Huesca , Jaca, Lérida , Sigüenza y Tarazona.

SITUACIÓN Y CLIMA. La provincia de que nos ocupamos se halla entre los 41» 4′ 15″ 42» 47′ 20″ de lat. N., y 1° 30′ 12″ 3o 58′ 53″ de long. E. de Madrid. Su estension de N. á S. es de 22 1/2 leg. de ¡8 al grado, y de 25 de E. á O., formando una superficie de 440 leg. cuadradas, en cuyo espacio comprende 5 c , 97 v., 209 L., 28 ald. y 7 cotos redondos, cuyos pueblos forman 331 ayuntamiento; habiendo ademas porción considerable de casas de campo, cas. y desp. Para la adm.judicial está dividida en 12 partido (*), que son Ateca, Belchite, Borja, Calatayud, Caspe, Daroca, Ejea de los Caballeros, la Almunia, Pina , Sos, Tarazona y Zaragoza ; siendo las dist. que median entre estas población las que de ellas hay á la audiencia terr., ciudad g. y dióc, á las cap. de las provincia confinantes y á la corte, las que aparecen en la escala de distancias que incluimos al final de este articulo El viento que en ella reina con mas frecuencia es el NO.

llamado cierzo por los naturales; á este sigue el bochorno ó SE.; el fagueño ó S., y también alguna que otra vez el N. ó guara, procedente de la sierra de’este nombre. El primero y último siempre son fríos en invierno y frescos en el estio; el segundo y tercero casi nunca dejan de ser calorosos, haciendo por consiguiente muy desigual y aun desagradable en muchas épocas el clima atmosférico. Las enfermedades que mas comunmente padecen sus hab., suelen ser tercianas ó sean calenturas intermitentes.

TÉRMINO Y CONFINES. Habiendo visto ya en el artículo de Aragón (reino de) la estension y límites que tenia la a n tigua provincia de Zaragoza, y los partidos en que se hallaba dividida cuando en unión con las actuales de Huesca y Teruel, constituía por sí sola el citado reino, vamos á ocuparnosahora únicamente de las diversas modificaciones porque ha pasado en lo que va del presente siglo. Por el proyecto, pues, de división terr. déla Península en departamentos presentado, en virtud de la constitución dada en Bayona por el intruso rey ü. José Bonaparte, en el año de 1809, se designó á Zaragoza como cap. del departamento de su mismo nombre. Sus límites eran iguales ajos que después se le señalaron en la nueva división del terr. español en prefecturas con arreglo al decreto de 17 de abril de 1810, que como se ve, no hizo mas que cambiar sus denominaciones. La prefectura de Zaragoza, con subprefectos en la misma ciudad, en Calatayudy en Hijar, abrazaba una ostensión de 580 leg.

cuadradas de 20 al grado, confinando por el N. y NE. con las prefecturas de Pamplona y de Huesca, y cuyos límites eran el r. E6ro. Por el SE. y S. confinaba con las de Tarragona y Teruel, siendo sus límites el r. Guadalope desde su embocadura en el Ebro , subiendo hacia su nacimiento hasta el punto en que confluye con el Calanda ; seguia la dirección de este rio, que después toma el nombre de Exulbe, y pasaba al S. del lugar de la misma denominación; deede el nacimiento de dicho r. continuaba la línea de demarcación hacia el O., y se unia con el r. Martin, pasando antes al S. de Estercuel; desde alli iba en la dirección de este último r. hasta su origen en Cervcra; marchaba dejando á Cervera v Pancrudo dentro de la prefectura de Teruel; pasaba al NO. de Lidoa , Argente , Brea y Torre la Cárcel, que quedaban igualmente comprendidos en dicha prefectura; seguia por entre Pozohondon y Monterde, quedando los lugares de Alba, Pozohondon y Orihuela dentro de la pre- fectura de Zaragoza; pasaba por entre los nacimientos délos r. Molina y Guadalaviar, y concluía en Ntra. Sra. del Tremedal, que quedaba también dentro de los límites de esta última prefectura. Por el SO. confinaba con la prefectura de Guadalajara, determinando sus límites la línea de demarcación que partia de Ntra. Sra. del Tremedal; pasaba al SO.

de Checa , Traid , Otilia , Torrecuadrada y Molina de Aragón, quedando todos estos lugares comprendidos en la prefectura de Zaragoza; continuaba por el O. de Rulo y Torrubia, terminando entre este último pueblo y Tartanedo; los lugares de Taravilla, Megina, Pinilla, Terraza,Caslellote, Serna, Herreria y Pardos, quedaban dentro de la prefectura de Guadalajara. Por el O. y NO. confinaba con las prefecturas de Soria y Burgos, dirigiéndose la línea que demarcaba sus límites un poco al N. de Torrubia hacia este mismo punto cardinal; dejaba á Tartanedo,Hinojosa yMilmarcosal O. dentro déla prefectura de Soria, y al E. Fuentelsaz y Campillo en la de Zaragoza; desde allí iba á encontrar el r. Jalón cerca, y al E. de Ariza, cortaba e\Deza entre Cihuela y Embid, quedando el primer pueblo dentro de la misma prefectura de Soria, y el segundo en la de Zaragoza; pasaba por entre Ciria y Malanquilla al O. de Pomer y Purujosa; dejaba al E. la sierra de Moncayo , dirigíase por el E. de la Cueva , Aldehuela de Agreda, Vozmediano, Casas, Valverde y venta delPortazguillo , y encontrando después el punto en que se unen los r. Aña maza y Alhama, seguía desde allí el curso de este r. hasta su confluencia con el Ebro al O. de Alfaro.

En la división de España en provincias decretada en 30 de enero del año de 1822, pero que cayó en desuso con motivo de los acontecimientos políticos del de 1323, volviendo por consiguiente las cosas á su antiguo estado, se dieron á la provincia de Zaragoza los siguientes limites. Por el N. y NE, confinaba con la provincia de Huesca; por el E. con las de Lérida y Tarragona; por el S. y SO. con las de Castellón, Teruel y Calatayud, y por el O. con las de Soria, Logroño y Pamplona. Su límite N. y NE. principiaba entre Lorves y Fago al S. de Roncal; y venia por el O. de Berdum á cortar el r. Aragón; pasabaalE.deBaguesábuscarelnacimientodel Onsella, y de aqui seguia por Biel y Fuencalderas, y por entre Sta. Olaria y sierra de los Blacos á encontrar elr. Gallego en su confluencia con e’i Dodiello; iba por el Gallego basta que se une con el Seton, desde donde venia en dirección al SE. atravesando los llanosde Violada á buscar el estremo N. de la sierra de Alcubierre, la que continuaba hasta la confluencia del Alcanadre con el Cinca. De aqui seguía en dirección del E. á encontrare! límite antiguo deCataluña al E. de Zaidin; por el E. el antiguo límite también de Cataluña con Aragón hasta el mojón qué dividía á Cataluña, Ai agón y Valencia; por el SE. el limite actual de Aragón con Valencia desde dicho mojón hasta cerca de Zorita. Desde este punto se dirigiael límite S. por Ntra. Sra. do la Carrasca, la de Monte Santo, y por los montes que dan origen al r. Calando; atravesaba el r. Martin en dirección al NO. cerca de Torre las Arcas; pasaba por encima de la Hoz de la Vieja , Anadón, Rudilla y Fuenfria, á buscar la divisoria de aguas al N. de Ntra. Sra. de Pelarda; seguia por entre Piedrahita y Bea, Lagueruela y Badenas, y por el O. de. Lanzuela y Fuenbuena, á atravesar el r. Guebar entre Villareal y Cerveruela, desde donde en dirección casi al N. iba á encontrar el puerto de San Martin. Desde aqui continuaba por el O. de Aguaron entre Almonacid de la Sierra y Cosuenda, por el E de Alpartil y la Almunia á cortar el r. Jalón en su confluencia con el Crio; dirigíase por el S. de Riela á tomar los montes que vierten al r. Hijuela, los que no abandonaba hasta el Moncago. El límite O., que era el antiguo con Soria hasta el Quedes, empezaba en la sierra de Moncayo entre Monteagudo y Novallas, desde donde seguia por elO. deTulcbras, Ürzanté, Fontillas y el Rocal á cruzar el Ebro; y continuando por este r. hasta» cerca de Novillas, tomaba ei limite occidental antiguo de Aragón con Navarra hasta las inmediaciones de Fago, que fue el punto de partida.

Finalmente, según la última división terr. establecida por real decreto de 30 de noviembre de 1833, que es la que hoy rige, con muy ligeras variaciones en algunas provincia, confina la de Zaragoza por el N. con Navarra; por el E. con la provincia

de Huesca por el S. con la de Teruel, y por el O. con las de Soria, Logroño y Navarra. El lím. S. empieza en la márg.

izquierda del Ebro, al E. de Alborge , atravesando dicho r.; sigue 513 la linea divisoria de la provincia de Teruel, descrita ya en su respectivo a r t . , hasta encontrar el lím. de Aragón en el territorio de Molina al S. de Pozucl. El lim. O. lo fórmala linea divisoria de Aragón con las provincia de Guadalajara, Soria y Navarra , hasta las inmediaciones del valle del Roncal.

El lím. N. es el del valle del Roncal, perteneciente á Navarra.

El lím. E. principia en la ant. linea divisoria de Aragón y Navarra entre Burgui y Fago, siguiendo por entre Asso Í Berdum , E. de Bagues , Longas , Biel y Fuencalderas , á uscar el r. Gallego por elN. deMurillo; continua el curso de este r. hasta mas arriba de Zuera, y apartándose de I aqui se dirige por el NE. de San Mateo , Leciñena y Ntra.

Sra. de Magallon, S. de Alcubierre y O. de Ntra. Sra. de las Fuentes á atravesar el camino real de Zaragoza á Barcelona , entre Bujaraloz y la venta de Sta. Lucia , terminando por último en la orilla izquierda del Ebro, mas abajo de Alborge.

TERRITORIO. Aunque la provincia de Zaragoza es la menos montañosa de las tres de que se componía el antiguo reino de Aragón, no por eso dejan de elevarse y cruzar por ella algunos montes ó sierras, de cuya descripción vamos á ocuparnos con el posible detenimiento. El principal pues, es el monte liamadoel Moncayo, situado al O. de la provincia en sus confines con las de Soria y Navarra, en cuya cima se conserva la nieve de 8 a 10 meses, v eu algunas ondulaciones se halla constantemente está compuesto de puro cuarzo, raso y pelado en su capote, pero vestido en la falda de gayuba, brezo, espinos, hayas, colutea, sorbus doméstica, spartineum purgaos. robus idaeus ó chordones y otros arbustos , entre los cuales se ven también muchas yerbas medicinales, Ínulas, orchi, potentilas, solidago, doronico, onopordum y otras, descollando entre ellas la salvia , esquisita en sii género , y la nunca bien ponderada manzanilla, buscada con gran cuidado por farmacéuticos naturales y eslranjeros. Tiene sobre 2 leg. de elevación y mas de 3 de largo , albergándose en su espesura algunos animales dañinos existen en él minas de lápiz , de piedra de afilar y de varios metales, que todavía se hallan sin esplotar, á escepcion de la mina llamada Val de la Plata, en el término de Calcena, que benefician diferentes empresas desde el año ‘ de 1826 Ramifican desde Añon hasta Tierga , y enlazando el término del primero con el de Purujosa, forma garganta, presentando fácil acceso por dicho monte, y paso á la provincia

de Soria por el collado de las Estacas, aunque bastante peligroso eu atención á la espesura y sinuosidad que le precede.

La sierra de Vicor ó de Morata del Conde, es el primer ramal de montañas, que destacando del Moncayo, se encamina de NO á SE, y una de las canteras metalíferas que señala por muchos puntos aquel enorme promontorio; desprendiéndose de ella alguna que otra, que participa de la misma naturaleza; pero suficientes á llenar de desigualdades el terreno de los partido de Tarazona , Rorja , Calatayud, la Almunia y alguna parte del de Daroca, donde desaparece ó se confunde con la sierra de Gudar. Aventurado será fijar con exactitud su mayor altura , pero desde su base frente de Belmonte, que es en donde presenta mas elevación, hasta la cúspide denominada del Bayo, al O. de Viver de Vicor, se gradúa aproximadamente 1 1/5-leg. Facilitan el paso de esta montaña varios puertos, siendo los mas notables el de Cavero ó de Calatayud, el del Frasno y el déla Condesa, que se hallan á la der del r. Jalón, en la carretera real que conduce de Madrid á Zaragoza, cercándolos grandes sinuosidades y derrumbaderos, aunque defendidos con las obras de construcción de la espresada carretera. En casi todos los pueblos- á que pertenece alguna parte de esta sierra, se registran canteras de rocas primitivas graníticas, guarlilas, espáticas , gueisicas , anfibólicas , micáceas, pizarras y esquistas en algunos puntos se han observado también lavas volcánicas y muchas cristalizaciones Ígneas; se encuentian asi mismo muchos parajes donde se conoce que en lo antiguo se beneficiaban minas; mas habiéndose reconocido en la actualidad algunos de estos sitios , se han abandonado, como también otros nuevos, sin duda alguna por falta de conocimientos mineralógicos, por la escasez do combustible ó por falta de capitales. Asi es que solo se halla en lo? términos de Sta. Cruz de Toved una mina de galena argentífera, beneficiada aun después de la espulsion de los árabes , sin embargo de que abundan los minerales de hierro y los terreno* de azufre. La sierra de que hablamos no permite en su grande elevación vejetar otras plantas que algunas pertenecientes á la temperatura frígida , como el antojanto, tejo, redodendron , tomillo rastrero y otras pero su descenso se encuentra por lo general poblado de chaparros y rebollos, útiles solo para el carboneo , con muy pocas escepciones, de espinos, enebros, retamas, romeros, aliagas, tomillos , palvia, espliego y agedrea, asi como de diferentes yerbas medicinales , y abundantísimas de pasto.

La sierra de La Muela destaca igualmente del Moncayo, perdiéndose en las llanuras de Zaragoza , y aunque no de tanta estension como la anterior, participa de la misma naturaleza; abundando en ella las ricas yerbas de pasto , y en ambas las principales cauteras de la provincia; de modo que en la línea que forma el r. Jalón desde la v. de Epila hasta el puerto de Frasno, se encuentra el almendrón, piedra compuesta de guijarros, do tal manera unidos , que la hacen sumamente dura y muy útil para obras hidráulicas, empleándose también para piedras de molinos harineros. En la misma línea se halla la piedra conocida con el nombre de mármol de Calatorao, que es de grano homogéneo y color negro, la cual se emplea generalmente en obras civiles y sepulcrales.

También se encuentra otra piedra, grano de arena y muy compacta, casi igual á la que produce el monte de Moñjuich en Barcelona, que merece mucha aceptación pira los cilindros y ruejos de molinos de aceite , asi como la piedra llamada campanil ó de cal en tamaño de sillares para diferentes usos de los edificios.

Las sierras de Gudar y de Muñera, que tienen su origen en la provincia de Teruel, se introducen en la de Zaragoza por la porte del S., viniendo á confundirse con la de Vicor ó Morata del Conde, después de haber llenado de desigualdades el partido de Daroca. Forman los puertos de San Martin ó de Cariñena, que se encuentran en la carretera que conduce desde Zaragoza á Valencia , cuya penosa subida necesita sobre hora y media, y otro tanto la bajada, y los de Used, Codos y Aguaron, penosos también en sus subidas por carecer absolutamente de obras de construcción. En todas estas sierras, asi como en las demás cordillera que se las desprenden, antes pobladas de carrascales y pinares, apenas se encuentra en el dia leña útil solo para el carboneo; pero en cambio abundan en ellas escelentes yerban de pasto.

Generalmente se las cree muy ricas de minas, siendo sin embargo , muy pocas las que se esplotau con buen éxito, si se esceptúa la denominada de San Vicente, sita en los términos de Fombuena , que consiste en plomo de galena , y es propia de una sociedad establecida en Zaragoza. Las vetas y aun agrupamientos de piedras calizas es lo mas fre cuente en ellas, encontrándose por lo tanto muchas canteras de cal y yeso; también existen minas de alabastro y aun de azabache, siendo de lo mas superior que se conoce el que se encuentra á las inmediaciones de Daroca.

Por el N. de la provincia se introduce igualmente otra sierra llamada de Sto. Domingo , la cual se desprende de los Pirineos por los valles de Hecho y Ansó, v después de cruzar los partido jlid. de Sos y Ejea dé los Caballeros, se divide en este en dos ramales, dirigiéndose el uno por Biel hasta llegar á Marracos, donde muere, y el otro por Luesia hasta desaparecer en Añesa , formando desde este punto una continuación de cerros de muy poca elevación. Comunmente son de piedra caliza y algunos areniscos, y todos abundan en yerbas de pasto y bosques de pinos. También se les cree no escasos en minerales , pero en la actualidad no so beneficia mas que una mina de cobre en el término de Biel. En la misma dirección del N. de la provincia y jurisd. de Salvatierra, se eleva la sierra de Belbun , que campea sobre todas las de sus inmediaciones; se encuentra vestida de havas, pinos , encinas, robles y otros diferentes árboles y arbustos; abrigando en su espesura osos, jabalíes, lobos y algunos otros animales dañinos.

Al N. de Tausto principia otra serie de cerros de poca altura , que se dirige de NO. á SE., formando una cadena hasta llegar á confundirse en el término de Zuera con otra que tiene origen en el desp. de Sora , jurisd. de Ejea, y que siguiendo casi paralelamente á la anterior, concluye al O. de aquella v. Participan ambas de la misma naturaleza de terreno que las anteriores, si bien esta última se halla bastante cubierta de pinos de construcción y para carboneo, abundando en yerbas de pasto para ganado lanar y vacuno. Por el SO. de la provincia se introduce la sierra de Molina, que tiene su origen en la de Guadalajara, estendiéndose en diferentes direcciones, y llenando de desigualdades el partido

de Ateca, donde se enlaza con otras que no merecen particular mención. No se halla muy poblada de árboles ni arbustos , pero en cambio abunda en canteras de preciosos jaspes y mármoles, en piedras para cal y yeso, y en deh.

de escelentes yerbas de pasto, asi como en plantas aromáticas y medicinales.

Al SE. de la misma provincia se alzan las montañas de Mocatero, Vizcuerno y Sierra de Mequinenza, formando una mediana cadena de poca elevación. Están pobladas de sabinas, enebros , lentiscos, romeros y aliagas, y la de Mequinenza de olivos silvestres. También son ricas én yerbas de pasto para ganado lanar y cabrio , y en infinidad de flores que fomentan un número considerable de colmenas conteniendo ademas muchas canteras de arena y piedra para yeso.

La sierra de Alcubierre principia en el estremo oriental de los llanos de Peñaflor al E. de Zaragoza, y se prolonga en la misma dirección hasta introducirse en la provincia de Huesca, la atraviesa el camino que va de Zaragoza áBarbaslro, cruzando la población de su nombre. Es de poca altura, y no existen en ella canteras ui minas de ninguna clase; pero en algunos parages no escasean las ricas yerbas de pasto. Finalmente, otras cordillerasde cerros cruzan y nacen en la provincia

de Zaragoza de menos consideración y que por lo mismo no merecen nos detengamos en su descripción , si se esceptúa el monte del Castellar que forma la margen izquierda del Ebro desde frente á Gallur hasta Juslibol, y de cuyas célebres minas de sal nos ocuparemos en el tratado de ind. minera.

CALIDAD DEL TERRENO. Fuera de la parte montañosa de que hemos hablado, lo demás de esta provincia es en general bastante llano, y sus tierras muy susceptibles de producir prodigiosamente , escepluando las que no pueden recibir el beneficio del riego; pues como el clima es bastante seco, desde que se ha mirado con tanta indiferencia el descuage y tala de los montes , en algunos años escasean las lluvias , y por consecuencia precisa se pierden las cosechas. Desgraciadamente , de los 346 pueblos de que se compone la provincia, solo 190 son los que disfrutan de aquel beneficio , sin embargo de que la bañan multitud de considerables rios y arroyos; consistiendo esto sin duda en la montuosidad del terreno por donde pasan , en su rapidez, profundidad de cauce , y poca ind. ó falta de fondos para utilizar sus aguas por medio de presas ó azudes. No obstante , todas las márgenes de los rios que pueden recibir este beneficio desplegan la mas activa y lozana vegetación las riberas del Ebro y del Jalón , son de las mas ricas que se conocen ; las huertas y valles de la Almunia , Borja , Ateca , Calatayud, Daroca y Tarazoua , llaman la atención por su fertilidad , hermosura y variado de sus producciones. Otras semejantes.se encuentran en diferentes puntos , pero ninguna de ellas puede compararse con las fértiles campiñas que rodean la cap.

la abundancia de riego que rinden á su escelente suelo tres rios y un canal le hacen producir á competencia frutos de todas especies y toda clase de granos, pagando con usura el trabajo y diligencia del agricultor. No es tampoco menos productiva la llanura de Caspe que por la benignidad de su clima , se ve cubierta en todas las estaciones del año de las mas sabrosas hortalizas y legumbres; al paso que sus pingües olivares, diversidad de árboles frutales y plantaciones cíe moreras , la ponen en el caso de ser la mas abundante y rica entro las de Plasencia , Fuentes de Ebro y Alfamen, que son las mas notables que existen en la provincia

Ríos Y AKROYOS. El caudaloso Ebro es el r. de mas consideración que baña esta provincia , y en el que pierden su nombre todos los demás que la fertilizan por discurrir la línea mas baja de su territorio. Tiene su origen en el término de Foutibre al pie E. de una sierra, una leg. al O. de Beinosa, provincia de Santander, y entra en ¡a de Zaragoza por los confines de Navarra, término de Cortes. El primer pueblo que fertiliza con sus aguas es el de Novillas partido judicial de Borja, donde se le une , pasando por debajo del canal Imperial, el r. Huecha , que se forma de diferentes manantiales que descienden del Moncayo á las inmediaciones de Añon , después de dar movimiento aun molino harinero y proporcionar riego á los pueblos de Alcalá de Moncayo, Ambel, Ribas, Ainzon, fiureta , Alberite, Bisimbre y Mallen que deja á su derecha, y al monasterio de Ntra. Sra. de Verueld , Bulbuente, Malejan , Rorja, Albeta , Magallon, Agón y Frescano que quedan á su izquierda Continua su curso de NO. á SE.

pasando por las inmediaciones de Gallur, que se encuentra á su margen der., confluyendo á su frente por la izquierda el r. Riquel ó del Rayo , que reúne las aguas de las Arbas dcLuesia y de Biel , y el r. Ores del que se hablará mas adelante.

Aumentado su caudal con el tributo que estos le rinden, sigúela misma dirección dejandoá su izquierda los lugaresde Pradilía, Bemolinos, Castillo de Pola, el Castellar y casas de las Salinas, v á su derecha los de Boquiñeni, Luceni, Alcalá de Ebro, Cabanas , Alagon y Torres de Berrellen , en cuyo término y una hora antes de llegar á él pierde su nombre el r. Jalón después de haber pasado por sus admirables obras construidas debajo del canal Imperial. Sirviéndole de margen izquierda el monte del Castellar a donde se encuentran muy inmediatos los pueblos de Alfocea y Juslibol y dejando á su der. los de La Joyosa , Sobradiel, Utebo, Monzalbarba y Ntra. Sra. de la Sagrada , atraviesa los muros N. de Zaragoza á cuyo frente y próximo á la puerta denominada del Ángel se halla un magnifico puente de piedra , aunque bastante deteriorado , que da paso al arrabal de Altabas y á la carretera que conduce á Barcelona. A muy pocadist. del anterior se ven todavía los cimientos de otro puente de tablas que también lo cruzaba antes de la guerra déla Independencia, y algo mas abajo se le une por la der. el r. Haerva , é inmediatamente por su izquierda el Gallego. Sigue su curso en la misma dirección, dejando á la der. ía cartuja de la Concepción, el lugar del Burgo, el santuario de Ntra. Sra.

de Zaragoza laYieja y la villa de Fuentes, juntoá la cual se le incorpora el r. Roden ó Ginel, que tiene su nacimiento en un llano media hora al S. de Mediana, después de dar riego á su hermosa huerta y á parte del terreno de la citada villa; y á su izquierda Pastriz, Nuez, Villafranca de Ebro, Osera , Aguijar y Pina. Continua hacia el mismo punto, y llegando á la villa de Quinto que se halla á su margen der., se encuentra uno de los grandes precipicios ó barrancos que tiene este r. , y que á veces pone en peligro la vida de los pobres navegantes.

Entra luego en los términos de Gelsa y Velilla de Ebro que deja á la izquierda, y al N. de La Zaida que se encuentra á su margen der. se le une el r. Aguas ó Amonada, que tiene origen en la sierra de Pilarda, pror. de Teruel, y se interna en la de Zaragoza por el término de Monevaque está á su izquierda, después de haber aumentado su caudal por el mismo lado con algunos arroyos de poca consideración, y haber fertilizado los término de Samper del Salz , ó sea Samperico, Almonacid de la Cuba , Belchite, donde le cruza un hermoso puente de piedra, Romana y la Zaida; y por la der. Lagata , l.etux , Binaceite y Azaila. Poco mas abajo forma una pequeña curvatura hacia el E., bañando por su izquierda, por medio de presas y norias, los pueblos de Alforque , Alborge y Ntra. Sra. de Rueda; y por la der. los de Cinco Olivas, Sástago y Escatron , en cuyas inmediaciones desagua el r. Martin, que tiene su nacimiento en una hondonada entre horribles peñascos en el pueblo de Segura, provincia de Teruel, y se introduce en la que nos ocupa por el término de aquella villa, fertilizando sus tierras. Desde este punto principia á serpentear describiendo varias curvas hasta que llega á Mequinenza, donde los estribos del bajo Pirineo , que terminan en su márg. izquierda , le hacen cambiar de dirección.

En este espacio de terreno deja á la der. la venta y villa de Chiprana y la de Caspe, en donde pierde su nombre el r. (hiadalope, que entra en esta provincia por el término de aquella población, y tiene su origen en lo mas alto de una sierra cerca de Villarroya de ¡os Pinares provincia de Teruel; y por su izquierda quedan laVenta de la Magdalena y dicha villa y fuerte de Mequinenza , último pueblo de la provincia de Zaragoza.

Sin embargo de ser este rio tan caudaloso , es vadeable por algunos puntos que estiende su cauce, y muy particularmente en la estación de verano frente al pueblo de Utebo, á media hora poco mas ó menos antes de llegar á Zaragoza, y frente al edificio de la Inquisición, que en el dia sirve de cárcel de la misma ciudad. Tiene barca de paso en Novillas, puente de. barcas en Gallur, y barcas también de paso en Remolinos , Cabanas, Alagon, Torres de Berrellen, Utebo, Zar agoza , Pina , Gelsa, Velilla, Cinco Olivas,Sástago , Escatron y Caspe.

ZAHRA

los analistas arábigos refieren que el Nasr Ledin Alá el Omiade fundó la ciudad de Zahra en el año 325 de la egira (del 936 al 37 de J. C.) y le colocó 4.300 columnas de mármol ; empleándose cada dia en su construcción 6,000 sillares ademas de la piedra que se metía en la mamposteria. En medio se encumbró un alcázar real cuyo coste, al modo de decir de los árabes, solo Dios altísimo pudiera calcular; y trasladó allí la fábrica de moneda. Dicen que erigió esta admirable ciudad para complacerá cierta belleza esclava suya que se llamaba Zahara ó Flor y en su razón la apellidó Zahara; espresando Medina al Zahra ciudad de Zahara; pero Medina al Zahra puede tambien significar ciudad de flores o la Florida ; y asi la mezquita del Cairo donde se halla la biblioteca llamada Mesdjid el Azhar vale tanto como decir la Mezquita de las flores. Nada que puede encumbrar la idea de la magnificencia de esta „ƒ de recreo falta en las relaciones arabigas; y por cierto que bastan a retratar el gusto y suntuosidad de mas realce. Ademas de las 4,300 columnas de marmol esquisito que adornaban la morada del califa , todo el pavimento de los salones estaba enlosado de marmoles con matices admirables. Las paredes estaban igualmente revestidas de jaspes o de estucos salpicados de vivisimos colores cual los recuerdan los restos que aparecen aun en la Alhambra de Granada. Los techos pintados de oro y azul con arabescos preciosos su relieve cincelados con el primor mas asombroso. Contiguo al palacio se estendia el Jeneralife; y en medio de los jardines , sobre una loma que los senoreaba, descollaba ef pabellon del califa, donde solia descansar al regreso de sus cacerias. Sostenianlo columnas de marmol blanco cimadas de chapiteles dorados eran sus puertas de evano y marfil, y en medio de la glorieta pegada al pabellon sobresalia una concha de porfido con un surtidor de azogue que , recayendo en mazorcas a manera de agua, despedia a los rayos del sol miles y miles de visos centelleantes.

Habia por los salones fuentes de marmol de porfido y de jaspe, con variedad de hechuras, y con especialidad sobresalia en la plaza llamada del Califato , una concha de hermosisimo jaspe; rebosando de agua y en cuyo centro resplandecia un cisne de oro de una labor imponderable, labrado en Constanlinopla por encima brillaba la magnifica perla que habia regalado a Abd el Rahman el emperador griego Leon Vi. La fabrica de moneda (de la que se conservan aun algunas medallas) , cuarteles, y una mezquita redondeaban el conjunto de edificios apellidado Medina al Zahra. Estaba a 2 leg. al O. de Cordoba, bajando por el Guadalquivir. Era la mas frecuente morada de los califas es celeberrima en la historia de aquel tiempo como se comprende por su naturaleza ; pero sucumbio a la ruina de los musulmanes y al rigor del tiempo en terminos que no ha quedado el menor vestigio de ella.

ZAHARA

v. con ayuntamiento en la provincia de Cádiz (20 leg.), partido judicial de Olvera (3), dióc, audiencia terr. y ciudad g. de Sevilla (14) SIT. en una altura al N. y en la falda de una elevada colina , en cuya cúspide se encuentra un ant. cast. dominado por un cerro llamado Purgon; el CLIMA es muy estremado en el estío é invierno y propeuso á intermitentes y catarros. Tiene 350 CASAS de mediana construcción, entre ellas la del ayuntamiento, cárcel, y una fuente cuyas aguas, aunque potables, no son muy buenas; escuela de instrucción primaria, concurrida por 30 niños, y una enseñanza de ninas; iglesia parr. (Sta. María de la Mezza) servida por un cura de concurso y provisión ordinaria, y un cementerio bien situado; una ermita en el pueblo (San Juan de Letran).

Confina el término por el N. con el de Algodonales; E. Castor; S. Grazalema y Rosque, y O. Prado del Rey, hay_en él varios cas. diseminados para el servicio de las pequeñas labores. Nace en el término el r. Boca-leones, en el sitio del Bramadero, cuyas aguas después de fertilizar algunos terr.

se incorporan al Guadalete. El TERRENO es muy montuoso, con algunas cañadas de sembradura y poblado de monte y mata baja. Los CAMINOS locales y malos. El CORREO se recibe de Ronda, tres veces en la remana, PROD. toda clase de cereales bastantes para el consumo, algunas legumbres y muchas frutas; hay ganado de toda especie, y caza de de conejos y perdices, IND. la agrícola y varios molinos harineros y dé aceite, POBL. 374 vec , 1,151 almas RIQUEZA PROD. 4.000,880 reales IMP. 50,280. El PEESUPUESTO MUNICIPAL asciende á 40,000 reales, y se cubren con el prod. de los bienes de propios.

HISTORIA. Rodrigo Caro pensó ser esta pobl la ant. Lastif/ i mencionada por Plinio entre las de la Reluria céltica el P. Hierro y Cean Bermudez le siguieron ; pero es un error y el apellido de Turostanos, que en el último se da á los celtas de la Beturia, es absolutamente desconocido en la geografía ant. y en la historia. Lastigi está mejor reducida por el erudito Cortés á Castuera ; y no deja de ser muy verosímil la congetura del mismo Sr. Cortés sobre la identidad de la actual v. de Zahara y la c llamada Begia por el citado Plinio , que la cuenta entre las del conv. jurídico de Cádiz distinguidas con el fuero del Lacio ant. La fortisima posición de Zahara es la mas apropósílo para una ciudad considerable de aquel tiempo , y no contradicen á esta correspondencia los indicios de la ant. Begia ; si bien no damos tanto valor como dicho Sr. Cortés á la sinonimia que pretende encontrar entre las voces Zahara y Regia. La primera es árabe en toda su pureza y significa propiamente flor, escusando esta sencilla esplícacion del nombre la rodada deducción del hebreo que la erudición del Sr. Cortés ha alcanzado. No es esta Zahara la famosísima fundada por el Nars Ledin Alá aquella era un riquísimo palacio, y esta una importante fortaleza.

En ella se avistaron por los años de 1282 el rey de Marruecos y el de Castilla Alfonso el Sabio. La ganó ei infante D. Fernando en 1407. En 27 de diciembre de 1481 la recobraron los sarracenos por sorpresa, y de aqui se tomó ocasión para la guerra de Granada en 1483 la reconquistó D. Rodrigo Ponciudade de León, marqués de Cádiz , que desde entonces se tituló marqués de Zahara.

ZAGRA ó PUEBLA DE ZAGRA

ald. agregada al ayuntamiento de Loja, de donde dista 1 1/2 leg. alN. y á cuyo partido judicial corresponde, en la provincia, dióc , audiencia terr. y ciudad g. de Granada SIT. al pie de una alta colina, en que se ven los restos de un ant. cast., goza de alegres vistas, de CLIMA sano, y tiene 212 CASAS, con mas 238 en el campo, una plaza pequeña con una fuente, iglesia parr. (San Lorenzo), curato de segundo ascenso dependiente de la vicaria de Loja, y al cual está á la vez sujeta la cortijada de Fuentes de Zesnar que corresponde á la jurisd. de Algarínejo, partido judicial de Monteírio, asi como las espresadas casas de campo diseminadas en 2 leg. de estension que abraza la felíg. Contiguo al templo, situado al estremo de la población, se halla el cementerio.

No tiene término propio como enclavado en el de Loja; pero en el terreno, desigual y lleno de barrancos y valles, á que se estiende la jurisd. de su ale p., se encuentran ademas de las mencionadas casas de labor, entre las cuales hay cortijos de 10 y 12 yuntas de ganado; los baños de la Cerradura, que tienen su origen en el mismo sitio y se aplican con buen éxito en las enfermedades cutáneas leves; otros varios manantiales de aguas dulces y delicadas, entre ellas la del cortijo de las Vilas, de grande utilidad para los que van ó vienen de Priego; una torre atalaya árabe llamada de Pesquera; el arroyo de este nombre que nace en la jurisd. de Algarínejo y recorriendo el término de la feligresia

de Zagra, va á desaguar al Genil, después de haber dado movimiento á 2 molinos harineros; y por último otros va» rios arroyuelosque, aprovechados y bien dirigidos, pudieran regar mas tierras que las que én la actualidad beneficia.

Los CAMINOS son de herradura y escabrosos, á pesar de lo cual el de Loja á Priego que toca en este punto, es muy frecuentado por los arrieros de Málaga y su costa que nasan á dicha última v , á Baena, Alcaudete. Montoro, Martos y otros pueblos de las provincia de Jaén y Córdoba , en busca de granos y aceites. La CORRESPONDENCIA se recibe de Loja. PROD trigo, cebada , garbanzos, lentejas, habas, maíz, yeros, escaña, habichuelas, bellota, aceite, vino y toda especie de fruta y hortaliza; ganado caballar, vacuno, asnal y de cerda; caza mayor y menor, y algunos animales dañinos, IND. la agrícola; muchos telares de lienzos caseros, algunos de cáñamo y mezclas de lana para uso del país; una caldera de jabón , dos alambiques de aguardiente, dos lagares, dos molinos harineros y una molineta de aceite.

POBL.  toda la feligresia tiene 903 veciudad, 3,372 almas; pero solo corresponden á Zagra 479 de los primeros, 1,720 de las segundas; pues los restantes 424 v e c , 1,092 almas son de la cortijada Fuentes de Zesnar que, como hemos dicho, corresponde al partido de Montefrio. RIQUEZA y CONTR. con Algarínejo y Loja.

ZAFRA

v. con ayuntamiento en la provincia y diócesis de Cuenca (7 leg.), partido judicial de Belmonte (6), audiencia terr. de Albacete (18) y ciudad g. de Castilla la Nueva (Madrid 19) srr. ala márg.

der. del r. Záncara en lo alto de un cerro escarpado, en el que hay un cast. del tiempo de la dominación árabe y que perteneció al marquesado de Víllena; su CLIMA es algo frío, bien ventilado y poco propenso á enfermedades.

Consta de 200 CASAS de mediana construcción, á escepcion de una que es muy buena; la escuela de primeras letras está concurrida por 60 niños y dotada con 1,500 reales; para surtido del vecindario hay varias fuentes de buena agua fuera de la población; la iglesia parr. (Ntra. Sra. de la Asunción) e3 de segundo ascenso, y se halla servida por un cura de provisión ordinaria. El término confina por N. con Palomares Y Villar del Águila ; E. Villares del Saz y VillarejO Periesteban; S. Congosto y Villar de Cañas, y O Moutalvo en su jurisd. se hallan los desp. de Torrecilla, So!ana, Villares de Arriba y Majanos ó Villares de Abajo, y el cas. Torre- Ruceit, propiedad del hospital de Santiago (en Cuenca). El TERRENO es bastante bueno, y muy particularmente la vega que riega el citado r . , el cual pasa á orillas del pueblo , en cuyo sitio tiene un puentecito al E. se hallan los montes de Val-de-Cuenca y Torre-Buceit, poblados de encina y roble, y al N. los llanos, de mata baja. Los CAMINOS son locales y malos. La CORRESPONDENCIA se recibe de la estafeta de Villares del Saz los miércoles, viernes y domingos por la noche, y sale en los mismos días por la tarde, PROD.

trigo de varias clases y de buena calida 1, patatas, legumbres, vino y aceite; se cria ganado lanar, cabrío, vacuno y algún asnal, dándose la preferencia al primero; y mucha caza de liebres, perdices y conejos, IND.  la agrícola, un molino harinero y otro de aceite, COMERCIO la venta de cereales y algún ganado lanar, y la importación de arroz, bacalao, «telas de percal y demás art. indispensables, POBL.

204 v e c , 811 almas CAP. PROD. 2 814,420 reales IMP. 140,72L.

El PRESUPUESTO MUNICIPAL se cubre con el prod. de los ramos arrendables y otros arbitrios.

ZAFRA

v. con ayuntamiento en la provincia y diócesis de Badajoz (42 leg.), partido judicial de su nombre, audiencia terr. de Cáceres (23), ciudad g. de Estremadura, con adm. subalterna de rentas, correos y loterías, y com. de armas.

SITUACIÓN Y CLIMA. En un espacioso valle que forman las peladas sierras de San Cristóbal al NE. y Castellón al O . , á 7 leg. de la cordillera de Tudia , dependiente de Sierra-Morena, y en una especie de esplanada que existe en medio de la falda de la primera , se encuentra esta notable v. con clima algún tanto cálido, ventilada de todos los aires, de modo que ninguno puede llamarse dominante, atmósfera despejada y poco propensa á enfermedades; sin embargo hizo en ella el cólera deporables estragos, y se resiente la salud alguna vez, por efecto de las aguas corrompidas que se estancan en los barrancos que hay á su inmediación, y que convendría nivelar para evitarlo.

INTERIOR DE LA POBLACIÓN Y SUS AFUERAS. Murada esta v. en los tiempos ant., subsisten todavía algunos restos de j sus tapias, y se conserva su fuerte cast., situado al estremo E.l de la v. desde donde la domina esta fort. incorporada á la muralla ñor sus costados N. y S., es de arquitectura árabe,] y en su centro se edificó en el año 4 437 , por mandato de D. Lorenzo Suarez de Figueroa el alcázar que habitaron por mucho tiempo los condes y duques de Feria fue reparado1 por los franceses en el año 4840 , agregándole el edificio de Sta. Marina , que fortificaron convenientemente, estableciendo en él el hospital militar y el punto de apoyo para proteger las comunicaciones desde Badajoz á Sevilla hoy están en él establecidas la contaduría del ducado de Feria y marquesado de Villalba , con un contador, 3 oficiales y un portero, cuyos empleados con sus respectivas familias viven en el edificio. La muralla fue renovada á principios del siglo XV, tiene 4 puertas principales colocadas a iguales dist., denominadas del Cubo, de los Santos, de Sevilla y de Jerez entre esta y la del Cubo se halla un portillo llamado del Niño , y en el año 4820 se derribó otro que se llamaba Puerta Nueva , situado entre la de los Santos y el cast. estas dos puertas debieron ser de obra mas moderna. Entrando ya en N la pobl debemos hacer presente en primer lugar, que el ayuntamiento constitucional de 4842 , por medio de azulejos que mandó construir en Sevilla , designó todas las localidades, refundiendo unas en otras, numeró las casas y puso orden á la adm., en términos que según aquellas importantes operaciones es facilísimo en el dia saber cuanto concierne al buen servicio de los veciudad resulta por consiguiente que dividida en 8 cuarteles , tiene el 4.° las calles de San Ildefonso, Boticas, Cruz, Agua , Diego Bastos y plaza de la Constituc i ó n , con 450 casas; el 2.°, las calles de Sevilla , Pasteler o s . Fuente-grande, Sta. Catalina, Jerez y plaza de Isa- Ibel II, con 437; el 3.°, las calles del Gebernador, Cerraderos, Sta. Ana y plazuelas de Sta. Marina y Pilar Redondo con U 5 ; el 4 . a , las calles de la Iglesia, Maestranza, San José, Badajoz, Pozo y Nava, con 164; el 5.°, las de Cestería, Garrotera, Matadero, Monjas y Campo del Rosario, con 460; el 6.° las del Almendro, Mártires y Campo de Marin , con 4 15; el 7.° las de Tinajeros, Fontanilla , Cerrudo y Campo de Sevilla, con 69; y el 8.° las de San Francisco, Cabezo Leal, Ancha y huertecillos de la cera, con 425; componiendo un total de 40 localidades y 4,035 edificios, de los cuales hay habitables mil, y el resto están hechos solares las casas de los cuatro cuarteles primeros tienen dos y tres pisos, y 14 varas de altura; las demás con muy ligeras excepciones son de dos pisos, y guardan cierto orden de alineación ; esceden á todas en hermosura y elegancia, el alcázar de los duques, cuyo patio es un cuadro perfecto de 3o 1 varas cuadradas ; sus columnas son de mármol; las del piso bajo áticas, y las de la galería, redondas; y la casa de los señores Daza, cuadrada, con patio y galerías, sostenidas por columnas de mármol; su arquitectura participa del orden dórico, corintio y jónico; la plaza de la Constitución es llana, cuadrilonga , circundada de soportales iguales , de 4 varas de ancho; y como las casas están á nivel, son de buena arquitectura, y sus espaciosos balcones y ventanas están poblados de macetas de llores, ofrécese un buen punto de reunión la plaza de Isabel II, situado al O. de la anterior que se comunican por un soportal abierto en uno de sus ángulos, es mas pequeña , de igual figura, con soportales en tres lados, cerrando el cuadro la casa consistorial; la– calles en lo general son rectas, espaciosas y medianamente empedradas ; su policía es bastante regular , porque casi todas estan minadas de cloacas, que reciben desde las casas por medio de caños cubiertos, las aguas sucias, y las dirigen á puntos dados llamados caños generales, que desembocan fuera del pueblo en donde no se perjudica á la salud. Estas buenas disposiciones, el bonito aspecto general de la población, sus establecimientos, sus relaciones y su actividad le adquirieron el sobrenombre de Sevilla la chica ahora examinaremos si aun puede conservar este epíteto. Hay casa de ayuntamiento, concluida en 4750 , cárcel á su inmediación que se comunica interiormente; dos escuelas dirigidas por maestros de profesión á las que asisten 420 niños, otras dos de niñas al cargo de maestras examinadas en las que se educan 66; sostenidas todas por las retribuciones de los alumnos proporcionalmente; otra escuela gratuita al cargo de un pasante dotado con 900 reales anuales á la que concurren 412 niños pobres; tres hospitales; el de Santiago, de la propiedad del Sr. duque de Feria , tiene 13,000 reales de renta próximamente, que se emplean en medicinas y ahmentos para 48 pobres, poco mas ó menos que recibe al año, y en los sueldos de administrador, capellán, médico, sangrador y enfermero; el de San Miguel, del que es patrono un vecino de la v. está destinado para enfermedades venéreas; fiero no cumple el patrono con su ob eto , por ser cortas as rentas con que se halla dotado, y el de San Ildefonso, fundado para la convalecencia de los dos mencionados, continúa cumpliendo su institución; hay también una fundación llamada la Caridad , cuyas rentas consisten en 14,000 reales

de censos, los cuales seinvierten en socorrer á pobres enfermos, naturales y veciudad de esta v., asistiéndolos en sus casas de médico, sangrador y medicinas; tres conv. de monjas, en los que subsisten las religiosas , á saber Sta. Clara, del orden de San Francisco, fundado en el año 4 428 por el Sr. D. Gómez Suarez de Figueroa y su mujer Doña Elvira Laso de Mendoza, progenitores de los señores duques citados al abrir los cimientos de este conv. se encontró una imagen do piedra blanca, con un rótulo, que decia «Sta. Maria del Valle, ora pro nobis», por cuya razón se dio al conv. esta advocación; Sta. Catalina, del orden de Sto. Domingo, fundado, según se cree, en los años 1500 por Doña Inés de Santa Paula,» aunque no puede asegurarse por haber desaparecido los archivos en las inundaciones á que estaba espuesto; situado este edificio en el centro y punto mas hondo de la población, una gran parte de las aguas que vierte la sierra de San Cristóbal, entraban en el pueblo por el cercado y sitio llamado el Conejal; las que aumentadas considerablemente con otras deítérm y calles délos costados, confluían y pasaban por el edificio, causando en él _y en las casas inmediatas deplorables estragos, hasta el año 1792, que por disposición del ayuntamiento se hizo una alcantarilla de 2 varas de altura, que recibiendo todas las aguas en el mismo sitio del Conejal, las conduce subterráneamente hasta fuera de la pobl , de modo que desde que se hizo esta obra, que hace honor á sus autores, no han vuelto á repetirse las inundaciones; Sta. Teresa , Carmelitas descalzas; se fundó en el año 4736, á espensas de Doña Maria Serrano, natural de esta v., por el limo. Sr. D. Amador Merino y Malaguilla, obispo de Badajoz ; otros tres suprimidos ; la Cruz, fundado por Maria de la Cruz, profesa de la tercera orden, con otras beatas naturales de Zafra por los años 4536; el edificio actual fue comprado por las monjas en el año 460′); su iglesia se conserva con culto, parte del conv. enagenado y el resto cedido al pueblo en el año 4842 para los establecimientos de enseñanza; Sta. Marina, fundado en una ant.

ermita de esta advocación; siendo primero beaterío, se erigió en conv. el año 4521, y ha tenido varias ampliaciones y mejoras ; Regina Celi, fundado en 1537 por fray Domingo Raltasar, dominico, en la casa núm. 41 de la calle de San Ildefonso eran beatas sin clausura, y en el año 4607 se trasladaron al edificio actual, haciéndose profesas ; al tiempo de la esclaustracion se refundieron las monjas de este conv. con las del Carmen; los otros dos con las de Santa Clara otros tres de frailes también suprimidos; la Encarnación y Mina, dominicos; fundado en 4528 por doña Maria Manuela Suarez y Figueroa , condesa de Medellin, que cedió á la orden sus bienes y rentas con este objeto, y fue enterrada en la iglesia antes de concluirse. La arquitectura del templo es de orden dórico, cuyas columnas y bóvedas merecen la admiración de los inteligentes; San Francisco, ó San Renito, fundado en 1480 por D. Gómez Suarez de Figueroa, segundo conde de Feria, está en completa ruina desde el año 1809 en que los frailes se trasladaron á su enfermería , situado en la calle Ancha; ha sido enagenada y continua abierta su iglesia con consentimiento del propietario; San Onofre , fundado por D. Lorenzo Suarez de Figueroa en 1 447 ; este conv. se halla en el arrabal de la Lapa, dist. 2 leg. de esta v., que habiéndose emancipado hace poco tiempo formando ayuntamiento separado, se le ha concedido el conv.

destinando su iglesia para parr., y el resto del edificio para casas de ayuntamiento y cárcel pública; una ermita, San José , destinada á ayuda de parr.; las tres iglesia de los hospitales ; las capillas de la Aurora, Amparo y Caridad, colocadas sobre las puertas de la v. llamadas de Sevilla, de los Santos y de Jerez ; el oratorio de la cárcel pública ; los de Nuestra Señora del Carmen, Pitra. Sra. del Rúen Suceso y Ntra. Sra.

de Guadalupe, de propiedad particular, y por último la insigue iglesia colegial (Sta. Maria de la Candelaria), que al mismo tiempo es la única parr. de la v.,fue erigida por bula de Paulo V en 6 de diciembre de 4609 á solicitud de D. Gómez Suarez de Figueroa, duque de Feria, creándose un abad mitrado, con uso de pontificales; tres dignidades, tituladas, arcediano de Feria, chantre y tesorero; 42 canónigos, entre ellos un magistral y un doctoral, 8 racioneros y 8 capellanes; el patronato perpetuo de la colegial y la presentación de la abadía , dignidades y demás piezas ecl., se concedió por la misma bula á los señores duques y al cabildo, con aprobación del nuncio de Su Santidad en estos reinos; pero como hace muchos años no se hacen provisiones con motivo del pleito seguido en la real cámara, y que está paralizado; está reducido el clero en el día á un canónigo, un racionero y un capellán, sosteniéndose siu embargo el culto con el lujo y esplendor que ha tenido siempre, pues el cabildo tiene nombrados para este efecto capellanes suplentes que llenan el número de los asignados por estas razones el limo. ob. de Badajoz, remitió al Ministerio de Gracia y Justicia, con esposicíon de 20 de junio de 4836, dos copias del auto provehido en 11 del mismo mes , para la r e ducción de esta colegial, á su ant. estado de pura parr. y nada se ha resuelto la cura de almas se ejerce por un canónigo y dos racianeros con aprobación episcopal, hallándose considerada como curato de término. El edificio se concluyó en 4545, á espensas de D. Pedro Figueroa, conde de Feria, con motivo de haberse arruinado la iglesia ant. que se hallaba donde hoy es plaza de la Constitución ; fue consagrado en 24 de marzo de 1546, por el limo, Sr. Trujillo, ob.

de Badajoz, y al día siguiente se colocó el Smo. Sacramento la arquitectura del templo es de orden gótico; su portada principal de orden dórico y de mármol; la torre está sin concluir y en ella existe el reloj de la v. El ayuntamiento goza desde tiempo inmemorial el privilegio de comulgar el Jueves Santo en esta iglesia con espada ceñida; no se sabe cuando ni qué rey concedió este privilegio nada común en España; pero habiéndose opuesto á él el limo. ob. de la diócesis

D. Mateo Delgado y Moreno, fue confirmado en 1818 por real orden, que comunicó el señor preseidente del Consejo de Castilla.

Las obras do ornato y recreo mas notables son el paseo nuevo, por otro nombre la Alameda, con 3 calles pobladas de álamos, venia del centro un pilar redondo de piedra berroqueña y mármol, que vierte el agua por 4 cañitos en línea vertical este paseóse comenzó en el año 1820 por el ayuntamiento constitucional de aquella época, y se concluyó en el de 1840 la Plaza de Toros al S. del pueblo, empezada en el año 1834 por disposición de la municipalidad con el objeto de facilitar medios de subsistencia a la clase proletaria, aflijida por el espanto que causaba el cólera en aquel año se fabricó todo el círculo esterior, permaneciendo en tal estado hasta el de 1842, que invitado el pueblo por la misma corporación se decidieron 76 personas de las mas acomodadas á suscribirse por 76 acciones á 1,300 reales cada una para concluir la plaza, adquiriendo el derecho de propiedad a los 76 palcos de que consta , sorteados entre los accionistas á 400 pasosalO.se halla el cementerio, construido en 1834 en el mismo sitio en que se hallaba la destruida ermita de San Román, y 1/4 leg. al S. la de Ntra. Sra. de Belén. Se surte de aguas potables en el llamado pilar del Duque, que toma su nombre por hallarse situado á la espalda del cast.; recibe el agua por medio de una cañería que la toma de un manantial llamado la Madre del Agua , á 400 pasos, y es tal su abundancia, que surte á una gran parte de los vec; al pilar de la Alameda; á una charca inmediata de 252 varas de circunferencia y 3de profundidad , destinada para abrevadero; á 2 estanques y un pilar que pertenecen al cast.; á los conv. de Sta. Marina y Sta. Clara ; á una (áb. de curtidos; á un molino de aceite; á varias casas particulares , y mantiene ademas siempre lleno su recipiente , que es de 30 1 /3 varas de largo y 4 1 /2 de ancho en otro pilar llamado de San Benito en el barrio del mismo nombre, que recibe el agua en otro manantial que nace en el ant. conv. de San Francisco, y surte á otra parte del vecindario ; al conv.

de Regina-Celi;’ á la enfermería ; al estanque del conv. de la Cruz; á un lavadero formado al pie del mismo pilar; á varias casas particulares y al pilar redondo en la plazuela de este nombre en 3 pilares pequeños llamados del Piojo, Sta. Catalina y las Carmelitas.- en 4 fuentes repartidas en la pobl , llamadas de los Tejares, Caldereros, Zapateros y Herreros en 2 pozos titulados de la Cava y Nuevo, y por último no hay casa que no tenga su pozo de agua potable.

Están repartidas á diferentes dist. de la v. y con una proporción admirable 39 fuentes, todas de aguas esquisitas, sobresaliendo las de Aguzaderas al O., la Sangría al N. y Blanca al E., ferruginosas á 1/2 leg. al O. se halla la albuera ó charca propia del Sr. conde de Tilli, sostenida por una muralla de 6 varas de ancho , con 4,034 varas de circunferencia y 19 de profundidad . recibe sus aguas de los campos de la Alconera y vertientes de la sierra del Castellar, formando, según diremos mas adelante, una rivera, que por espacio de una leg. da movimiento perenne á los molinos harineros que surten la población en todas estaciones, TKU.MI.NO. Confina al N. con el de Fuente del Maestre; E. Santos de Maimona; SE. Puebla de Sancho-Perez á1/2 leg. de todos; S. y SO. Medina de las Torres y Alconera a 3/4;O. Feria á 2 leg.; formando una faja de 2 4/2 leg. de long., una de lat., y comprende 11,272 fan. de sembradura , medidas con toda exactitud con motivo de la separación del arrabal de la Lapa y señalamiento proporcional á sus veciudad.- de estas son de pasto y labor de propiedad particular 8,012; de propios para igual aprovechamiento 1,000; de olivos 1,317; de encinas 94? , y ademas 55 huertas agrupadas al rededor del pueblo, de 1 á3 fan. de cabida , todas con agua de pie potable y abundante para el riego, pobladas de árboles trutales de todas clases y con su casa para el hortelano.

El monte de encinas déla deh. del Rincón propia del hospital de Santiago, fue arrasado en la sierra de la Independencia , pero se halla nuevamente poblado de chaparros, que se cultivan y dirigen con esmero. Le bañan el Guadajira en dirección de S. áN.,que divide su término con el de Feria ; la rivera de la Albucra , que se forma de las vertientes de la charca ya citada , se une con la de Belén á corta dist., la cual toma su nombre en la ermita de este título, y se forma de varios arroyos que confluyen á la vista del citado santuario al reunirse estas 2 riveras pierden sus respectivos nombres, sustituyéndoles el de rivera de Zafra, la cual recibe en su curso á los arroyos Berganciano y Bris, que solo corren cuando llueve y entra en Guadajira , en el término de la Fuente del Maestre sobre esta rivera á 1/2 leg.

de la v. en el camino de la Lapa hay un puente de mamposteria con 4 arcos; 40 varas de largo, 5 de ancho y 6 de alto en la de Belén frente á la ermita otro con los arranques de mármol, 3 arcos , 16 varas de largo, 4 de ancho y 6 de elevación; en todo su curso hasta que pierde su nombre; otros 3 pequeños llamados la Carrascosa , Marchena y Sutil, todos de cal v ladrillo de uno y dos arcos, de 4 á 8 varas de largo, 3 de ancho y 4 1/2 de alto en el arroyo Berganciano otro puente de manipostería y ladrillo de 24 varas de largo, 2 1 2 de ancho y 3 1 /2 de alto, situado en el camino que se dirige á la deh. nueva, y por último el puente del Guadajira, á la izquierda del camino de Feria , de 5 arcos, 44 varas de largo, 4 4/2 de ancho y 5 de elevación.

C A L I D A D D E L T E R R E N O . Todo es desigual la sierra del Castellar, asi llamada por haber existido un cast. en su cumbre, está coronada de peñascos desde su nacimiento en la ermita de Relen hasta la Albuera, donde concluye estendiéndose 4/2 leg. está aislada como todas las del término, las cuales se prolongan de E á O., y sus peñascos tienen en el sitio mas elevado 54 varas su calidad es una pizarra arcillosa que solo produce en fuerza de grandes adelantos, en abonos y labores y no admite clasificaciones por ser todo inferior hay una veta mineral de cobre, que corre de E. á O. por espacio de 3 leg., con varias catas hechas de antiguo y vestigios de haber sido beneficiada; pues que aun se conservan el socabon y 5 pozos Es escaso de combustible y se surten los veciudad de este art. en los pueblos inmediatos.

CAMINOS. Pasa la carretera de Badajoz á Sevilla á 4/2 leg. N. y se junta en el pueblo de los Santos con la de Mcrida en la deh. del Rincón al N. se ha abierto un ramal que entra por las calles de esta v. y va á buscar otra vez la carretera á 2 leg. al E. esta obra se está haciendo á costa del pueblo voluntariamente, y le promete grandes ventajas, porque ademas de poner en espedita comunicación esta importante v. con las 2 citadas cap., ahorra á los viajeros 3/4 leg. de camino todas las comunicaciones vecinales se han mejorado estraordinariamente desde el año de 4838 hasta el dia , merced al desvelo de los dignísimos ayuntamiento constitucionales y veciudad que han promovido estas mejoras, y con ellas la subsistencia de infinitas familias á ellas se debe el multiplicado uso de los carros, cuando pocos años antes apenas se veia uno.

CORREOS. Tiene adm. caja, á la que están agregadas las estafetas al 45 por 400, de Jerez de los Caballeros, Fregenal de la Sierra, Segura de León , Fuente de Cantos, Rienvenida y Yillagarcia, para cuyos puntos hay establecidos conductores trasversales de nombramiento de la dirección general y pagados por la renta también dependen de ella las carterías de los pueblos de la circunferencia, cuyos conductores están pagados por los ayuntamiento Hace tránsito la correspondencia que desde Badajoz se dirige á Sevilla por Llerena, Cazalla y Constantina y vice-versa, despachándose tres veces á la semana.

P R O D U C C I O N E S . Por regulación quinquenial ascienden las cosechas á 7,000 a. de aceite, 6,000 de vino, 9,000 fan.

de trigo, 5,000 de cebada , 900 de habas y 500 de garbanzos se siembra poca avena y apenas judias, y es abundante en hortalizas y frutas de todas clases; se mantiene ganado lanar, cabrío v de cerda en escaso número ; 40 yeguas con 2 caballos padres; 20 yuntas vacunas, 200 cerriles, 200 muías de labor, 225 caballerías menores y 33 caballos de regalo; y se cria alguna caza menuda, la pesca común de los r. y tencas en la charca referida.

I N D U S T R I A . D O S establecimientos de platería y un ensayador de metales, los cuales sostienen 4 oficiales plateros y un diamantista; 2 beloneros; 3 hojalateros; 2 caldereros y las demás artes y oficios propios de todo pueblo; una fáb.

de aguardiente, 20 molinos de agua; 9 tahonas de una, dos y tres piedras; 11 vigas y aprensas de aceite, y 6 fáb. de curtidos, en las que se elaboran correjeles, cordobanes, tafiletes y regadas los cueros vacunos al pelo proceden en su mayor parte de América, entre los que se eligen por su mejor calidad los de Buenos-aires las pieles cabrias y lanares son de la provincia; se curten próximamente 4,000 cueros vacunos del peso común de 22 libras; 6,000 pieles cabrias y 2,000 pellejos lanares esta ind. ha decaído notablemente; hay cerradas otras 8 tenerías, y ya no existe la famosa fáb.

de pieles fiuas, de las que se hacían guantes, que según la espresion de los viajeros se metian en una cascara de nuez.

(Continua en el original)

YECLA

partido judicial de entrada en la provincia de Murcia. S compone de la v. que lleva su nombre y la de Jumilla , que en lo eclesiástico pertenecen á la dióc de Gartagena, en lo judicial á la audiencia terr. de Albacete y en lo militar á la ciudad g. de Valencia. La distancia entre los dos pueblos que componen el partido etciudad, y los datos de población, riq., contr. y demás pormenores estadísticos, aparecen en los estados siguientes (Ver en el original)

SIT., CLIMA Y VIENTOS. Sit. en el lim. N. de la provincia lindando con la de Alicante y Albacete ; el clima es benigno y goza de un temperamento frió , pero muy sano , debiendo advertir que Jumilla y su término está bajo la influencia de un temple particular, pues no es tan cálido como Fortuna y Cieza , ni tan frió como Yecla, ni tan destemplado como los demás pueblos que cercan al partido por E., N. y 0 . Los vientos que generalmente reinan son, en primavera y otoño los del Ó., muy fuertes pero muy sanos en el invierno el 0 .

bastante frío , y de E. con el que generalmente llueve ; en el estio reina el SE. muy caloroso, y que según la constante esperiencia limpia la atmósfera y desvanece las lluvias ó tempestades. El estado atmosférico en general es seco y en el estio muy propenso á piedra.

C O N F I N E S Ó L Í M I T E S . L O S tiene este partido por el N. con los term. de Caudete y Almaosa, partido judicial de este nombre en la provincia de Alicante; por el E. con los del Pinoso, Salinas y Villena , partido de este nombre y la anterior provincia ; por el S. con los de Abanilla , Fortuna , Abaran y Cieza , partido de este nombre, y por el 0 . con los de Montealegre, Chinchilla y Hellin provincia de Albacete. La estension de Ñ. á S., es decir, del término de Almansa al de Abanilla es de unas 9 leg. y de E. á 0 . varia, siendo la mayor dist. unas 8 leguas.

M O N T E S Y S U S A C C I D E N T E S . Las principales montañas de este partido, tienen su entrada en el término de Yecla por la parte oriental; la sierra de Salinas se introduce en el término

de Villena , en donde se enlaza con otras. A poca distancia en dirección de Yecla está el monte del Serratejo, declives como la anterior y el Serral que forman dilatadas cordilleras, el primero con los montes que se dirigen por la der. de la garganta del camino para Villena, y enlazándose con otras van á concluir en este partido El Serral gira hacia el S. y uniéndose con las lomas llamadas las diferencias, va á terminar cerca de la sierra del Carche en las Pasas, proximidad del lim. divisorio del término de Jumilla. Los altos de Caudete están inclinados al N. y entran en el término de Yecla formando cordillera trasversales con declives al S. y al N., y van á espirar por e! 0 . en la sierra del Cuchillo, enlazándose por el E. con el cerro del Fato, cerca de la jurisd. de Villena. Por el N. del nart. están situado los montes ó lomas de Tobarrillas que se enlazan con otros que pasan á Almansa, teniendo sus declives al S. y al N. Por el N0. las lomas de Moratilla van hacia Montealegre ; por el SE. la sierra del Buey toma la dirección de Jumilla con declives al S., N y E. Al SE. la sierra del Carche entra , procedente de Jumilla, en dirección del término de Yecla , teniendo sus declives al N. y OE. En Jumilla , si nos colocamos en la cúspide del monte del Castillo, que resguarda la población en el lado N., veremos dos cordillera de montañas que se prolongan de E. á O., y aunque entre ellas media cerca de una leg. de distancia, como que de ambas se desprenden diversas ramificaciones de lomas , queda ocupado aquel espacio intermedio , hasta el punto donde se asienta aquella población, por montes y estrechas cañadas. Vuelta la vista al Occidente se descubre una llanura en figura de un cono truncado, cuya base es cortada por una curva que forman de E. á O los montes intermedios llamados del Buey, los Hermanillos, montes del Oro y del Castillo. A la parte E. de la sierra de Sta. Ana, declive al N . , se ve descollar considerablemente la sierra del Carche que es otro ramal desprendido de aquella montaña; esta sierra tiene unas hendiduras que la cortan desde su cima al centro , dejando penosas subidas poblabas de mucho follaje.

Siguiendo la dirección de la montaña de Sta. Ana, en la partc’que forma medio arco . hay un recodo sombrío dando vista á Jumilla en el cual se halla»el conv. de aquel nombre, cuyas pequeñas huertas se riegan con el agua de un escaso manantial que brota en el mismo sitio. Todos los montes del partido están vestidos mas ó menos de pinos, encinas, otros árboles y arbustos , sin escasear en ellos plantas aromáticas, cuya clasificación seria interminable. Encuéntranse en ellos escelentes canteras de piedra de diferentes clases y varias de cal.

Hay en el partido diferentes fuentes ó manantiales de aguas potables. En Yecla hay 3 abundantes, cuyos derrames forman otras tantas acequias llamadas la Vieja , la Nueva y la de Sta. Maria de la Cabeza, con las cuales se riegan algunos terrenos y muelen varios molinos harineros. En Jumilla se encuentra el principal manantial de agua dulce llamada también la Vieja, al NO. del pueblo, cuyas aguas entran en un cauce que la dirige á varias presas donde nay 4 molinos harineros de una piedra, y con las que se riegan diferentes tahullas de tierra.

TERRENO , su CAIIDAD Y CIRCUNSTANCIAS. Entre todos los montes descritos anteriormente se forman diferentes cañadas de buen cultivo y muchos trozos de regadío. Las tierras generalmente son fuertes en demasía , y asi es , que solo dan grandes rendimientos cuando les asisten frecuentes y repetidas lluvias. Como en los dos art. de Jumilla y Yecía se describen con exactitud la clase de los terrenos que forman el término, nos creemos dispensados de volverlo hacer de nuevo por evitar inútiles repeticiones.

CAMINOS. NO hay en el partido carreteras generales, siendo los mas principales el que de Sax pasa en dirección de Alicante, el de Valencia , el de Murcia , el que va para Almansa, otro que conduce al Pinoso|y Villena; la travesía que se llama de Granada, la de Caudete y Montealegre; la vereda de los Serranos que entra en el término de Montealegre; el camino de Jumilla , el de Cieza, el de Madrid y diferentes veredas.

PRODUCCIONES. Las mas generales son , trigo de varias especies, cebada, centeno , avena, maiz y legumbres , azafrán, miel, barrilla, cáñamo, vinos en abundancia de escelente calidad y aceite ; la clase del ganado es lanar y cabrío y muy poco vacuno , y la caza de conejos , liebres y perdices.

La IND. está circunscripta á la agrícola), fuera de aquellos oficios mas indispensables á toda población de regular vecindario, y el comercio á la esportacion á Murcia y pueblos de la prov», de los vinos que se hacen en Yecla , loscuales van en progresión descendente por las muchas viñas que se han plantado en el Pinoso y otros puntos de la provincia de Alicante.

Celébrase en la cabecera del partido una feria anual que principia el 18 de setiembre hasta fin de mes ; los mercados son los miércoles de cada semana. En Jumilla hay otra feria de 15 días que empieza el 2 de octubre ; los mercados son los martes. Los art. de tráfico son géneros del pais, alfarería, vidrio, loza y alguna quincalla y ropas.

ESTADÍSTICA CRIMINAL. LOS acusados en este partido judicial

en el año de 1843 fueron 92 , de los que resultaron absueltos de la instancia 4 0 , penados presentes 79 , contumaces 3, reincidentes en el mismo delito 4, con el intervalo de_4 á 6 meses; de los procesados 25 contaban de 40 á 20 años, 49 de 20 á 40 y 48 de 40 en adelante; eran hombres 83 y mujeres 9 ; solteros 48 y 44 casados; sabían solo leer 4 4, leer y escribir 47, carecían de instrucción 64; ejercían ciencias ó artes liberales 5 y 87 artes mecánicas.

En el mismo período se cometieron 25 delitos de homicidio y heridas con 3 armas de fuego de uso lícito , 2 de ¡licito, 4 armas blancas permitidas , 2 prohibidas, 5 instrumentos contundentes y 4 instrumentos ó medios no espresados.

YECLA v. con ayuntamiento, adm. de rentas subalterna y cabecera

del partido judicial de su nombre en la provincia de Murcia (4 2 leg.), en la cual reside la silla episcopal de Cartagena, á cuya diócesis

pertenece, audiencia terr. de Albacete (42) y ciudad g. de Valencia (48) SIT. en el límite N. de la provincia en la falda del monte Castillo; su CLIMA es frío y propenso á catarros pulmonares en el invierno y calenturas inflamatorias y biliosas en primavera tiene 2,690 CASAS, la generalidad de ellas de dos f)isos y con las distribuciones convenientes para los usos de a agricultura; 3 plazas, la de la Villa , la de la Iglesia Nueva y la del Convento; la primera en el centro del pueblo, con soportales en dos de sus frentes; las salas capitulares; en cuyos bajos está la cárcel y el edificio antiquísimo del pósito, en el que se custodian en ciertos casos algunos presos.

En la Iglesia se encuentra el templo parroquial, es de orden corintio, construido á espensas de los veciudad; tiene la misma planta que la catedral de Murcia. Las calles de la v. son cómodas desde la plaza de la Constitución y las que pasan de E. á O., anchas y de buen piso. Hay 2 establecimientos de beneficencia, uno el hospital, de escasas rentas, y el otro la casa de Misericordia, fundada en 4 794 , hoy en el mayor abandono. Existe un pósito con el fondo de 3,000 fan. de trigo, 4,000 reales en efectivo y 6 ú 8 acciones del banco de San Fernando cuenta el pueblo 3 escuelas dotadas, una de latinidad concurrida por 42 discípulos, y las Y E C otras de instrucción primaria de ambos sexos; también existen otras enseñanzas particulares tanto de primeras letras como de latinidad. Tiene Yecla dos iglesia parr., una de la Asunción, servida por un cura de término, un teniente y 24 presbíteros seculares con un número crecido de esclaustrados; en la feligresia que esta parr. tiene dentro de la población hay 6 ermitas donde se celebra el sacrificio de la misa, y en el campo hay hasta 30; la otra iglesia (Niño Jesús) la sirve un cura de segunda clase ó de ascenso, un teniente, 2 seculares é igual número de esclaustrados el conv. de religiosos de San Francisco perteneciente á la custodia de San Pascual Bailón se encuentra en el mayor abandono sin aprovecharse para nada tan buen edificio. Tiene la población un paseo llamado la alameda en el que hay un lavadero público y al S. entre la espalda del cast. y el montecillo de los Trancos está el cementerio construido en 4835.

TÉRMINO. Confina este por el N. con los de Caudete.

Montealegre y Almansa, provincia de Albacete ; por el E. con el de Salinas y Villena, provincia de Alicante; por el S. con Jumilla, y por el O. con el anterior y el de Montealegre; hay esparcidas por el término multitud de Granjas y cortijos y varios manantiales de los que se forman tres acequias que riegan diferentes terr.; ademas existen las aguas de la empresa de Sta. Maria de la Cabeza, situado al O. á dist. de una hora con otra porción de manantiales en las labores que se aprovechan en beneficio de algunas huertas. El TERRENO generalmente es montuoso, pues solo se encuentran cañadas, siendo de las de mas estension la del Pulpillo, holla del Pozo y Hondo del Campo. Los montes principales , son la sierra de Salinas, la de la Magdalena, la del Cuchillo , la cordillera del Serrol, la de los Gavilanes y el cerro del Arabi; en la sierra de Salinas hay mucho bosque con escelente arbolado y en las restantes abundan aquellas y los arbustos.

Los CAMINOS son carreteros y de herradura que conducen á Murcia, Caudete, Villena, Almansa y otros pueblos de la provincia de Alicante y Albacete. El CORREO entra y sale del modo siguiente lunes y sábados el general, entradas y salidas de Madrid para Alicante y viceversa; miércoles en la noche, de Alicante á Madrid; jueves de Madid á Alicante.

PRODUCCIONES. La principal es la del trigo, cebada, maiz, centeno, avena, legumbres, aceite y vino suficientes para el consumo de la población; críanse hortalizas, verduras y algunas frutas pero en corta cantidad; hay algunos ganados de cabras y ovejas y el mular necesario para la agricultura; la caza menor es muy abundante y no faltan en la sierra algunas cabras monteses y venados, IND.  la principal es la agrícola, ocho fábricas de jabón blando, una de duro , 30 molinos de aceite, una máquina hidráulica, 5 fábricas de aguardiente, 6 molinos harineros y 2 de viento. El COMERCIO está reducido á la esportacion de vino y aguardiente, la cual ha decaído estraordinariamente en pocos años y á la importación de los art. de lujo y los que faltan para el consumo general, POBL. 3,348 v e c , 44,074 almas RIQUEZA IMP.

2.233,937 reales

Es población antiquísima donde so han encontrado numerosas memorias romanas, godas y árabes; aunque no asoma su nombre en la geografía ni en la historia anteriores á la restauración del pais en el poder cristiano; ni cabe reducir á ella otro nombre alguno de los que figuran en la antigüedad; autorizándolo los indispensables antecedentes. Puédese solo congeturar por los vestigios que la misma conserva y la absoluta ignorancia de su origen. Las numerosas ruinas y restos de otras población que hay en su término acreditan cuanto mejor ha sido en otro tiempo la suerte de su terr.; abasteciendo considerable vecindario esparcido en muchas ald. ó antiguos óppidos, vicos etciudad Son notables en su distrito cisternas hechas en piedra viva, en medio círculo de muralla, un cast. sobre el cecino monte Arabinejo y las ruinas de varios edificios. También se han descubierto muchas memorias romanasen sus ald. llamada» Toborrillas alta y baja, en el cortijo de Marísparra; en la ald. de Arabi; entre las fuentes del Pulpillo y los Torrejsnes y en la acequia de v. doride se descubrieron restos de un templo católico anterior á la dominación sarracénica. Las muchas guerras que han trabajado el pais y la falla de las lluvias que modernamente esperimenta la han deteriorado y atligido en diferentes ocasiones.

Alava. Historia civil

HISTORIA CIVIL.  LOS escritores mas ant.  De quienes aparece conocida esta provincia  Con el nombre Álava, son el ob.  D. Sebastian , y el Albeldense ; en las escrituras y privilegios desde el siglo X en adelante es muy frecuente.  Muchos por verlo introducido después de la irrupción de los árabes , buscándolo en su idioma, lo han querido derivar de Arab; Covarrubias de Arabia; pero estas etimologías carecen de todo fundamento , como resultará al tratar de esta invasión.  Garibay opina, derivarse de Uraba, nombre propio de una de sus montañas; mas se ve muy clara la diferencia entre ambos nombres , y sin esto, no es probable que el monte Uraba lo diera á toda la provincia: Oihenart, Florez , Bisco , Cortés etciudad .  Lo atribuyen á la ciudad Alba , que Plinio menciona, diciendo, que los várdulos acudían á pedir justicia al conv.

Pueblos, de los cuales « no hay mas que los albanenses, que plazca nombrar; pero entonces mas bien llevaría este nombre la provincia  De Guipúzcoa, en la que los várdulos ocupaban mucha mayor estension; y aunque también resulta laciudad  Alba en Tolomeo y en el Itinerario de Antonino, tal vez este nombre latino sea debido únicamente á la costumbre de Plinio en traducir á su idioma los nombres que mencionaba ; sin embargo que Pedro de Marca, en su historia del Bearnes, dijo, que Alba habia sido ciudad ep.

En tiempos de los godos: cuando menos es evidente, que antes de conocerse por el nombre Álava este terr., el de Alba habia desaparecido de él (V.)  Sin duda el nombre Álava es una ligera adulteración de Arava ; no del árabe indicado , como han creído algunos ; sino legítimo del vascuence , nombre puramente geográfico, como lo afirma Uzaeta y Gallaiztegui, aunque, con lo que se ha es tendido su aplicación , aparezca hoy en él alguna impropiedad; nombre peculiar del pais ; quizá recuerdo de su última época de verdadera Independencia.  D. Bernardo Ibañez, y otros escritores, viendo en los montes, rios y pueblos de esta (omarca, nombres muy semejantes álos déla región, donde quedó en seco el arca deNoé, como el de la montaña Gorbcga, de Gordiego, en Armenia (Flav.  Joseph.  De ant.  Jud.), Armentia, antes Armetegui ó Armetegi, que se interpreta pueblo de armenios, etciudad, han atribuido su población  á los Tubalistas ó T/iobeitos , de Thobel nombre hebreo sinónimo del egipcio Fhana, del griego Pan, y del latino totum, todo, cuando este nieto de Noe, de su orden , pobló la Iberia, después del Diluvio.  Nosotros no citaremos la escritura, que manda creer este cataclismo universal, ni nos empeñaremos en persuadirlo y demostrarlo , como el sabio Bailly, porque no es de la naturaleza de nuestra obra, y considerado geológicamente nuestro pais, nadie puede negar su despoblación, en algún tiempo, al impulso de las aguas , sea de diluvio universal, al que , ademas de la escritura , lo atribuye la tradición de todos los pueblos, ó de parciales.  La nomenclatura primitiva fué sin duda puramente topográfica; después la mas natural e s , ó por traslación, tal vez siguiendo cierta semejanza, en el dulce recuerdo de los pobladores hacia el país que de jaron, ó en memoria délos caudillos ó gefes colonizadores.

Qué en Atara es común una nomenclatura de raiz conocidamente hebrea, no tiene duda, y la congetura que de su gran semejanza con la de Armenia resulta, para conocer la región de los orientales, que en algún dia la poblaron, no parece lan dcsestimablc , como ha sido en la severa crítica de algunos.

En este pais, privilegiado por su posición, en las grandes vicisitudes que han afligido á la Península Ibérica, se han conservado mas puros los restos de aquellas antiquisimas edades , no habiendo sufrido el yugo de tantos estrangeros , como otras regiones, los cuales los adulteraron ó convirtieron en sus idiomas.  Eslos primeros pobladores , ocupados en descuajar sus tierras, y conducir sus ganados, como los que Oenotro halló en la Saturnia ó Italia, al conducir la primera colonia griega, á quienes, dice Dionisio llalicarnaseo, enseñó á edificar pequeñas ciudad en los collados, ni tuvieron histpria, ni hechos que transmitir á ella.  Otros nombres de distinta raiz , que aparecen entre los orientales , indican el primer grande acontecimiento, después de su población: la época en que los hijos del norte unieron sus costumbres guerreras á las pacificas de los Aborigénes de la oriental alcurnia , aunque Bailly ponga en el N. el ibón del género humano , contra el fundado parecer de Pinkerton, las antiquísimas tradiciones de Platón , en el Timeo y el Erythias, y la sagrada historia de Moisés.  Los celtas invadieron su pais , y del idioma grecó-scitico, (pie á él trajeron, se llamó parte de Várdulos (V.)  Parte de Carietes (V.’j. Ellos les comunicaron también sus dioses ; les acostumbraron á la leche de las yeguas; les enseñaron el uso de las armas, dando motivo á que también se comprendiesen en la espresion de Justino, cuando dijo, que amaban mas la guerra, que el descanso el si extraneus deest, domi hostem queeruni (1), como de ellos mismos dijo Josefo, que eran guerreros hasta el delirio.

Este carácter marcial les hizo buscar las banderas de Cartago, y bajo ellas dar ya á conocer al mundo entero su valor, su constancia, y talentos militares.  Cuando el grande Aníbal pasó los Alpes, el cántabro llevaba la vanguardia de su ejercito, insensible al frió ,_á la sed, y a ia hambre, como refiere Silio Itálico; y entonando el himno de Hércules, que Tácito recuerda de los germanos , al entrar en los combales.  Bajo el nombre cántabros se comprendían también entonces los várdulos y cañetes, y se comprendieron aun por mucho tiempo.  A ellos debió en gran parte el cartaginés la gloriosa jornada sobre el cónsul Flaminio, y también precedían su ejército en la batalla de Caimas.  Algunos, fundándose en un pasage oscuro del epítome de Livio (lib.  48), han ere i d o , .  Que el procónsul Lucio Licinio Lóculo quitó su libertad á este pais, el año 150 antes de J. C.; pero este codicioso fué enfrenado en sus crueles deseos por el valor cántabro unido al pallautino, bajo las murallas de esta heroica c .  , y repelido no solo á la otra parte del Duero, sino hasta la Turdetania (v.  Pallantia vacceorum): los caristos y várdulos conservaron mucho mas su independencia.  Ellos tuvieron aun gran parte en las gloriosas empresas del malogrado Sertorio , y en otros muchos laureles conseguidos sobre los conquistadores del inundo, que, por ser comunes á toda la cantabria, se presentarán en su art.

El Sr.  Marina, en el Diccionario geográfico-histórico de- Navarra, Señorío de Vizcaya y provincia  De Álava y Guipúzcoa por la Academia de la Historia atribuye como un hecho inconcuso, su conquista á Pompeyo; pero se apoya solo en el auxilio, que refiere César, en la historia de la guerra civil, prestaron á A franco , legado de Pompeyo; en Ta España interior, y en el pasage de Floro, que dice: «Nocontentos (los cántabros) con defender su libertad, engreídos de que los romanos no se hubiesen atrevido á invadirlos, tomaron las armas contra estos; instaron á las naciones confinantes á la rebelión; intentaron enseñorearse de sus v e c , y trabajaban con repelidas invasiones y correrías á los vacceos, curgonios (debe corregirse turmodigos) y autrigones, solo porque eran aliados de los romanos.  Casi en los mismos términos se espresó Paulo Orosio; mas nada de esto prueba que Pompeyo les conquistase, salvo el respetable juicio del seiior Marina; ni de aquí resulta mas que una alianza; aunque en la palabra vacceos se corrija várdulos, y se aumenten al testo los cañetes ó caristos, que ni Floro ni Orosio han di cho sufriesen las correrías de los cántabros (V.  Car tetes y varduli.)  Concluida la famosa guerra cantábrica, y cerrado el templo de Jano por Augusto, quedaron fijos los lím.  De las regiones, alterados continuamente autes por incesantes guerras, se levantaron cartas geográficas, y se prensentó exactamente descrita toda esta nación á la curiosidad del mundo, que por siglos la habia admirado en palpitante espectacion.  El terr.  De Álava en lo que hoy comprende las herm.de Zuya, Villareal, Aramayona , toda la llanada de Álava, las de Arana, Campezo, Marquines, Araya, Bernedo, tierras del Conde, y conde de Treviño, pertenecían á los cañetes (Ptolomeo los llamó caristos, esto es, agraciados*, dando al nombre pureza griega, V. Curíeles); lo de las herm.  De Asparena, San Minan, Salvatierra, Ubarrundia, é Iduraiz era de los várdulos (V.  Varduli).  Recibió leyes del pueblo rey: siempre correspondió á la provincia  Tarraconense; en lo judicial fué adscrito al convento de Chuna, como resulta de Plinio.  Su población, según Ptolomeo, constaba de tres ciudad car istias; ó de los cañetes, llamadas Suestassium, Tullica, y Velia ó Beleia como se lee en un códice manuscrito, y cuatro de la Vardulia, Geballa, Gabalaca, Tulonium, y Alba, (V.  Su correspondencia en los respectivos art.). Por espacio de mas de cuatro siglos mostró á los romanos su carácter de lealtad, y de nobleza: las muchas inscripciones que se han encontrado en todo este país, las estatuas , pavimentos mosaicos, barros saguntinos, y particularmente trozos bien conservados del camino , que desde Astorga dirigía á Burdeos por medio de esla provincia, descrito en el itinerario de Antonino, cuyas mansiones eran: Deobriga, Veleya ó Velia, Suissatio, Tullonium, Araceli (V.), lo convencen, contra la opinión de los que dijeron , que el universal dominio de los romanos no habia comprendido á Álava.  A principios del siglo V conservábal e aun el nombre Várdulos, como consta de Idacio, quien, imitando á Mela, que repartió entre cántabros y várdulos el trecho de costa que sigue al E. de los asturianos, escribe oc los Erutos , gente del N .  , canlabriaruin et varduliarum loca marítima crudelíssime deprcedate sunt.  Varios escritores afirman, que en el siglo VI se habia introducido por el nombre várdulos el de vascones, porque estos, que eran sus v e c .  , se habían apoderado de sus tierras; pero esta opinión quedó debidamente refutada por el M. Risco, en el (61.  32 de la España Sagrada, pág.  31G y 344 , probando , que no hay en los escritores ant.  Memoria alguna de tal suceso.  El nombre de los cántabros por su dignidad, adquirida en defensa de las libertades patrias, y en el sosten de los derechos de la naturaleza misma, en un sentido estensivo, como Florian de Ocampo dijo, que muchas regiones se apellidaron celtíberas, sin embargo de tener otros nombres mas ant.  Y mas particulares, se aplicó al terr.  De Álava del mismo modo <pie habia sucedido an les de la célebre campaña de Augusto , porque no eran aun los otros nombres conocidos de los escritores del Imperio: por igual razón recibieron después el de los vascones, de cuyas eminentes glorias, ganadas contra los últimos invasores del N .  , también participaron los hab.  De Álava, como se verá en el art.  Vasconia.  Es le pais estuvo también sujeto á los duques de Cantabria, dignidad que los godos establecieron en su tiempo.  Destruida la monarquía goda por el poderoso Islam, es cuando la ant.

Libertad cañeta y várdula, que por mas de 7 siglos estuviera retirada en los sagrados y desiertos lucos del encumbrado Edulio, volvió á ocupar su asiento , al abrigo de las altas cordillera  Que , como fuertes murallas, desprende el monte mismo en defensa déla deliciosa Arava.  Los nombres de cañetes y várdulos habían desaparecido en las vicisitudes del pais; pero se conservaba en él este otro mas ant.  Aun; todo espresivo de su geografía.  El pais de los éuscaros (la relea vascongada) respiró sin señores: aunque sus usos y costumbres , idioma y fisonomía presentaban un solo pue blo, bien distinto de la restante España, como menos adulterado con el trato de advenedizos; cada una de sus población  Fueuna república independiente, y , sin que el agareno osara penetrar en la feliz Arava, mientras que en las montanas de Asturias se encendía el espíritu guerrero y de reconquista, aqui no se pensaba mas que en defender la libertad conseguida , así contra la invasión del E .  , como después contra las pretensiones ele los reyes ele Asturias.  «Los sarracenos, elicc el arz.  D. Rodrigo , hollada la’virtud y fortaleza de los godos, se apoderaron sin resistencia de toda España, á escepcion de algunas pocas reliquias , que se conservaron en las montañas de Asturias, Vizcaya, Álava etc » El autor anónimo de las genealogías de los reyes de Castilla afirma, que « D. Alfonso el Católico guerreó bien á moros… et conquirió luego de moros á Tuy et Portugal, et Braga… et poblólas ele cristianos: Caliza, Asturias, Álava… en tóelos tiempos fueron de cristianos, que nunca las perdieron.» Mariana creyó, que , perdida la batalla de Val ele Junquera por los reyes de León y de Navarra , Álava quedó por los moros; pero esla aserción carece de todo fundamento .- ademas ele las autoridades citadas, el Silense dijo, que I).  Sancho el Mayor, habiendo estendido gloriosamente sus dominios ,*y arrojado á los mahometanos desde el Pirineo hasta Nájcra, dejó libre y desembarazado el camino de la peregrinación á Santiago, la cual antes se hacia por las estraviadas sendas ele Álava, por temor á los bárbaros: tóelo lo que prueba igualmente lo inexacto que estuvo el mismo Mariana al atribuir su conquista á D. Alonso el Católico.  Las peemeñas repúblicas ó concejos del terr.  Ele Álava, reunidas en el Campo de Arriaga, formaron un estaelo soberano é independiente.  Se estableció la famosa Cofradía del campo de Arriaga, que con tanta autoridad se presentó luego.  Componíase esta junta ele los infanzones hijosdalgos , ricoshomes, caballeros y escuderos; del ob.  De Calahorra, su arcediano , y clérigos de la provincia; y de las señoras y damas alavesas.  Su reunión era anual.

Practicados varios oficios civiles y religiosos , se procedía á la elección de cuatro a l e , y jueces universales, para el gobierno de un año: ele estos uno era siempre justicia mayor, á quien competían las apelaciones y los fallos definitivos.

Nombrábase también para el gobierno militar y político un señor ó conde, que servia de capitán general, ó gefe de guerra, en las que pudiesen ocurrir ofensivas ó elefensivas.  La convocación estraordinaria se hacia por medio elel pregón.  Con estasjuntasy sus acertadas providencias se conservaban ilesas las leyes, usos y costumbres, esenciones, franquezas y libertades ele los pueblos.  Los lím.  Ele este estado eran casi los mismos que ahora tiene la provincia; por N. Vizcaya y Guipúzcoa, por S. la Rioja, por E. Navarra, y por O. Castilla.  Garibay, Moret, y Risco creyeron, que por S. comprendía lo no pasaba de Buradon: Cellorigo y Pancorbo pertenecían ya á Castilla.  No supieron los bravos alaveses mirar pasivos la heroica empresa de Pelayo.  También acudieron á ella bajo su bandera independiente, y la dirección del gefe, ó señor , libre y espontáneamente elegido , en el campo de Arriaga, y contribuyeron no pocoá sus gloriosas empresas (V.  ASTURIAS.)

La relación que por este motivo hubo de mediar entre el estado de Arava , y los príncipes y reyes asturianos, ha persuadido á algunos, que dependía de estos.  Fúndanse ademas en que el arz.  D. Rodrigo dice, que «Alonso el Católico fortificó en ella muchos cast., para defensa de los cristianos,» y el ob.  D. Sebastian refiere , que «D.  Alonso no tuvo necesidad de repoblar esta provincia, por no haber entrado en ella los moros: » pero aquel pudo referirse á las fort.  Boreales de Castilla, que algunos , como se ha dicho , han querido atribuir á Álava, y uno y otro , conocido es lo que abultaron las gloriosas acciones de este rey.  Sin embargo, también pudieron ambos hablar asi por la mera alianza del alavés con el asturiano, á cuyas órdenes militaban los tercios de la república ; y con mas razón pudieron decirlo, si este rey fué elegido señor en el campo de Arriaga, como pudo suceder, de cuya cofradía debió ser bien conocido su nombre, siendo hijo del duque de Cantabria, y por el prestigio de su valor y virtudes militares, conseguido al lado de Pelayo.» La tierra de Álava, dice el cronista de D.Alonso XI, siempre ovo señorío apartado, y era este señorío cual se lo querían tomar los fijosdalgo y labradores naturales de aquella tierra de Álava, y á las veces tomaban por señores algunos de los fijos de los reyes de Castilla, y á las veces al señor de Vizcaya, y á las veces al señor de Lara, y á las veces a!  Señor de Cameros, y en todos los tiempos pasados ningún rey no ovo sen.  En esta tierra, nin puso ni oficiales para facer justicia Y aquel á quien ellos daban el sen., dábanle servicio muy granado demás de los otros pechos foreros que decían ellos el sen.  Y el boy «de marzo.» Salazar de Castro refiere, que

D. Ñuño González de Lara tuvo este s e n .  , «que era separado de la corona, y tan libre que los naturales de aquella provincia  Elegían señor á su arbitrio;» Garibay añade: «que los alaveses y su herm., llamada cofradía, nunca tuvieron justicia de las reyes de Castilla , ni se incorporaron á la corona real hasta el rey D. Alonso.» En Mariana se lee, que «estando el rey en Burgos le vinieron embajadores de aquella parte de Cantabria y Vizcaya, que llaman Álava, ofreciéndole el sen.  De aquella tierra.» Los que se han separado de la uniforme doctrina de tan acreditados escritores, y la han creído fundada solo en consejas y fábulas, teniendo ¡i la vista , para contradecirla, nada mas los dos pasajes citados de D. Sebastian y D. Bodrigo, que, como hemos visto, nada significan, y mucho menos en aquellos exageradores de la historia di España, son los que tal vez siguieron, sin observarlo, un rasgo de adulación hacia los sucesores de Don Alonso.  No asi adulará á los alaveses, sin embargo de la respetable opinión del Sr.  Marina, quien apoye el empeño y tesón con que han sostenido y sostengan su primitiva independencia y sen., y que su gobierno municipal no permita publicar en el distr.  De su jurisd.  Papel ni libro alguno, en que se ofenda ó contradiga aquella prerogativa; no les adulará quien repita con su junta general ordinaria de 22 de noviembre de 1656, «cuan debido es á lailustrísima antigüedad y nobleza de esta provincia, el que haya historia aparte de ella , para que sus hijos sepan su grandeza, antigüedad, su nobleza, sus esenciones y preeminencias, y lo pródigamente que después que siendo libre, sin reconocer superior en lo temporal, se entregó á la corona real de Castilla de su mera y espontánea voluntad.» Esto es lo que presenta claramente la verdad histórica, cualquiera que haya sido el empeño de oscurecerla.  Moret, y aun el moderno Romey, han creído que Fruela, sucesor de Alonso, sujetó á los alaveses, entendiéndolos bajo el nombre vascones, en la espedicion que contra estos hizo, según refiere Sebastian de Salamanca; pero la crónica, albendense solo trae este brevísimo testimonio del reinado de Fruela.-» Hijo de Alfonso , reinó once años.  Alcanzó victorias; pero de costumbres inhumanas, por afán de reinar, mató á su hermano llamado Vimaran, y luego le cupo á él mismo, por su braveza, ser muerto en Canicas.» Aun cuando la relación de Se bastían, abultador de cuanto relata , sea exacta, el monge de V A Silos la entendió mas bien y dijo terminantemente haber sido contra los navarros: «Domuit quoque navarros sibi reveíanles.

» D. Alonso el Casto, arrojado del trono por el tirano Mauregato; en Álava encontró un puerto de seguridad protegido por susjaonas, (1) hasta que fué restituido al trono.

Alonso III al principio de su reinado, contando solo 14 año» de edad, según Sampiro; mas bien 18, como resulta del albeldense, fué también despojado del reino por el conde de Galicia , Froila, y como D. Alonso el Casto , corrió á refugiarse^ entre los libres y bravos alaveses , donde permaneció hasta que , muerto el tirano por el senado de Oviedo, regreso á esta c .  , que le recibió con grandes demostrado nes de alegría.  No tardó este mismo rey á sentir los movimientos de su ambición hacia el libre estado de Álava , que le habia patrocinado con tanta generosidad:» vino un aviso de tierra de Álava, dice Sampiro , de que se habían engreído sus ánimos contra el rey, el cual, oyéndolo, determinó ir allá.  Con el espanto de su llegada, compelidos, y reconociendo su derecho, se le humillaron, prometiéndole fidelidad y obediencia: de esta suerte obtuvo á Álava reduciéndola á su señorío, y á Eylon, su conde, se llevó preso en cadenas.» En aquel tiempo el nombre Álava se estendia tam • bien á las provincias de Guipúzcoa y Vizcaya ; aunque no de otro modo que posteriormente se las ha hado el de Vizcaya , lo que, como dice el Sr.  Larramendi, en el prólogo á su Diccionario, suele ser causa de enojos y disturbios: esto persuadió á Mariana, que fué Vizcaya la (pie con quistó el rey : nada tendría de estraño que hubiera sido la misma Álava, pues repetidas veces vio caer sobre sí la ambición de los reyes; pero aun cuando, en alguna cediera ti la fuerza, solo fué condicional y temporalmente.  En el año 861 sufrió una correría del rey de Córdoba.  En el de 882, el señor ó conde de Álava, Vigila, defendió, por el rey de León, de los ataques agarenos el cast.  De Cellorigo, que era de Castilla, y al año siguiente hizo la misma defensa el conde D. Vela.  En 927 aparece Fernán González-, conde de Castilla, revestido con igual dignidad por la eofradi;?

Del campo de Arriaga; y aunque se espresa en algunas escrituras su dependencia de los reyes de León, esto se entiendo solo respecto al estado de Castilla.  De este conde se dice, que antes de emprender contra el sarraceno una campaña, que se pinta con innumerables fábulas, fue al santuario de

S. Millan, donde hizo voto de un donativo anual y perpetuo en nombre de los pueblos.  Léese en el becerro de su archivo, revestido de todas las circunstancias de monumento apócrifo como dice el Sr.  Marina.  Es útil, sin embargo, porque en él se demarcan los lím.  D é l a provincia, diciendo.

«Álava, con sus v\, que pertenecen á su jurisd.  Esto es, desde Losa y de Buradon hasta Eznate , de fierro por todas sus v., entre 10 casas, una reja.» A consecuencia de este documento se formó otro el año 1025, el cual se hallaba en el mismo archivo; y en el siglo XVI, habiéndose negado muchos pueblos á contribuir con su cuota, se siguió pleito, que terminó por transacción, y se formó un catálogo de los pueblos contribuyentes, marcando la cantidad que cada uno debia pagar en la forma siguiente: Á l a v a .

«Los 1.  Que pagan este voto, que se llama comunmente la »Reja de Álava, son los siguientes: Luco, Arzamendi paga.

»31 mreales: Mendivil 30: Vitolaza: Ciriano 50 : Nafarrete 40: »Luco 31: llermua 25: Froconiz 60: Maistu cada veciudad  3 «blancas.» H e r m a n d a d de A r r a y a .

«Arroslegui, Honrategui , Arrienza, Uñarte, Otouri, «Mizgtigni, Virgala la Mayor y Virgala la Menor , cada veciudad

»3 blancas: Acoceta 374 mreales: Hizona 36: Herendum 50: «herm.  De Zuya 374: herm.  De Zigoytia 600.» l i a s q u e p a g a n t r i g o. «Mendoza 3 celemines: Zurbano 6: Arróyame 2: Dura^ »na 5: Lamia 5 : Zuazu 4 : Orenchun 4: Otaza un cuar- »tillo: Marieta 6 celemines : Arrioga 6 celemines: Hordoa 6 «celemines: Narbaja 6 celemines: Galarreta cuartilla y 1/2:

^Caldacendo 3 c u a r t a s : Ezchcrícoiía 4 celemines: Luzcannlo 2 celemines: Cureña 6 celemines: Langarica 4 celemii> n e s : Margarita 2: Anniz 5 : Lupidana30: Elquesa 3 cuar- »tas.»(V. HILLAN S.). Garci Fernandez y Sancho García fueron condes de Álava, del mismo modo que Fernán González.  Como los reyes de León atentaron contra la libertad de esta p r o v .  , lo hicieron también los de Navarra, después de su engrandecimiento, en el reinado de D. Sancho el Mayor.  Este aparece ya en 1022 titulándose rey de Álava, cuya provincia  Dejó á D. García en la división que hizo de los estados entre sus hijos.  En 1076 D. Alonso VI de Castilla, creyéndose con derecho al reino de Navarra, marchó á ella con su ejército , y subyugó igualmente las provincia  De Álava, Guipúzcoa y Vizcaya, no con mejor título, ni mucho mas duraderos resultados en rigor, que los que antes la conquistaron.  En 1125 fué invadida por el rey de Aragón, D. Alonso el Batallador.  Volvió aserio por el castellano, en 1134.  La estension , que en este tiempo se daba al nombre de Álava, comprendiendo las provincia  De Guipúzcoa y Vizcaya, consta de varios privilegios é instrumentos públicos.  Los reyes de Navarra D. García Ramírez, I).

Sancho el Sabio, y el Fuerte, se abrogaron también el título de reyes de Álava.  Los alaveses acudieron , unidos al ejército d e B .  García Ramírez a l a conquista de Almería.  D.Sancho el Sabio, y I).  Sancho el Fuerte, fuera del nombre de reyes dé Álava , que usaron sin derecho alguno, poseían en esla pro- \ incia algunos solares: aquel engrandeció y fortificó el pe queño pueblo llamado Gazteiz; este robusteció sus murallas

(V. Qazteiz y Vitoria;, y concedieron varios fueros y privilegios á otros pueblos, que les pertenecían.  En 1200, D. Alonso VIH se enseñoreó de toda la provincia: no cabe apurar bajo que obligaciones para el pueblo vencido, y con (pie ventajas para el vencedor, lo mismo que en las anteriores épocas, (pie como en esta, fué afligido el pais, que , avezado á gobernarse por s í , con sus jetonas, y avasallándose á la fuerza por precisión, y temporal, ó condicional mente, como dice un historiador moderno, se allanaba al yugo; puesto sin embargo siempre cu guardia.  El señor Marina, con la mayor diligencia trata de persuadir y probar esta conquista: ol arz.  D. Rodrigo, Lúeas de T u y , la crónica general escrita de orden del rey D. Alonso el Sabio, Fr.  García de Eug u i , ob.  De Bayona, Garibay, y Mariana, que son las autoridades que c i t a , ni remotamente contestan, que D. Alonso conquistara ni hostilizase á la cofradía de Álava, sino los estados y pueblos del rey de Navarra, de los cuales se comprendían muchos en el t e r r .  , conocido con el nombre Álava, á que tan lata aplicación se daba , asi como se comprendían también muchas posesiones del mismo D. Alonso, adquiridas por uno y otro rey por cambios y convenios amistosos, ó en las calamidades del pais; por lo (pie el cronista de D. Alonso XI, dijo… «y en todoslos tiempos pasados ningún rey no ovo sen.  En esta tierra, nin puso ni oficiales para facer justicia; salvo en las villas de litaría g Treviño que eran sagas del rey, y aquellas tierr a s , sin aquellas v. llamábase cofradía de Álava.» En ninguna parte resulta (pie D. Alonso ejerciera su autoridad real en otros pueblos, que en aquellos, que eran ya anteriormente suyos, ó del Navarro; por el contrario, la cofradía del campo de Arriaga aparece ejerciendo sus actos de libertad, como antes; pero, como en nada perjudica á la idea de la libertad alavesa la demostración, que el señor Marina se propone, pues el derecho del mas fuerte ya no es derecho ni puede exist i r , sino mientras dura la misma fuerza sea material, ó de preocupación, y los alaveses, al menos es constante, volvieron á su anterior independencia; ellos mismos no deben repugnar convenir con el señor Marina; y asi se lleva concedido.  En 1283 aparece D. Diego López de Salcedo titulándose «Adelantado en Álava ct en Guipúzcoa.» Tampoco esta nueva autoridad, por los reyes de Castilla, ejerció en su nombre poder alguno sobre la cofradía de Arriaga; ni lo ejerció después como prestamero, que aparece siendo en 1275; sino siempre sobre las posesiones reales, que habia en la p r o v .  : él mismo fué elegido señor por la cofradía de Amag a : esto resulta de un instrumento del archivo de S. Miilan, carta partida , fecha en Vitoria, en el conv.  De San Francisco á 7 de diciembre de dicho año, por cuyo instrumento se ha querido probar, (pie era señor de la cofradía, y su presidente, dándole una lectura viciosa; sin (¡ue 211 ya de por sí sea monumento que merezca la fe bastante en prueba de tanta consideración ; pero aun cuando en él resultara cuanto se ha querido, y fuese exacto, nunca podría acreditar mas que la duración en aquella época de un efecto de la violencia de D. Alonso , con la que se ha convenido , sin que nada baste jamás á autorizar semejantes derechos.  En un privilegio dado por D. Alonso el Sabio en 1258 se lee: « Todos los vuestros vasallos de Álava, ó collazos , ó barqueros, que á las nuestras pueblas de Vitoria é Salvatierra vinieron poblar fasta el dia de la era de este privillegio, que finquen en aquellos lugares de las nuestras pueblas, do,ellos fincar quisieren, et los heredamientos quo obieren en Álava, sacado ende aquello , (jue vos á nos diestes , en este privillegio que es escrito, et sacado en nuestro heredamiento que nos habernos en Álava, (pie fué de D. Sancho Ramírez, que lo al que han en Álava que finque a vos libre é quito.» Por este previlegio dirigido á los caballeros y fijosdalgo de la cofradía de Arriaga se vé , que aquel monarca se reconocía sin derecho en, ni á las posesiones , que tuviesen en el sen.  De Álava los que iban á poblaren sus reales dominios.  En 1310 se concedió á la v. de Azpeitia por D. Fernando IV un privilegio de fuero que dice: «Y sobre lo dicho mando á Sancho Sánchez de Velas – co, mi adelantado mayor en Castilla, y á cualquier otro adelantado que fuere de aqui adelante , ó á los merinos que anduvieren por él en la provincia  De Álava, que los amparen é defiendan en esta merced que yo le fago, é non consientan á nin gimo que les pase contra ella.  » Esto se entiende respecto a las mismas posesiones reales t como se entiende (letales po sesiones ó de señores subditos del rey de Castilla cualquiera otra disposición de la corona.  Grandes disturbios se levantaron entre la real v. de Vitoria y la cofradía de Arriaga: basta con las armas llegaron á disputarse el dominio de 45 ald.. á ipie unos y otro se creían con der.: en su vistaD.  Alonso XI envió á su merino mayor de Castilla Juan Martínez de Leyva, para que pusiese término á aquellos trastornos: ambas partes se comprometieron en él, eligiéndole arbitro, y de su imparcialidad resultaron la avenencia, la confirmación real, y el privilegio cuyo principio dice: « Por ende nos ca lado todo eslo.  é porque el conceio de Vitoria nos envió mostrar por Sancho Martínez, é por Pedro Ibañez Davala, é Martin Pérez de la Caleia, sus personeros, en como la v. de Vito ria estaba enmedio de Álava, éque eran poblados en derredor dalla ricos bornes é infanzones, é caballeros, é otros mu chos homes fijosdalgo poderosos, de que habían rescibido grandes premias de muertes de bornes , é de muchos otros males, é porque la dicha nuestra v. fuese meior po blada é ellos oviesen masen que v i v i r , é el nuestro ser vicio meior guardado…. é por partir contiendas é daños ó males que reerescian de cada dia cutre los dichos ca baberos é fijosdalgo de Álava, ó el dicho conceio de Vitoria.» Poco después de este acontecimiento, la co (radía de Arriaga Ubre y espontáneamente depositó todo su poder en la corona de Castilla; pero bajo ciertos pactos y condiciones.  El instrumento y privilegio de 2 de abril de 1332, dice asi: «Porque D. Lope de Mendoza, é l).  Bel tran Yañez de Guevara, señor de Oñale, é Joan Furtado de Mendoza, é Ferrant Roiz, arcidiano de Calahorra .  ó Boi López, fijo de D. Lop de Mendoza, é 1).  Ladrón de Gueva ra E todos los otros fijosdalgo de Álava, asi ricpsho mes, é infanzones, é caballeros, é clérigos , é escuderos Ii josdalgo, como otros cualesquier cofrades que solían seer en la cofradía de Álava , nos otorgaron la tierra de Álava que oviesemos ende el señorío, é fuese regalenga, é la pusieron en la corona de los nuestros regnos, é para nos , é para los que regnasen después de nos en Casticlla é en León.  E renunciaron , c se partieron de nunca haber cofradria nin ayuntamiento  En el campo de Arriaga , nin en otro lugar, ninguno á voz de cofradria, nin (pie se llamen confradres.  Kf renunciaron fuero, é uso, é costumbre que habían enes ta razón para agora, é para siempre jamás.  Et por eslo liciéronnos sus peticiones.» Incorporado esto terr.  á la Mo narquíaCastellana, sus hab., sin embargo, quedaron con grandes preeminencias y exenciones.’  Otorgamos, dice el instrumento de voluntaria entrega, á lodos los fijosdalgo de Álava, é tenemos por bien .  Que sean libros e quitos de todo pecho, ellos, é los sus bienes (pie han, v ovieren daqui adelante en Álava» con otras concesiones .  (¡ue.  On el citado privilegio de no poder ser enagenado de la corona; pero, á pesar de esta concesión , varios pueb.  Fueron dados a algunos caballeros, en recompensa desús méritos, y por otros motivos particulares.  Pidieron al rey que les otorgase el fuero, é los privilegios, que á Portiella Dibda; y hubieron en contestación «que otorgamos é tenemos por bien, que los fijosdalgo hayan el fuero de Soportiella para ser quitos, é libres ellos, é sus bienes de pecho.  Et cuanto en ios otros pleitos, é en la justicia, tenemos por bien que ellos, é todos los otros de Álava hayan el fuero de las leyes.» El año 1 3 4 0 concurrieron los alaveses á la célebre batalla del Salado, acaudillados por D. Pedro Nuñez de Guzman, donde acreditaron su valor ant., y lo acreditaron también en el sitio de Aigcciras , comandados por D. Ladrón de Guevara y D. Beltran Yelez, su hermano,, hijos de la misma provincia; el rey D. Alonso premió este valor con nuevas exenciones, fueros y privilegios.  En los bandos y parcialidades que á principios del siglo XV agitaron las provincia  Vascongadas, los alaveses supieron conservar su tranquilidad, á pesar de los esfuerzos de los grandes, en particular del conde de Castañeda,

D. Iñigo López de Mendoza y D. Pedro López de Ayala.

Don Enrique IV confirmó á la provincia  Sus privilegios.  Los alaveses le sirvieron decididamente en la guerra, que, en 1 4 6 1 , emprendió contra el rey de Navarra.  También prestaron señalados servicios á los Reyes Católicos en sus guerras contra

D. Alonso V de Portugal, contra los franceses, y en las espediciones de Málaga, Yelez Málaga, y Granada.  El Rey Católico les concedió permiso para conquistar por sí la fort.

Del Estella : «Ya sabéis (dijo al dip.  General en la carta que le escribió al efecto ) como me escribisteis que esa provincia

Bogaría que se le diese la empresa de la toma de la fort.

De Estella: é vo con la confianza que tengo de los de esa tierra, que harán en ello, lo que siempre^ han hecho en las cosas de nuestro servicio, he acordado de daros la dicha empresa etciudad» Hasta el mes de agosto de 1520 no se esperimentaron en Álava los trastornos que , con el nombre de comunidades, tanto agitaron á Castilla, y permaneció siempre fiel al emperador, á pesar de las instancias de las

ciudad de Burgos y Nájera, y de la v. de Haro.  En 1 5 2 1 , el conde de Salvatierra se presentó en el campo de Arriaga, haciendo esta provincia  El teatro de la guerra civil.  En junta celebrada en Vitoria á 9 de abril, se decretó: que todas las herm.

Acudiesen armadas , ó á lo menos con la mitad del importe de sus fogueras, y víveres para ocho dias, al lugar de Arauguiz.  Se confió el cargo de capitán general á D. Martin Ruiz de Gamboa y Avendaño.  Este á su frente, y con a l gunas otras tropas, que le reforzaron , buscó al conde, y le derrotó : prendió á Gonzalo Baraona , su principal capitán, hizo 6,000 prisioneros, y ganó muchas armas y banderas.

Como en los tiempos ant., han dado los alaveses en el presente siglo eminentes pruebas de ejemplar lealtad, haciendo los mayores sacrificios en sus mejores hijos y en sus fortunas , para sostener la independencia nacional, combatiendo las huestes del capitán del siglo , bajo las banderas del inmortal general Mina , y particularmente en la célebre jornada de Vitoria, donde vino á estrellarse el ejército francés , que fué batido por las tropas españolas á las órdenes del general Álava, y las inglesas á las de Yv’ellington.  Como para formar contraste con la unión de los españoles en la guerra de la Independencia , hubieron de presentarse d i v i didos los españoles en la lucha de la segunda época constitucional , en la que, no pocos alaveses, bien por conoceF comprometida la causa de sus fueros, bien porque creyeron en peligro otros intereses no menos caros, para aquel pais, combatieron el régimen liberal, por el que suspiraban otras provincia  Fatigadas de las demasías del gobierno absoluto.

En la última guerra, una gran mayoría de alaveses siguieron el pendón de D. Carlos, siernpre creyendo en inminente riesgo la causa de s u s fueros.  Inútil es decir, que en esta terrible lucha han acreditado su proverbial valor v constancia, prestándose á toda clase de sacrificios por aquel á quien juraron fe y obediencia: llegó un dia memorable; el del Convenio deVergara, y en él l o s batallones alaveses abrazaron como hermanos á los que antes h a bían combatido como enemigos.  Álava celebró aquel acontecimiento, no apreciado en l o d o su valoré importancia, porque deseaba la paz ardientemente.  En octubre de 1 8 4 1 ere y ó , no la provincia  De Álava, sino algunos alaveses, quedebian alzarse contra la regencia del Duque de la Victoria: hubo de comprometerse en aquel movimiento una persona distinguida y aprcciable, el dip.  General de la provincia, Don Iñigo Orles de Velasco , marqués de la Alameda: la junta general reunida á los pocos dias no hubo de aprobar aquel alzamiento, y el marqués de la Alameda afectado y conmovido resigno su autoridad ante los representantes de la provincia

Posteriormente, comisionados de la provincia  Han conferenciado con el Gobierno, para el arreglo de los fueros, sin que se haya concluido tan delicado negocio.  Ojalá presida á esta difícil operación el tino indispensable, dejando terminadas todas las diferencias entre provincia  Digna de altas distinciones y el Gobierno ; esto debe mirarse como cuestión en que reside la felicidad de los leales, virtuosos, y bravos alaveses , y la paz de todos los españoles.  En los momentos de imprimirse este art., se halla nuestra inocente Reina en Ja provincia  De Álava, recibiendo inequívocos testimonios de aprecio, hasta de parle de aquellos que siguieron las banderas de

O. Carlos.

Si la célebre cofradiadel Campo de Arriaga merece tan distinguido lugar en la historia , también lo merece el gobierno que después se estableció en esta provincia  Ademas de los ale.  Ordinarios, procuradores generales, regidores, dip.

Y otros ministros inferiores;, a quienes correspondiera el gobierno ,político y económico, y la adm.  De la justicia civil y criminal, conforme al derecho y leyes del reino, y fueros municipales, en la parte que no estaban derogados por aquellas, en sus respectivos pueblos y v., como se dice en las descripciones particulares, se formó un código legislativo , ^conocido con el nombre de Ordenanzas de las herm.  De Álava, común á toda la provincia  Y á cada una de estas pequeñas herm., y pueblos, comprendidos en ellas, según sus mutuas relaciones, y con el cuerpo de provincia, de que eran parte.  La primera memoria de herm.

Se halla en un privilegio rodado de D. Fernando IV, á favor de Vitoria, fecha en Burgos á 2 7 de Julio de 1 3 0 2 , por el cual confirmó su herm.  En 1 8 1 5 se agregó Vitoria con otras v. de Álava á las célebres herm.  De Castilla, Galicia, Asturias y León, cuyos procuradores suscribieron, lo que se acordó sobre sus -demandas, en las C o r les de Burgos de dicho año.  Después de los de esta ciudad filman en segundo lugar, por Vitoria, Yañez y Martin Juan: en cuarto, por Treviño, Fortun Pérez Eyenego Pérez , por Salinas de Anana, Rui Martínez: por Berantevilla y Portiella Dibda, Sancho Pérez y Martin Yañez: y por la v. de Peñacerrada, Gonzalo Sánchez.  Por instrumento que para en el archivo de Anana, fecha en la v. de Haro á 6 de agosto del año de 1 3 5 8 , consta que la v. de Vitoria formaba herm.  Con las de Haro, Logroño, Nájera, Sto.  Domingo, Miranda, Treviño, Briones, Navalello, La-Bastida, Salinillas, Porti lia, Salinas de Anana, La Puebla de Arganzon, Peñacerrada, y Sta.  Cruz de Campezo.  Para mejor régimen y gobierno de esta herm., se dispusieron varios capítulos de ordenanzas que están insertos en el citado instrumento, en la junta que celebraron en la v. de Haro, los respectivos comisionados.

Pero ni estas herm.  Habían sido generales ni autorizadas competentemente por los soberanos, ni tuvieron por objeto, reunir y enlazar entre sí todos los miembros y partes del cuerpo de provincia, hasta el año de 1 4 1 7 , en que las

v. de Vitoria, Treviño y Salvatierra, con el motivo de muchos y graves delitos, como que asi de dia, como de noche se cometían en ellas y sus comarcas , para remedio de estos desórdenes, formaron entre si herm., y un cuaderno de treinta y cuatro ordenanzas para su gobierno, que enviaron al rey D. Juan II, pidiéndole tuviese á bien confirmarlas, como lo hizo en Valladolid á 6 de abril de dicho año.  En la 3 4 , dice el rey: que para bien gobernarse y guardarse esta herm., era necesario que entrasen y fuesen en ella la Puebla de Arganzon, con su jurisd., Nanclares de la Oca, Ollavarri, la herm.  De Ariniz, la de Cigoitia, Zuibarrutia, hoy Zuya, Ubarrundia, Villareal de Álava y su jurisd., Éguilaz, Barrundia, Gamboa, Ururaiz, Arrayo, Araya, Contrasta, Peñacerrada con su jurisd., y los otros 1.  Que están enmedio de ellos.  Manda también á la herm.  Requiera á los dichos 1.  Entren en ella; y esto hecho si alguno ó algunos de ellos no quisiesen entrar ó ser en ella, que en tal caso, si en el que no quisiese se cometiese algún delito, hur lando ó robando algún v e c .  , ú áotra persona sin razón, la herm.  No tenga obligación de ayudarle, ni á seguir al delincuente ni á practicar en ello diligencia alguna.  Confirmó esta herm., igualmente que su cuaderno de ordeaanzas, con algunas ligeras alteraciones, el rey D. Enrique IV en Madrid á 2 2 de marzo del año 14 5 8 , como todo consta de una real cédula del rey Católico del año 1 4 8 8 , que para en el archivo de la provincia  Y se dice en ella:» Por cuanto el rey D. Juan el II, de esclarecida memoria, que Dios haya, mandó facer y fueron fechas las herm.  De Alav a , con la ciudad de Vitoria, y las v .  Y 1., y tierras sus adherentes, porque la dicha tierra estuviese en paz y sosiego y justicia, é los malhechores fuesen castigados y punidos, y les confirmó y aprobó un cuaderno de ciertos capítulos y ordenanzas por donde se rigiesen y gobernasen las dichas herm., y ejecutasen la justicia, y castigasen, é impusiesen los malhechores, é después el muy alto, é muy escelente príncipe, y muy esclarecido rey é señor, nuestro rey D. Enrique IV, reinante en estos tiempos en los reinos de Castilla é de León, y aprobó y confirmó las dichas herm., é les dio otras ciertas, sus cartas y provisiones por dó se rigiesen y gobernasen las dichas herm.» Por estas ordenanzas, que jamas llegaron á publicarse, ni tuvieron uso, se arregló toda la economía pública; en ellas se fijaba la jurisd.  De lósale, y á cuantos se estendia, así la de los de herm.  Como la de los ordinarios: se determinaban los delitos y casos de herm.

Y las penas de los delincuentes: algunas de ellas parecían sanguinarias y demasiado crueles, acaso lo exigirían asi la enormidad de los delitos y la perversidad de los malvados.

Tales son la 6.», en que se establecía, que si el delincuente robó ó hurtó en cualquiera parte de diez florines del cuño de Aragón para arriba, siendo villano, fuese ahorcado, y si hidalgo, empozado, hasta que se muera, y teniendo bienes satisfaciese las costas á la herm,, y al agraviado el hurto, y en el caso de ser el hurto de cantidad de diez florines abajo, se le cortasen las orejas á raiz del casco, pagarle lo robado, con las setenas si tuviere bienes, las costas á la herm., y siendo notado de otros delitos anteriores fuese muerto.  Todas estas leyes y ordenanzas se anticuaron, porque Enriqne IV, sin embargo de haberlas confirmado, tuvo por conveniente formar otras nuevas, á cuyo fin dio comisión á varios sugetos de su confianza, para que juntos con algunos procuradores y dip.  De las herm.  Estendiesen los convenientes reglamentos, para su gobierno, como lo hicieron, insertando en el nuevo cuaderno algunas de las ant.: el congreso se tuvo en Rivabellosa el año 1 4 6 7 (V.), y en el mismo las confirmó el rey D. Enrique, y después los Reyes Católicos en Zaragoza á 1 5 de enero de 1 4 8 8 , y Carlos V en Valladolid á 18 de mayo de 1 5 3 7 .  Este cuaderno es, por el que se gobernaban desde su publicación.  La herm.  Nombraba dos comisarios de provincia, empleos primeros, y los mas honoríficos de la herm., y eran como superintendentes de todos los negocios y asuntos políticos y económicos, y jueces supremos en las causas y casos de herm.  Por la ordenanza 7 .  A del año 1483 se mandó, que los dos comisarios fuesen nombrados en la junta general, que por el mes de noviembre celebra anualmente la provincia, debiendo recaer la elección del uno en sugeto que fuese de la ciudad ó v., y la del otro en alguno de los pueblos, comprendidos en el resto de su terr.  Fue muy respetable en Álava el oficio de Ale.  De herm.: en la segunda de las leyes municipales del año de 1 4 1 7 , se establecía: «que haya ale.  En esta herm., para que los querellosos querellen de los malhechores á estos ale., ó cualquier de ellos mas comarqueros, para que los alcancen é cumplan de derecho, y los tales ale.  Que fueren puestos en las dichas herm.  é en cada una de ellas, que sean bornes buenos, llanos, é abonados é comunes, sin sospecha, tales que teman á Dios, é al rey, é amen de facer justicia.» En la ordenanza 4 .  A de las dispuestas en el año de 1 4 6 3 , se espresaban las facultades de estos a l e , y los cinco casos en que debian conocer’, que son; incendios, hurtos, robos, muertes, quemas y quebrantamientos de casas, etciudad Tenia la provincia  7 5 a l e .  , repartidos en sus 5 3 herm., las cuales hacían el nombramiento en el primer dia del año, con arreglo á los últimos arreglos de provincia  En el término de 1 5 dias después de su elección, debian presentarse al dip.  General para ser confirmados en sus empleo!, y concluido el año de estos, eran residenciados en junta general, á donde debian acudir con testimonio, que acreditara haber desempeñado fielmente su obligación.  Pero el empleo mas señalado y honorífico de la provincia  Era el de Maestre de Campo y dip.  General, gefe y superior de toda la provincia, á quien estaban sujetos y subordinados todos los ale.

De herm., y demás ministros de ella, en calidad de juez supremo: tenia su tribunal separado, donde daba aud.  á las partes en todos los negocios civiles y criminales, que tenian conexión con los negocios de provincia: á él se dirigían y comunicaban las órdenes del rey , ministros, consejos y cnancillerías.  En las juntas generales y particulares, era el presidente de las asambleas; pero no tenia voto alguno ni podia impedir que cualquiera de los constituyentes propusiera en ellas lo que tuviese por conveniente; y todo el tiempo que duraban estos congresos, cesaba el ejercicio del empleo de dip.  General en cuanto á los negocios de gobierno político y económico de la provincia  Y sus herm., en cuyas circunstancias residían en la junta todas las facultades.  El dip., como maestre de campo y comisario general, era gefe militar de la provincia  , y á él se dirigían las órdenes superiores, y con él debian entenderse los oficiales de cualesquiera regimientos que transitasen por Álava , les daba los itinerarios, señalaba los alojamientos y veredas que debía seguir la tropa con arreglo á la real cédula de 5 de octubre deM621.  Gozaba, en fin, de otras muchas regalías y facultades, de los ant.  Comisarios de herm., cuyos oficios se redujeron á muy poco, después del establecimiento de dip.  General en el año de 1 4 7 6 , que se titulaba juez ejecutor de los casos de herm.  Como puede verse por estenso en la historia civil de Álava, publicada por D. José Landazuri y Romarate.  Habia ademas y hubo siempre, á lo menos desde el año 1 4 6 3 , dos escribanos fieles de fechos, empleos recomendables y que obtuvieron en todas ocasiones personas muy señaladas.  Tenían por oficio asistir al dip.  General en cuanto se le ofreciera, así en los asuntos políticos y económicos, como en lo civil y criminal, y concurrían á todas las juntas generales y particulares de provincia  En virtud de ordenanza, se celebraban siempre en Álava dos juntas generales anuales, una desde el dia 4 de mayo, y otra, que llamaban de Sta.

Catalina; daba principio en 1 8 de noviembre: se componían del presidente, que era el dip.  General, procuradores de las herm., sus ale., el tesorero de provincia  Y los dos escribanos mencionados.  Los congresos de mayo se celebraban en aquel pueblo que eligiese la mayor parte de votos de las juntas de noviembre, y estas siempre en la ciudad de Vitoria , y en la magnífica sala que construyó la provincia

En el conv.  De S. Francisco, destinándola para este efect

o , y custodia de su archivo, y armería ant.  Y moderna.

Por un efecto de estas leyes y gobierno municipal, y de los sabios acuerdos de las juntas generales, se desvanecieron los bandos, y guerras intestinas, que tanto habían conturbado la provincia: cesaron los atentados, crímenes y violencias.

Desaparecieron los enemigos del sosiego público, y los alaveses, comenzando á disfrutar las ventajas de la libertad civil, pudieron desde luego resarcir las quiebras pa – sadas, y convertir el acero y el hierro empleado hasta entonces en derramar sangre humana, en rejas y azadones para romper la tierra yerma, y buscar en su seno las verdaderas riquezas del Estado.

HISTORIA ECLESIÁSTICA.  Tratando el M. Argaiz de las antigüedades ecl.  De la provincia  De Álava, dice, que en los cuatro primeros siglos de la iglesia  Estuvo sujeta, en lo espiritual, á los ob.  De Flaviobrigo, (V.), de Alverito (V.), de Valpuesta, ó á otros de los que partían término; y que en el año de 4 3 1 se erigió la sede ep.  En Armentia; pero este autor se funda solo en las conocidas invenciones de Antonio Lupian.  La silla de Valpuesta no se halla mencionada hasta el año 8 0 4 en que vivia su primer prelado Juan.  En la epístola de los PP.  Tarraconense al pontífice Hilario consta, que en elsiglo V el obispado de Calahorra era el último de la provincia  Tarraconense por la parte que confinaba con Galicia.

El licenciado D. Bernardo Ibañez , deseoso de honrar el ob.

De Álava, publicó como auténtico, el testamento de un caballero llamado Ildemiro, en el cual se nombran algunos ob.  Inmediatos á la pérdida general de España, y sedienta la tradición de los ant.  Alaveses, sobre que la espre sada iglesia  Fué fundada por S. Saturnino.  Quien fuera el autor del dicho documento, no se ignora, asi como se sabe la invención de las actas de S. Prudencio, que el misino Ibauez imprimió en la historia del mismo santo.  Después que faltó el título de Calahorra se dividió el terr.  De su diócesis  En dos ob.  Porque pertenecía á dos diversos dominios: entonces se erigió en la ant.  Armentegui ó Armentegi, hoy Armentia (V.)  La silla ep.  De AlaVa.  Los autores están notablemente discordes respecto á la fecha exacta y precisa, en que tuvo lugar esta erección.  Oihenar afirma no haber noticia de ob.  De Armentia, que presidiese antes del siglo XI; por lo que pone en primer lugar á D. Munio, que gobernaba este ob.  En el año 1014.  Pero aunque es cierto que en tiempo de este prelado empezó á sonar en las memorias el título de Álava, desconocido en las (jue se escribieron culos siglos anteriores, debe creerse que este ob.  Se estableció mucho antes.  Se persuade esto fácilmente atendiendo al estado que tuviéronlas provinciade Álava y Vizcaya, en todo el siglo X. Libres de los moros, y ocupadas de un gran número de cristianos, mayor que antes de la venida de los bárbaros, de cuya persecución escaparon muchos retirándose á ellas; sccolige no haber impedimento; antes sí un motivo muy particular para tener ob.  Que gobernase aquellas iglesia  Ademas de esto, no hay vestigio por donde pueda venirse en conocimiento, que alguno de los ob.  Confinantes, es á saber, el de Valpuesta ó el de Nájera, tuviesen jurisd.  En*las dichas provincia, y solo consta, que el primero gobernaba desde su cap.  Hasta cerca de Miranda de Ebro; de lo que parece, tuvo principio la sede Alábense en el siglo X, cuando cesó el título de Calahorra, como sehadicho,y Be instituyó el ob.  De Nájera.

También, una escritura que existe en el archivo de S. Millan perteneciente al año 927, debe estimarse como prueba evidente de (jue la silla ep.  De Álava, se erigió, asi que la Rioja fué conquistada por los reyes de Navarra.  Confinaba esta diócesis  Por E. con la de Pamplona , por S. comprendía bástala Sonsierra de Navarra, y Rioja, confinando con el ob.  De Nájera; por O. se estendia hasta el r. Oroncillo, como baja desde Pancorvoá Miranda, donde entra en el Ebro, partiendo término  Con la diócesis  De Valpuesta; finalmente por el

N. era de este ob.  Toda la provincia  De Vizcaya; de manera que los límites de esta, y de Álava encerraban te do el distr.  Que tocaba á la sede establecida en Armentia.  Esta diócesis, muerto su ob.  Fortunio, sobre los años 1087 ó 1088, volvió á ser agregada al ob.  De Calahorra por el rey D. Alonso.  (V.  En el articulo Armentia el catálogo de los ob.  Que en ella residieron).

ÁLAVA.  INTENDENCIA: Desgracia ha sido, y por cierto no pequeña, después de tantas dificultades; después de tantos contratiempos con que hemos debido luchar para reunir los dalos necesarios , haber de principiar los art.  De intendencia por una provincia  Exenta, en cuya administración no han tenido parte alguna los empleados del Gobierno, y donde las imposiciones no han g r a v i t a d o con la debida propon – clon sobre la respectiva riqueza de cada uno de sus veciudad

Mucho hubiéramos deseado poder aprovechar en el primer art.  De esta clase, las noticias que sobre otras prov, hemos reunido , si bien nos consuela la esperanza que tenemos de que nuestros lectores, aun por los datos que presentamos , comprenderán fácilmente que no han sido pocos nuestros desvelos, ni escasos los resultados que hemos po dido obtener para presentar noticias nuevas , y deducir también nuevas observaciones.

SISTEMA DE HACIENDA.  Siu entrar ahora en el examen de las causas que motivaron la exención de tributos que ha gozado y todavía goza la provincia  De Álava, diremos : que su sistema de hacienda, que encomian los hab.  D e aquel pais, es sumamente sencillo, al paso (jue esíraordiuariamonte económico: Álava reconoce dos clases de contr., una directa , o!ra indirecta-: consistiendo la primera en una cantidad mensual que satisface cada uno de los veciudad  Conocidos con el nombre de pagadores, y la segunda, en una imposición sobro ol vino y licores del consumo do la j>rov.  , imposición que se designa con la denominación de Sisa.  La contr.  Directa ha consistido por mucho tiempo en la suma de 3 reales  Mensuales , cantidad que ha ido creciendo según asi lo han reclamado las necesidades del país ó los gastos estraordinarios que han ocurrido on

• \lava , por la parte que han tomado aquellos hab.  En las guerras contra Ronaparte, en la lucha do, 1820 al 23, y en la prolongada y sangrienta contienda que luvo término f o n el memorable convenio de Vorgara.  El núm.  Do pagado res que tiene la provincia  De Álava es de 9.800 á 10.000, y son las personas en quienes se reconoce alguna riqueza , y por consiguiente cap.  Imp.  ¡ ya porque tengan algún arriendo, ya porque posean algunas fincas, ya porque ejerzan alguna ind., ya porque se dediquen al comercio.  Todos los demás veciudad  No comprendidos en la (lase de pagadores, como los braceros, jornaleros, y domas que se apellidan proletarios, se contemplan como moradores, y se hallan por consiguiente exentos déla contr.  Directa que paga la provincia  La Si sa y la Sisita son los arbitrios provincia  Y municipales, y hasta cierto punto se observa el decreto do 20 do enero de 1834, puesto que es libro la venta do todos los art.  Do comer, beber y arder, siempre y cuando se paguen los derechos |)rov.  Y municipales: los géneros de consumo deben ser presentados so pena de comiso en las albóndigas dé los pueblos á satisfacer los derechos detallados, ya para la diputación, ya páralos ayuntamiento; estos para asegurar el abasto sacan á público remate todos los años el producto de los arbitrios ; pero cualquiera puede vender en los pueblos de 30 veciudad  Satisfaciendo los derechos indicados é indemnizando á prorata al arrendador.

Con los prod.  De los arbitrios en la parte destinada á las municipalidades, y con ol rendimiento de algunas fincas dejadas ppr hab.. de esto jiais que fueron á las Américas, se cubren los prosupuestos municijiales.

La contr.  Directa conocida con el nombre de mensual ó / o – gueramienlo, aunque ha tenido apologistas, es considerada por nosotros como injusta ó desproporcionada.  El pago de una cuota lija é igual en una provincia  Que cuenta 10,000 contribuyentes, no puede guardar la proporción (jue reclama la justicia, la moralidad y la conveniencia pública.  «Que osla muy subdividida la riqueza do la provincia  De Álava» dicen los que apoyan la contr.  Por fogueramlento; pero esta subdivisión no impide (jue sea muy distinta la condición social del rico propietario , del acaudalado capitalista y del grande comerciante que vive en Vitoria ú oirás población  De animación y de vida, de la condición al contribuyente apagador, que tiene un pequeño arriendo ó una reducida projiiedad on la ald.  Mas insignificante de esla laboriosa provincia  No se nos oculta que el escándalo de esta desigualdad ha producido en un pais tan justificado como Álava, que en algunas herm.

I para obtener la cantidad impuesta se ha hecho la correspondiente clasificación de veciudad  Pagadores, abandonando esa igualdad de cuotas que nunca reconoceremos como útil ni como equitativa, y que siempre calificaremos de jierjudicial y de odiosa.

VILLASANDINO

v. con ayuntamiento en la provincia, audiencia terr., c g. y diócesis de Burgos (6 leg.), partido judicial de Castrojeriz (1 4/2). SIT. en un llano, al O. de una cordillera de cuestas, que se comunican desde Castrojeriz á Villadiego; goza de buena ventilación y CLIMA templado y sano, y afecto solo á las estacionales.

Esta población que antiguamente se llamó Villasenda, trae la etimología de su nombre , de que estuvo dividida en 7 barrios, y por consiguiente habia otras tantas sendas para Ja comunicación. Consta de 350 CASAS , divididas hoy en 2 barrios llamados de la v. y Barriuso; en cada uno de los cuales hay una iglesia parr. (La Asunción y la Natividad), servidas por 5 beneficiados enteros y 5 medios en la primera de estas se conservan varias reliquias, donadas por D. Luis Gsorio, natural de esta v., y virey que fue de Milán , en el reinado de Felipe II, el cual las adquirió por donación que Ce ellas le hizo el rey D. Fernando de Alemania ; el citado ü. Luis y su esposa Doña Isabel Tedaldi, fueron sepultados en el presbiterio al lado del Evangelio , donde se conservan sus sepulcros de piedra en la otra iglesia de la Natividad , se ñauan también sepultados dos célebres guerreros llamados ios bandovales, q u e concurrieron con D. Pelayo á la batalla de Covadonga; se cree fueron ascendientes de los duques del Infantado; hay un hospital titulado de la Concepción con 4 camas y asistencia para enfermos pobres ; sus rentas consisten en 200 fan. de trigo, y un censo que paga la v. de Melgar ; escuela de instrucción primaria , y estramuros del barrio de la v., hay una casa fuerte con su torre ; en la circunferencia de este barrio, se ven algunos restos de una antigua muralla del tiempo de los árabes; en la parte NE. se conserva un arco de piedra , sobre el cual están las armas de Castilla en un escudo de piedra también. El término confina N. Grijalva; E. Olmillos, Saramon y Castrillo ; S. Villoveta y Villasilos , y O. Padilla de Abajo. El TERRENO es de mediana calidad ; le fertiliza el r. Odra ú Odrilla que lame los muros de la población; donde recibe las aguas de un arroyo; sobre aquel hay 3 puentes de piedra; uno de 40 arcos junto á la iglesia de la Asunción; otro en la confluencia de ambos con 4 arcos, y otro con 3 ; todos en dirección á los CAMINOS que conducen á los pueblos inmediatos, PROD.  cereales y legumbres ; cria ganado lanar, y caza menor. Se celebra un mercado los miércoles, cuyo permiso obtuvo en el año 4842; su tráfico consiste en granos, telas y paños, PORL.  262 veo,, 4,050 almas CAP. PROD. 3.709,500 reales IMP. 333,7 23.

CONTR. 29,866 reales, 46 mreales

VILLARROBLEDO

v. con ayuntamiento en la provincia y audiencia terr. de Albacete (41 leg.), partido judicial de La Roda (6), „ƒ g. de Valencia(36), diociudad de Toledo SIT. en llano con buena ventilacion y saludable CLIMA tiene 1,450 CASAS; la consisto rial; cárcel; un hospital con muy escasas rentas, consistentes en prod. de fincas rústicas; un pósito cuyos fondos no se ha podido averiguar á cuanto ascienden , fundándose esta ignorancia en que se dice hallarse repartidos entre los laoradores; varios pozos públicos, 2 charcas y algunos algibes particulares; 2 escuelas de instrucción primaria y una cátedra de latinidad, pagadas aquellas de los fondos municipales, y esta con las retribuciones de los discípulos; una igí. parr. (San Blas), magnifico y sólido edificio con una esÍ> aciosa y hermosa sacristía; otras 2 iglesia ausiliares de aqueta (Sta. Maria y San Sebastian); 3 conv. de monjas ocupados por religiosas, franciscas, carmelitas y bernardas; otro que fue de religiosos franciscos y se halla cerrado y amenazando ruina, aunque su iglesia esta abierta al culto; 2 ermitas (San Ildefonso y la Soledad), un hermoso edificio que servia para entrojar los frutos de las tercias reales confina el término con los de las Mesas, Provencio, San Clemente, Minaya, Muñera, Osa de Montiel, Rincón del Bonillo, Alcaráz , Tomelloso y Socuéllamos; dentro de él se encuentran varias quinterías llamadas casas de campo, con pozos y algibes hermosos, y las ermitas de Sta. Ana, San Antón y Ntra. Sra. de la Caridad; esta bastante espaciosa, situado en una plazeta con 2 calles de paseo arboladas el TERRENO atravesado por el arroyo Coreóles, de escaso caudal y curso interrumpido y por el riach. llamado Zancara, mas abundante y permanente, es bastante árido y de mediana calidad ; tiene monte de mata baja y 2 cortas porciones de encina y roble, de propiedad particular, PROD. cereales, legumbres, vino, azafrán, leñas de combustible y buenos Eastos, con los que se mantiene mucho ganado lanar y cario y las yuntas necesarias para la agricultura; hay caza de liebres, conejos y perdices, IND. la agrícola, alfarerías do tinajas, ladrillo, baldosa y teja, molinos harineros de viento y agua, telares de lienzo y ropas de lana’, una tenería y varios délos oficios y artes mecánicas mas indispensables, COMERCIO-, esportacion del sobrante de frutos y prod.

de la ind. é importación de los art. que faltan, POBL. 1,61-8 5,255 almas.

_HISTORIA. Féchase la fundación de este pueblo en el año 1292, como ald. de Alcaráz, edificada en un solar dist.

una leg. de su actual situado; pero á los 6 años ya se le trae á esta por medio de real decreto, dictado en razón délas continuas pendencias y desgracias que ocasionaba su proximidad á Socuéllamos, que también hubo de retirarse por su ?¡arte. Los primeros veciudad de Villarobledo que en esta ocasión ijaron sus domicilios fueron Pedro Lozano González, Diego Calero del Castillo, Diego Alarcon de Furres, Blas Domínguez, Juan Martínez de la Plaza y Andrés López Muñoz, de quienes se conservan aun varios descendientes. Atribuyese su erección en v. independiente al rey D. Juan II. En efaño 4 407 había sido tanto el aumento déla población que fue preciso crear 2 ayudas de parr. mas adelante buho de crearse aun otra. Modernamente no solo cedió este incremento, sino que se declaró en gran decadencia. En el año 4S37 emigraron 500 vec en razón de la escasez sufrida , sin que haya podido reponerse aun de tanto menoscabo. En el año 1836 ocurrió la célebre batalla á que dio nombre esta población, batiendo el general Alaix y el malogrado D. Diego León, conde de Belascoain, á las fuerzas carlistas espedicionarias de Gómez, engrosadas con las de Cabrera.

Ocupada esta población por las tropas carlistas en 19 de setiembre de 1836, al mando de Gómez, Cabrera, Quilez y el Serrador, fue sorprendida por una división del ejército de la reina que mandaba el general Alaix. El primero de aquellos gefes, que ocupaba con su división uno de los dos barrios en que divide al pueblo un barranco, confiado en que las tropas de la reina se hallaban á mas larga distancia, ó en que estas no le atacarian; solo tomó la precaución de establecer una corta avanzada algo dist. de la población; mas el segundo , situado en el otro barrio con el resto de las fuerzas carlistas, y mas desconfiado y precavido, envió un confidente á indagar la posición de las tropas de la reina , y una descubierta de caballería con uno de sus ayudantes. Á Ja media noche de aquel mismo dia . y á pocas horas de su salida, regresó el espía y la descubierta, con la noticia de v»n aC*UKi i s e n a l ‘ aban próximas y en movimiento hacia \ i larrobledo Gómez desechó este aviso, mas Cabrera acaudillo a los suyos, y sin tocar cajas, empezóse á prevenir á todo evento; pero por pronto que se ejecutaron sus órdenes, estaba jjróximo el amanecer del dia 20, cuando apenas dos compañías de aragoneses se hallaban armadas y formadas fuera del pueblo, ínterin las demás salían en confusión procurando unirse á ellas, como los ginetes que salían también desordenados. En tanto las tropas de la reina se aproximaban por momentos, y las avanzadas mandadas por el intrépido coronel de húsares D. Diego León, se tiroteaban con los primeros. Gómez en este momento mandaba tocar diana; mas ya no era tiempo de prevenirse al ataque ni de tomar disposiciones; pues interpuestas las tropas de la reina entre las dos mitades de las fuerzas carlistas, no podian estas comunicarse. Cabrera, Quilez y el Serrador, con parte de sus batallones, se batían á la primera luz del dia, contra toda la columna que los atacaba, ínterin la otra mitad carlista podia ganar el campo libre, saliendo del pueblo á la desbandada. Alaix procuraba entretener la brigada de de Cabrera, mientras atacaba á la de Gómez para impedir la reunión de ambas aquella contenia con horroroso fuego el ímpetu de las tropas de la reina, siendo imponente y terrible el aspecto que presentaba el llano de Villarrobledo el denodado coronel D. Diego León con 150 húsares de la Princesa, 60 caballos del L.° y 5.» de ligeros y algunos infantes, sufrió una brusca acometida de la caballería carlista; y retrocediendo calculadamente hasta que la hubo separado de la infantería que la apoyaba, cargó sobre ella con destreza y bizarría envolviendo á los ginetes carlistas, que aunque mas numerosos no pudieron resistirle tan fiera y arrojada carga, si bien sostenida con mucho valor por los contrarios, les puso al fin en consternación, huyendo á escape á incorporarse con las masas de su infantería, que reunidas ya y mandadas por Cabrera, se vieron desordenadas por sus propios ginetes ciegos de terror atropellaron la infantería, introduciendo en ella la confusión y el espanto; el valiente coronel de húsares, sin abandonar la carga, repasó también tras ellos las filas enemigas, colocándose á retaguardia, al tiempo que un oportuno movimiento, ejecutado á paso de ataque por las dos columnas de infantería mandadas por Alaix las estrechaban por el frente, de modo que fue completa la derrota, sin quedarles otro recurso que la dispersión; pues fueron muy cortas las masas que unidas pudieron retirarse con algún orden. Cayeron en poder de las tropas de la reina 1,274 prisioneros, entre ellos 55 oficiales y gefes superiores; 2,000 fusiles, municiones, acémilas, 44 muías y algunos artilleros que servían las piezas, que á duras penas pudieron retirar; una bandera y las cajas del tesoro de la espedicion de Gómez. Señalado laurel adquirieron en esta brillante jornada el general Alaix y el coronel Don Diego León. Este último gefe, tan bizarro cuanto desgraciado, debió á ella la bien adquirida fama que le acompañó hasta en la tumba el general D. Isidro Alaix fue condecorado con la gran cruz de San Fernando, y después lo ha sido con el título de vizconde de Villarobledo.

Es patria de Fr. Diego Morcillo Rubio Auñon, arz. y 2 veces vuey del Perú; del Dr. D. Alonso Ortiz, compositor del misal mozárabe; de D. Blas Ortiz, canónigo de Toledo ; del célebre teólogo D. Pedro Ortiz, etc