SANTO TOMÁS (HISTORIA DE MADRID)

(Supremo Tribunal de Guerra y Marina).

La incomodidad que sufrían los religiosos enfermos del conv. de Ntra. Sra. de Atocha, por e s t a r í a n d c ¿ – viado de la v. , inspiró al bachiller Sto. Domingo y á Doña Ana de Artiaga su m u g e r , la idea de proveer á su remedio, á cuyo efecto legaron algunos bienes á dicho conv.

bajo ciertas condiciones, ordenadas á este efecto. Muerto el primero, tuvo necesidad su muger de cumplir lo mandado, f en su consecuencia dio 400 ducados y unas casas j u n t o á a iglesia de San Salvador, para que en una de ellas se leyese una’ lección de teología y dijesen ciertos aniversarios. La orden aceptó cl legado, y como la casa de la difunta no era á propósito, compraron otra con su precio en la calle de Atocha, que sirvió de base al conv. de Sto. Tomás, que hoy vemos al núm. 4 de dicha calle, en donde pusieron un vicario, el procurador general de la provincia, un lector y otro r e ligioso.

En esta forma estuvo algunos a ñ o s , hasta que por eí de 1583 , á instancia de fray Diego de Chaves, confesor de Felipe II, se consiguió desmembrar la casa de Sto. Tomás de la de Atocha, haciéndola priorato y facultándola para que se pudiera servir del número competente de r e l i giosos.

Por el año 1611 se pasó á este colegio la hospedería del monast. de Atocha; y en nuestros tiempos, después de la esclaustracion de los r e g u l a r e s , se destinó el conv. á cuartel de Milicia Nacional, á cuyo fin fue reformada su fachada en 1843, bajo la dirección del acreditado arquitect o , nuestro particular amigo, Don Juan Pedro Ayegui, el cual puso en el centro la portada que estaba á un lado, j u n t o á la iglesia propia del mencionado conv., y dio á toda la fachada un aspecto análogo con su nuevo destino. Desarmados los nacionales en ermismo año , ocuparon el edificio el Tribunal Supremo de Guerra y Marina con su archivo , la j u n t a gubernativa del Monte Pió Militar; y posteriormente la Auditoria de Guerra , y el ministerio de la Guerra cort su archivo. Todas estas oficinas permanecen cn la actualidad, menos el ministerio de la Guerra que se ha trasladado á Buenavista , debiendo hacerlo pronto tambien su archivo.

Consta la referida portada de un cuerpo con dos columnas dóricas á cada lado y bajo el medio punto que arranca del cornisamento que aquellas sostienen, habia un bajo relieve que ha desaparecido , como las estatuas y medallas que adornaban los dos intercolumnios. Los fustes de dichas c o lumnas, sirvieron con basas y capiteles jónicos en el bellísimo ingreso de los Mostenses. Las v e n t a n a s de este edificio tienen jambas, y corona el todo una balaustra sobre la cornisa con un sotabanco detras de aquella, elevándose en el centro un templete elíptico, formado por seis columnas y cerrado por un cascaron. En el espresado templete se hallan colocadas las campanas del reloj, cuya muestra se ve en el medio del sotabanco. Hállase dentro de esle edificio un espacioso patio, cuyos cuatro lienzos están hechos de granito ó sea piedra berroqueña por el corruptor José Donoso , por lo que ya se deja conocer, queeste patio noes un modelo de buen gusto. La escalera principal es la misma que usaban los religiosos

SANTO TOMÁS (HISTORIA DE MADRID)

(calle de Atocha, número 4 tiene 3 puertas de entrada á la iglesia y 2 al conv.; y en la calle de la Concepción Gerónima otra p u e r t a , núm. 1 2 , que comunica tambien con la iglesia) Tuvo su origen el conv. de dominicos de Santo Tomás en el siglo XVI, por haber establecido r e ligiosos de Atocha una cátedra de teología en un edificio que al fin se convirtió en conv.; y habiendo aceptado su patronato el célebre conde-duque de Olivares , se dio principio á la construcción del templo actual, cuya primera piedra se colocó en 1635. Mucho duró la o b r a , pues en 1656 quedó habilitada como iglesia la nave sin el c r u c e r o , que t r a zó posteriormente Manuel Torija y construyó en parte Don José Churríguera, habiéndole cerrado sus hijos Don Gerónimo y Don Nicolás con una cúpula que se desplomó en 1726, apoco tiempo de haber sido terminada, y causó la muerte de 80 personas según Baena. Sensible es que todo el templo no se concluvese bajo el plan que empezó, pues atendida su estension, hubiera sido uno de los mas bellos de Madrid. La planta y los guardapolvos que decoran las puertas did atrio , manifiestan que el primer arquitecto que dirigió la fáb. de esta iglesia era muy superior á los constructores de la funesta cúpula y de las caprichosas portadas. Fue consagrada en 1735 por el obispo de Avila Don Frey Pedro de Avala, y su planta es una cruz latina de considerable estension. Decoran el alzado pilastras dc orden compuesto y en el crucero se levanta una cúpula con las pechinas pintadas al fresco. El retablo mayor fue diseñado según Ponz, por un lego de este conv., y es uno de los grandes maderajes dorados que se hicieron según la escuela churrigueresca tiene cuatro enormes columnas sobre un basamento de mármoles. Los retablos colaterales son parecidos al mayor; mucho oro y poca gracia. En las capillas, á juno y otro lado de la nave, hay objetos artísticos dignos de particular atención.

Entrando» por la puerta principal se halla á la izquierda la capilla de Ntra. Sra. del Rosario, cuya imagen hizo Don Luis Salvador y Carmona inmediato á la puerta de esta canilla se conserva en un altar el aprcciable grupo de escultura, con figuras casi del tamaño natural, que representa el Descendimiento de la Cruz, obra de Don Miguel Rubiales es igualmente notable en este sagrado recinto el bello monumento sepulcral del conde de Gausa. Consiste en un pedestal con una larga inscripción en el neto y sobre el cual sienta una elegante urna con el busto del conde encima , levantándose una pirámide por detras de todo el monumento, cuya materia es mármol de diferentes colores.

Ha desaparecido un escudo de armas de bronce que habia en el medio de la espresada urna. Se hallan pintadas al fresco las pechinas y cúpula de esta capilla, á la que siguen otras t r e s ; la primera dc un santo Cristo, en la que nada se encuentra digno de observación; en la de los Dolores no existe cl retablo de que habla Ponz, pues el que ahora hay es de gusto moderno. La imagen que en el mismo sc venera es tenida por una de las dos’que presentó Becerra á la reina Doña Isabel de Valéis, antes que esta señora aceptase la Virgen llamada de la Victoria que se halla en San Isidro. Ejecutó los dos cuadros que adornan esta capilla, Herrera el mozo; v los de la siguiente, dedicada á San José, que representan los Desposorios y el Tránsito de este Santo , un pintor veneciano llamado Francisco Leonardoni, del que habla Ponz.

Digno es de particular mención el cuadro de las Animas con Jesucristo y la Virgen, pintado por Lúeas Jordán, é igualmente el de Pereda en el altar de la capilla de Santo Domingo, cuyo patronato posee el marqués de Cerralbo. Hallanse las bóvedas de esta iglesia pintadas al fresco por Juan de Toledo, Montero de Boja’s y Francisco Camilo ; pero no lucen por estar muy ennegrecidas. Réstanos manifestar, Sue las tres portadas que construyeron los dos hijos de hurriguera, consisten principalmente en tres intercolumnios sin gusto alguno en su forma y ornato. Tiene esta ignara su servicio un rector y 18 sacerdotes. En el conv. señaba el Supremo tribunal de Guerra v Marina.