PALACIO DE BUENA VISTA (HISTORIA DE MADRID)

P a l a c i o d e « u e n a – v l s t a . Obra de los opulentos duques de Alba es el magnífico palacio que se levanta magestuosamente sobre una eminencia en lo último de la calle ue Alcalá cerca del Prado. Según el primitivo proyecto llama de tener este vasto edificio la entrada principal por la calle de la Emperatriz, mas tarde del duque de Alba, no existente en la actualidad, que estaba al N. entre el Bar- ^»¡H0 y las Salesas, sobre terreno que hoy corresponde á edificios situado en las calles del Saúco y del Almirante ; y en efecto llegó á construirse en dicha calle un ostentoso ingreso con verjas de hierro y la p a r t e de la casa cn que estaba la escalera principal, el magnífico oratorio y otras muchas piezas de las que ni aun las paredes maestras han Quedado. La célebre duquesa de Alba, doña María del Pilar teresa de Silva, que eclipsaba con su fausto á los primeros Personages de la corte de Carlos III y Carlos IV , rivalizando con la reina Maria Luisa, al decir de sus admiradores, ^ propuso hacer de este palacio una morada correspondente á su elevado rango é inmensa fortuna. Dirigía por l r j s anos de 4782 el arquitecto D. Pedro Arnal los trabajos j . 6 , 0 / 5 ^ 8 r a n fáb., en cuyos salones habia de colocarse la eihsima colección de pinturas de la casa de Alba, enriquecida con los estimables y numerosos cuadros de Yillnranca y Medina Sidonia , propios del esposo de la duquesa mericionada, el Sr. D. José Alvarez d e ‘ T o l e d o , poseedor e las dos indicadas grandezas. Al edificio que tan ricamente se trataba de adornar, habian de rodear jardines E°,r B?, S. y O., con varias fuentes, entre ellas una de pórmona C O n s Dos horrorosos incendios paralizaron estos planes, y des • truyeron gran parte de lo que estaba construido en dirección al N . ; de manera que la famosa duquesa murió á principios del siglo presente sin haber llegado á residir en el suntuoso palacio. No teniendo herederos forzosos aquella señora, dejó á varias personas sus cuantiosos bienes lib r e s , entre los que se contaba el referido palacio, que la villa de Madrid compró á los nuevos dueños y se le regaló á Godoy, en cuyo secuestro quedó comprendido. Forma al presente esta gran casa un rectángulo , con la fachada principal en la banda de S . , que ocupa una de las dos líneas mayores de aquel, y tiene 253 pies de frente con 64 1/2 de elevación. Esta fachada era la del j a r d i n , según el plan ant. y estaba á espaldas de la principal; consta de 4 ordenes de vanos, contando los de los sótanos, con 17 balcones en cada uno de los dos pisos superiores y tres menos en el entresuelo. Hállase-en el centro la portada con dos grandes hornacinas, y comprende en el cuerpo superior el cuarto principal y segundo, rematando el todo un frontispicio triangular que sienta sobre 4 pilastras istriadas de orden corintio. En esto solamente se diferencia esta fachada de las de E. y O. Atando con la base de dicho triángulo, sc estiende por uno y otro costado la cornisa.

Hay un zócalo de sillería en las tres fachadas mencionadas», sobre el que se levanta un cuerpo almohadillado de mampostería hasta la imposta que separa el entresuelo del piso principal, cuvos balcones se ven decorados con guarda-polvos v los del segundo con jambas. La fachuda de E . , que» ahora es menor que la de S., cuando Ponz publicó la segunda edición de su viage tenia la coulos siderable estension de 402 pies de linea horizontal, es d e c i r , unas dos terceras partes mas que al p r e s e n t e , lo que parecería difícil de creer si no lo asegurase el citado viagero, y no lo confirmasen los cimientos y muchos paredones de la planta b a j a , que aun subsisten y eran prolongación de los arranques, todavía existentes a los lados de la fachada del N . , cuyo centro decorado por 4 pilastras i s t r i a d a s , correspondía» á un suntuoso patio. El efecto que el conjunto produce no puede ser mejor, contribuyendo á ello su bella y magestuosa arquitectura, su ventajosa posición en t e r r e no muy elevado, la armonía de sus t r e s filas de balcones, y por último el que ningún edificio impide que se descubra desde fuera de Madrid Lástima es que no esté desmontado el espacio que media entre el palacio y la calle de Alcalá, en cuyo punto hay una portada moderna con tres ingresos, uno mayor en e f medio y dos menores á los lados con recuadros encima, y está labrada de sillería y agramilado. Entre ésta entrada y el palacio hay tres espaciosos caminos, ancho el del centro para carruages; mas estrechos, de asfalto, y recientemente construidos los laterales, que sirven para las personas. Al piso principal de este edificio da subida una escalera de piedra de un solo tiro que está decorada con 4 columnas dóricas de granito.

Muy exacto es cuanto dice Ponz sobre las deliciosas vist a s «que desde los balcones del referido palacio se gozan, pues á nuestro parecer no hay o t ro edificio en Madrid, incluso el Palacio Real, qué las ofrezca tan pintorescas y encantadoras el Retiro sobre todo presenta un aspecto singular En este edificio sc encuentra la dirección general de Ingenieros con su museo; la de artillería v caballería ; h a biéndose trasladado á mediados del mes de agosto ele 1847 el ministerio de la Guerra desde el conv. de Santo Tomás, que ocupó por algun tiempo después del incendio de la casa de los Ministerios, en donde antes residia.