IRURZUN

L. del valle de Araquil en la provincia y ciudad g. de Navarra , partido j u d . , audiencia terr. y d i ó c de Pamplona (3 leg.)

Tiene ayuntamiento de por sí, pero concurre también con el general del valle, SIT. en llano junto á la carretera de la cap. de la Erov. á Vitoria en la márg. izquierda del r. que desciende de Rasa urua y al S. dei famoso monte de la Trinidad, CLIMA frió y húmedo; le combaten los vientos N. y O., y se padecen algunas pulmonías crónicas y constipados. Tiene 25 CASAS, que forman i plaza y calleempedrada; casa consistorial con cárcel; los niños concurren á la escuela de Aizcorbe; hay iglesia parr. de entrada (San Martin), servida por 1 abad de provisión de los v e c , cementerio en parage ventilado é inmediato a l a iglesia y 1 ermita ; para los usos del pueblo se surten de las aguas del r- Larraun y de 1 fuente. El término que se estiende de N. á S. 3/4 de leg. y de E . á O. 1/2 confina N. Gulina; E. Aizcorbe; S. Izurdiaga, y O. Echeverri, y comprende en su circunferencia diferentes montes poblados de robles, hayas y arbustos, algunos arbolados en las márg. del r. y abundantes pastos para toda clase de ganados. El TERRENO es bastante fértil y de buena calidad, fertilizado por el r . Larraun, que entra en el valle por este término, y tiene 1 puente, CAMINOS el ya mencionado á Vitoria y otros locales en buen estado. El CORREO se recibe de Pamplona por el balijero del valle, PROD. trigo, maiz, habas, alubias, arbejas, alholvas, avena, patatas y otros menuceles, lino, manzanas, cerezas y esquisitas frutas; cria de ganado lanar, vacuno , cabrío , caballar y de cerda; caza de jabalíes, lobo¿, corzos, zorros, liebres, perdices y otros cuadrúpedos y volátiles ; pesca de t r u c h a s , barbos y anguilas, POBL. 25 v e c , 146 almas RIQUEZA con el valle.

A esta población con otras del valle de Araquil, concedió el rey D. Sancho el Fuerte en 1210 que le pagasen 1,000 sueldos, exhonerándoles de toda otra pecha, y de las labores fuera de los término de sus v . , y de ir al cast. de Aizita; pero no de t r a bajar en las heredades del r e y , dándoles el pan