en la provincia , audiencia terr. y ciudad g. de Canarias , partido judicial de Sta. Cruz de Tenerife , diócesis de San Cristóbal de la Laguna es la mas occidental del Archipiélago Canariense, y se halla situado á los 2 7 * . 3 9 ‘ , 50″ lat. N. ; 14’ 2 3 ‘ , 15″ long. O. del Meridiano de Madrid ; tomada esla medida desde la punta de Naos. Lo mas N. de la isla está á los 27″, 50′, 30″ lat. N . , y lo mas meridional á los 27*, 39’, 0″.
Su distancia de las otras islas y de la plaza de Cádiz, resulta del estado siguiente (Ver en el original)
Disfruta de un clima sano y apacible, siendo muy comunes en ella los ejemplos de longevidad. Tiene 7 leg. de largo, 5 de ancho y 16 de circunferencia ¡ la rodea una especie de muralla de lava que la hace sumamente áspera, montuosa y casi inaccesible á los viajeros. Se eleva con rapidez y desde las escabrosas costas que la rodean, haciendo todos sus puertos de difícil arribada . á la altura de 3 , 3 0 0 pies sobre el nivel del mar. Cuando se llega á la isla se ve desarrollar, eu un espacio de cerca de 4 leg. un cúmulo de rocas de aspecto imponente , cubiertas de laureles, inocaneras, pinos, brezos, hay a s , sabinas y aceviiios, que guarnecen los barrancos y cortaduras ; sin embargo, en diferentes puntos se encuentran pequeñas llanuras en forma de bancos, que dividen tos carros y presentan un suelo mas accesible al caminante , y muy á propósito para la agricultura. No impide la estructura horográticade la isla, la fertilidad del suelo, favorecida grandeméate por la industria de los herreños ; y si bien la naturaleza ha negado al suelo la3 corrientes de agua, agente tan poderoso de la vegetación , ha suplido por otros medios no menos convenientes á esta necesidad. Pocos ignorarán la Historia del Árbol Santo de la Isla de Hierro , que según las tradiciones que todavia se conservan, proveia abundantemente de agua á las necesidades de Jos habitantes. No nos detendremos en averiguar la verdad de este fenómeno, porque la física nos esplica el modo con que aquel árbol sin apelar á prodigios, podia dar a g u a , aunque no en tanta cantidad como quiere suponerse. D J S solos riach. brotan en las montasas, a s a b e r el de los Llanillos y el de Sabinosa; <d primero la proporciona potable, siempre clara y fresca; la del segundo sale caliente, exhala unedor sulfuroso, y tiene un sabor picante; es la fuente medicinal de los herreños, que la usan contra las obstrucciones, pero ninguno de estos 2 lios proporciona cantidad suticienie de agua , ni para el abasto de los habitantes, ni para abrevadero de las bestias y menos para et riego á estes necesidades acorren las mismas montañas, que cubiertas como hemos dicho de bosques de árboles, atraen sobre la isla gran masa de vapores que humedecen y fertilizan el suelo; para atender á las necesidades domésticas y á los ganados, tienen gran cuidado los habitantes de recoger las aguas pluviales en cisternas en el centro del valle de Tegirafe á 1 / 4 leg. de la v. de Valverde, se ven unos 4 0 depósitos de agua , abiertos en el mismo espesor de la Toba, cubiertos con bóvedas sostenidas de las pilastras; otros semejantes se encuentran en diferentes valles, y cada pueblo paga los guardias que custodian estos preciosos depósitos. En los contratos matrimoniales y en los legados testamentarios se prefiere una cisterna á la donación de un campo. En los L. apartados de los espresados depósitos, se proporcionan el agua potable colocando al pie de los árboles cubos de mocan, llamados en el pais guacimos, que tardan poco en llenarse con la humedad que en las hojas depositan el roció de la mañana y las nieblas. Lo escabroso de la costa no ha permitido á sus habitantes establecerse en el litoral, si bien la mayor parte de las aldeas ocupan las laderas marítimas, mas próximas á la ribera.
Los puntos mas notables de la costa son el puerto de Hier ro , la punta de la Caleta , puerto de Zamaducto, roca de las Gabiotas, punta de las Hamacas , punta y roca de Salmore, punta Grande , roca del Pozo , el Golfo , punta de la Dehesa , puerto de Urchilla, puerto de Naos, punta de la Restin g a , puerto del Mirado, las playas y punta de Ajone. Los caminos, como debe suponerse , son sendas abiertas en las salientes de la montaña y por consiguiente de tránsito difícil, aunque agradables por las hermosas perspectivas que presentan viniendo por el N. y arribando á la isla por el golfo de Ynama, después de cruzar las escabrosidades de esta estensa bahia situado á la banda setentrional, se llega al llano del mismo nombre; desde este se pasa á Jos llanos de Nisdafe , los mejor cultivados de toda la isJa; dos horas después se llega á la capital y único uyunt. de la i s l a , v. de Valverde , de la cual dependen, como barrios ó pagos, las poblaciones Barrio del Cabo, San Andrés, Tiñor, Albarrada, la Cuesta, la Ladera, t o s L l a n o s , lsora, las Rosas, Tajaste , San. Anión del Piñal, la Frontera , el Toyo, las Lapas, Mocanes , Guinea, las Montañeras , Érese , Guarasoca , San Pedro, Tenesedra, Tagnasiute, el Mocanal, Tesbabo, Casas del Monte Betanama, Tayb i q u e , las Casas , Sabinosa y Llanillos desde la v. de Valverde se baja al puerto del Hierro , situado en el lado de SE., y asi en menos de una jornada se recorre la isla en toda su largura ; otros dos caminos salen de la cap. y se dirigen hacia los cabos ó puntas de Salmoré y déla Dehesa, que son las que forman la cuenca del golfo Dinama, la primera por el N. y la segunda por el NO. arabos caminos cruzan por las crestas délas montañas, divisándose desde ellos los do3 lados opuestos de la isla por alli se ven cráteres estinguidos , barrancos cubiertos de una vegetación vigorosa , bancos de lavas y escorias, y conos de erección de épocas recientes. La punta de Salmoré que , como hemos dicho, se adelanta hacia el N ., domina todo el golfo, y forma la parte mas elevada del Time, cadena de rocas, cuyas prodigiosas cortaduras constituyen las primeras gradas de las montañas superiores la ermita de Ntra. Sra. de la Peña , próxima á la ald. de Guarasoca, ocupa la cima del Promontorio por el lado de la punta de la Dehesa no es menos escabroso el terreno; y también ocupa el punto culminante de la meseta otra ermita titulada de los Reyes, A pesar de lo reducido de la isla , y del poco terreno cultivable , los ingeniosos herreños, secundando con sus esfuerzos á la naturaleza , han conseguido á fuerza de trabajo y perseve • rancia, hacer innecesaria la importación de los productos de Jas otras islas , consiguiendo cosechas que esceden al consumo , y que les dejan sobrante para esportar á Sta. Cruz de Tenerife, y á los otros pueblos del Archipiélago ; sus produc tos en general consisten en 2 , 1 1 0 pipas de vino, 9 , 3 0 0 fan.
de cebada, 4 8 0 de t r i g o , 3 0 0 de centeno , 1 , 0 0 0 de maiz, 2 , 1 4 0 de legumbres, 5 , 0 0 0 costales de patatas, 1 8 0 quintales de Oreadla , 1 , 0 0 0 de higos secos y 5 4 1 docenas de manojos de lino sus productos animales se estiman en 2 , 1 4 1 ovejas , 8 5 0 cabras, 7 0 vacas , 1 6 0 cerdos , 3 0 0 quintales de lana , 6 5 0 de queso , 9 1 2 cuartillos de miel y 5 5 0 libras de cera en los anos abundantes se aumentan considerablemente estas producciones hay también caza de conejos y volatería, y ademas del queso de que se ha hablado, se fabrican tegidos de lana bastos llamados cordoncillos, costales, alforjas, mantas , cinchas y lienzos caseros. El comercio interior es casi nulo como debe suceder necesariamente en un país en que cada uno se basta á sí mismo. El esterior está reducido á la esportacion de sus frutos sobrantes.
Ya se ha dicho cuál es la estension de la isla y su configuración horográfica, y se ha manifestado que toda ella se reduce á una sola población subdividida en gran número de aldeas y pagos. El número de habitantes según la matrícula catastral de 1 8 4 2 es 1 , 1 5 2 v e c , que forman 4 , 5 8 0 almas, distribuidas en dos parroquias , situada una en la v. con la advocación de Ntra. Sra, de la Concepción, la cual es matriz, y se halla servida por dos curas párrocos de los que el uno lleva el titulo de vicario eclesiástico, 2 presbíteros , 2 sacristanes, 2 sochantres, 1 organista y 5 monaguillos. En el parage llamado del Golfo hay otra parroquia auxiliar con el título de la Encaruacon , servida por un cura párroco . un teniente, un sacristán , un sochantre , un organista y 2 monaguillos las ermitas de Santiago, San Juan Bautista, San Telmo , Sta. Catalina , San Lázaro , San Pedro, San Antón , la Purificación, San Andrés y Ntra. Sra. de los Beyes, completan los edificios religiosos. Si se esceptuan 5 ó 6 familias herederas de feudos ant., el terreno se halla dividido con bastante igualdad; cada propietario cultiva su campo y consigue los frutos necesarios para el mantenimiento de su familia de a q u i , el que no existan en la isla establecimientos de beneficencia, porque la ociosidad y la indigencia son alli desconocidas.
La instrucción pública está reducida á una escuela de niños y 2 de n i ñ a s , frecuentada la primera por 4 6 alumnos, y por 3 9 las segundas.
Los herreños son fuertes y sanos, ágiles y bien proporcionados, el color de su cara en general es mas blanco que el délos otros isleños son v i v o s , alegres, aficionados al canto y al baile, y muy inclinados al matrimonio. Viera les comparó con mucha oportunidad álos gallegos y asturianos; pasan muchos á las otras islas á prestar sus servicios domésticos, y siempre se les encuentra prontos, fieles y sumisos aunque algo interesados; sin embargo, son buscados con preferencia por su probidad ; ingeniosos por instinto, aprovechan los momentos de descanso para aprender á leer , escribir y contar; económicos mas que todo, vuelven á su pais con los ahorros que hicieron , y entran sin repugnancia en las sencillas costumbres y género de vida que antes tuvieron.
La circunstancia de ser la isla de Hierro la mas occidental de las Canarias, y aun del mundo, en aquella época conocido, influyó para que todos los antiguos cosmógrafos desde Ptholomeo fijasen en ella el primer meridiano; cierto e» que el descubrimiento de las Américas destruyó la causa mas principal de aquella elección de a q u i , el que varias naciones prefiriesen tomar como meridiano para la mediciou de sus Ion gitudes y latitudes, el punto de sus estados que creyeron mas conveniente; sin embargo, los mejores geógrafos se sirvieron para sus obras del meridiano de la isla de Hierro, y aun cn nuestros dias se busca con preferencia para fijar la long.
y lat. comparativa de algunos lugares.