MADRID

ant. intendencia compuesta de las c , v. y L. de que habla el a r t . anterior, pertenecientes en otra época á cinco divisiones administrativas, á saber provincia de su mismo n o m b r e , Avila, Guadalajara, Segovia y Toledo. Fácilmente se conoce que una p r o v . , para cuya formación han debido hacerse tantas agregaciones y segregaciones en la división t e r r . de 30 de noviembre de 4833, ha de presentar g r a v e s , gravísimas dificultades al examinar y apreciar datos de tiempos a n t . , ó mas bien dicho, datos anteriores á la organización administrativa que actualmente tiene el terr.

español. Pero por lo mismo que este trabajo ofrece un e s tudio detenido, espuesto, lo confesamos francamente, á errores de bastante consideración, creemos de nuestro deber principiar esta enojosa tarea. No una, sino muchas vec r , „ „ ‘ . J.-JI i .iJ t„ . i . t ;mhemos dicho que el dato estadístico mas imr>pmo-rtitnaint.tfei npaarra. il.a administración de un p a i s , es el dc p o b l . ; y siquiera – gamos el sentimiento de seguir observando que se n muy poco por adquirir con toda clasificación la tan n e ^ ‘ ria noticia del número dc los h a b . , nosotros, en e s t e1 en los demás art., insistiremos en ocuparnos con pretere del examen de la hemos POBLACIÓN. Cinco divisiones administrativas,, ne dicho, han contribuido á formarla provincia de Maarm, cual hov es conocida; y este hecho sencillo demuestra j hasta llegar al 30 de noviembre de 1833, es necesario, prilaian ? } » e í ; c ! l t a r I a P o b l – d e l a s ant. provincia de Avila, Guada- Pronr’ • ,, (*’ S e 8 o v i a Y Toledo; segundo, separar la parte que ,1 ° ( I u e c a d a u n a d c l a s c i n c o n a t r a i d ° a l a Ptov- mer t í?- D 0 S 0 C U P a – Dedúcese de aqui, que nuestro p r i vación ?J ° e s m a r c a r » c o n I a Posible esactitud, las agreflntien* » «»»»F» J C L i i u m c i u u c i ^ u t – i i u s y tssios que nuevas p r o v m c i a d e Madrid han pasado á formar otras u el art, anterior hemos presentado dos estados que demuestran los pueblos que de otras provincia han venido á formar la actual de Madrid, y los que de la ant. de este nombre han pasado á otras. Réstanos pues , ocuparnos solo en conocer, por el número de h a b . , la proporción de estas agregaciones y segregaciones. Un examen detenido de datos antiguos v modernos buscando lapoblación varia de los pueblos y ele las divisiones administrativas, (porque es muy difícil hallarla igual aun cuando se tengan documentos de una misma época, de un mismo año, de un mismo dia), nos ha hecho conocer L.°, que la ant. provincia de Madrid ha conservado para la nueva ó sea la del real decreto de 30 de noviembre de 1833, el 94’33por 100 del número t o t a l d e sus hab,; 2 . ° , que h an sido agregados de ]a de Guadalajara el 8’93 por 100 ; de la de Toledo» el 5’82; de la de Segovia el 1,38, y de la de Ávila elO’22 por 100. Ya adoptando este resultado, al que como hemos dicho, ha precedido un estudio escrupuloso, comparando población de distintas épocas y admitiendo por fin un termino medio, podemos con mas facilidad principiar el examen de los datos que poseemos. Los pueblos que hoy forman la provincia de Madrid, tenían en la época á que se refieren las noticias dc que vamos á ocuparnos , noticias oficiales u n a s , particulares otras , el número de hab.

que aparece del siguiente estado (Ver en el original)

Primera población. Este dato se refiere al censo dicho del siglo XVI publicado en el año 1829 de real orden. El señor I ) . Tomas González, Maestrescuelas de la cated. de Plascncia, fue comisionado por el r ey en el año de 181*5 para reconocer y coordinar el archivo de Simancas, ácuyo establecimiento asistió hasta el año 1828 este respetable eclesiástico. Entre otros trabajos, y en ‘i irtud de autorización que al efecto recibiera por real orden de 30 de setiembre de 1817, preparó la publicación del censo ó plantas de población de las provincia y partido

de la corona de Castilla, tomadas de los libros de las Rentas v Derechos Reales, desde el primero hasta el último tercio de! siglo XVL. No satisfecho el señor González con su obra, procuró completar, con varios apéndices , la población de la Península en el último siglo, haciendo ademas important e s comparaciones de los vecindarios de España e n t r e el r e sultado que ofrecía su trabajo y los publicados en 1787 v 4 8 0 3 , aquel por la secretaria de E s t a a o , fcste por el Departamento del Fomento General del Reino y balanza mercantil.

En esle censo , que hemos examinado siempre con m u cho gusto, reconociendo el celo y la inteligencia de su autor, figuran las provincia que han contribuido á formar la actual de Madrid, con los v e c . pecheros y hab. que marca el s i – guíente trabajo. (Ver en el original)

Este resultado no nos satisface., porque , examinado d e tenidamente el estado comparativo que el señor D. Tomás González presenta al fin de su o b r a , se v e , que figuran, como precisamente debían de figurar, separadamente otros territorios que en el orden administrativo aparecían y d e bían aparecer en alguna de las cinco provincia de que ahora nos ocupamos. Por eso en los a r t . de Ciudad-Real (pág. 440 tomo 6.°) ; en el de Cuenca (pág. 243 tomo 7.°); y en el de Guadalajara (pág. 612 tomo 8.»), hemos abandonado este t r a b a j o , agotadas entonces nuestras fuerzas, y convencidos de que no e ra posible ofrecer á nuestros lectores una noticia exacta. Hoy escribiendo en el r e t i ro del campo (Zarauz provincia de Guipúzcoa), que se presta á estos estudios mas que el bullicio y la agitación de las grandes poblaciones , y tratándose del a r t . de Madrid, que será sin duda mas leido, v con razón tambien mas c e n s u r a d o , creemos conveniente hacer algunas observaciones, y admitir , después de ellas, el número de hab. que á las 3 divisiones administrativas señala el señor González. Nótase desde luego, que el resultado que ofrece el trabajo del señor Maestrescuelas de Plasencia, se aproxima bastante á la v e r d a d , si se le compara con el número de individuos señalado á otras p r o v . , y 600 el que definitivamente se fija para toda España. Sí aun de este modo algun error resultase, nuestros l e c t o r e s , nuestros ilustrados lectores podrán conocer la proporción de aumento que á la población pudiera corresponder, por la agregación que debiera hacerse á ant. provincia administrativas de t e r r i t o r i o s , que figuran separadamente en el trabajo del siglo XVL. & Provincia de Madrid. Comprendia la villa y tierra de su nombre, el condado de Punon-Rostro (*); el sesmo de Casarrubios; la Alcarria ó partido de Zorita y tierra de Maqueda , figurando con 31,932 vecinos pecheros y 139,660 h a b . , hallándose la relación de estos de 1 á 5. Para dar á nuestros lectores una idea de la confusión que aparece en los datos que hubo de presentar el señor González , diremos desde luego, que la villa de Madrid figura en el estado con 7,300 veciudad pecheros, al paso que en una nota se leen las notables palabras siguientes «en el año de 1530 tenia Madrid 748 veciudad p e c h e r o s , siendo 12,399 los de toda la provincia» Cotejando estos números,aparece desde luego, que Madrid figura en el estado con el 23’48 por 100 de la p r o v . , al paso que en la nota representa únicamente el 6 0 3 por 100, con una diferencia notabilísima. Entre los apéndices que acompañan á la obra del señor González, hay u n o , cuyo encabezamiento dice asi ¡ « Planta de la población de» la villa de Madrid en el año 1597, formada por las matriculas oritjinales del cumplimiento pascual en dicho año», Y es~ tractando este t r a b a j o , se obtiene el resultado que sigue (Ver en el original)

Después de esla relación, hallada entre los espedientes de la secretaria de Hacienda, hay una nota en que se j c c n / a \ 5^ labras siguientes «Computando pues cada familia ele a» – »drid á razón de 5 personas por familia, resulta, que en «espresado año de 1597 habia en dicha villa 57,28a ainn..«año 1 646 ascendió su población á 74,435 vecinos, inclu- »sos 1,134 clérigos, y habia ademas por cima de 20,000 p e r – »sonas fuera de matricula. Toda la provincia de Madrid s u – »bia en dicho año de 164G á 88,000 vecinos. Calculando que «Madrid tuviese en el año 1330 s ó b r e l o s 748 vecinos p e – »cheros hasta 1,000 vecinos de todos estados , su población «seria entonces de 5,000 almas, y 110 años después 302,175, »de suerte que se aumentó en poco mas de un siglo en 387,173 almas.

(Continua en el original)