VALENCIA

ciudad con a y u n t . , cap. de la p r o v . , p a r t . judicial, d i ó c , audiencia t e r r . , c g., departamento de artillería y ant. reino de su nombre; residencia de todas las corporaciones y oficinas provincia y de distrito; sede metropolitana con los tribunales ecl. competentes; distrito universitario para la incorporación de los estudios, hechos en los diferentes e s tablecimientos que comprende; tercio naval dependiente del departamento de Cartag e n a , provincia marítima, distrito y puerto de mar con los gefes de marina y matrícula que le está asignada; plaza de comercio de primera clase con su j u n t a y t r i b u n a l , y t o das las demás dependencias como cap. de primer orden.

S I T U A C I Ó N Y C L I M A . En las playas del Mediterráneo, sedescubre una vasta llanura, cuyos límites orientales constituye la línea, que en forma de cuerda corre 10 leg. desde Cutiera á Murviedro empieza en estos 2 puntos un grande arco, formado por una serie de altos cerros que le cierran en forma de anfiteatro los del N. son los del valle de J e sús, que se unen con los de la Calderona y Loma de Rétera; siguen luego los de Villamarchante, Cheste y Chiva hacia O., los cuales cierran el llano de Cuarte, y últimamente corren hacia Turis, Montroig y Niñerola ; dejando entre este arco y el m a r , cuanto riega el Turict. En Cutiera se eleva el monte del mismo nombre , al cual siguen los de Cervera ; van de E. á O. pasando por delante de Alcira hasta Játiva y constituyen los límiles S. de la ribera que baña el caudaloso Júcar. En este precioso r e c i n t o , poblado de árboles, casas de campo y lugares, dispuestos en ordenada y vistosa confusión, que parecen mas bien una ciudad de muchas l e g . , casi á igual díst. de Cullera y Murviedro, á 1/2 leg. del mar y á la máre. der. del» furia, vemos levantarse esta c , rodeada de jardines y de flores, ostentando sus gallardas torres en medio de un celage siempre claro y trasparente su posición geográfica es á los 35° 27′ 15″ lat.; 3 o 48′ Wg. E. del meridiano de Madrid, siendo el major dia de 14 horas y 48 minutos, y tos. El clima es de los mas templados de España-, son raros los grandes cambios atmosféricos; lo mismo las nieves y c a lores escesivos su temperatura media es de 14° Reaumur pocas veces baja á cero este termómetro, y es un feuómeno el verlo por bajo de este grado Lo mas común en los inviernos regulares es estar sobre 3 o , asi como en los v e ranos no suele pasar de 28.° marcando casi siempre de 24 á 26. El viento que por su frecuencia podría llamarse c o mún , es el de E . , el cual es húmedo y fresco el O., que reina por intervalos, durando unos 3 días, es cálido y seco; el N . , no t an frecuente, es frío y seco también, y el S., que es el mas r a ro de todos, es húmedo, cálido y el menos sano, porque pasando por aguas detenidas y por los campos donde se cultiva el arroz, suele incomodar con los miasmas pantanosos que a r r a s t r a . No hay enfermedad que se pueda llamar propia de esta ciudad ni mucho menos endémica lo único que podrá decirse en razón de la proximidad al m i r , al viento tan frecuente de Levante, á las numerosas acequias que circuyen, penetran y se ramifican bajo el suelo de la c , es que su atmósfera es húmeda, y que da margen á las supresiones de transpiración y á los afectos catarrales de aqui los reumas, los c a t a r r o s , las inflamaciones generales y parciales, las t i s i s , las leucorreas e t c .  también se p a decen irritaciones de vientre, perturbaciones en la digest i ó n , y diarreas; pero esto tal vez dependa, mas que del clima, de las aguas selenitosas de los pozos, cuya abundancia de sulfato de c a l , se manifiesta con la mayor facilidad.

Por complemento de estas noticias,añadiremos las observaciones que pub’ícó la sociedad económica en 1812.

«Durante el presente año ha granizado 7 veces, siempre «con viento NO., pero en cortísimas cantidades. Ha habido »i7 tronadas las 33 con viento S E . , y las restantes con «SO. y NO. 23 de ellas han arrojado aguaceros, la mayor «parte de poca consideración; pues solo en uno de ellos su- «bió el pluviómetro á 2 pulgadas y una línea 7 de ellas han «despedido algún granizo, del llamado vulgarmente mata- »cabra; y las restantes se han disipado en signos de elec- «tricídad y turbonadas de viento. Se han visto repetidas ve- »ces halones lunares, pero una sola vez se han presentado «con viveza los colores del iris. El día 2 de octubre á las 10 «horas, SO minutos de la noche, empezó á formarse un pa- «raselene sobre el Mongó; pero saltando repentinamente «la brisa de tierra , disipó el cirro-cúmulo sobre el cual se «reflejaba la imagen de la luna, é impidió el metéoro. Han «caido en diferentes ocasiones bólidas y exhalaciones inflj- «madas de la región elevada de la admósfera; y particularamenté á las 7 horas de la tarde del día 27 de octubre, en «que por espacio de 2 minutos aparecía desprenderse de la luna, una lluvia considerable de ellas que iban al parecer »á sepultarse en el mar. Últimamente, se han presentado «en repetidas ocasiones arcos-iris solares y lunares de c o – «lores brillantísimos, algunos do ellos dobles y aun triples; «aunque el interior raras veces se ha visto bien terminado.

O B S E R V A C I O N E S .

1. «De los 56 dias lluviosos, 33 han sido indicados por «el barómetro con un descenso bastante notable; en los «restantes la columna de azogue permanecía estacionaría.

«Igualmente de las 17 tempestades de \ i e n t o que se han «conocido en este a ñ o , 14 habían sido indicadas algunas «horas antes por este precioso instrumento de las 3 r e s alantes , una fue momentánea, y las otras dos no presenta- «ron indicio alguno precursor.

2 . a De la 12a columna resulta que la temperatura media «del invierno fue de I 1 U , 4 centígrados-, la de la primavera «de 17», 8 la del verano de 2 4 u , 9 ; y finalmente la del otoño «de 19°, 6. Según esto, Valencia se halla próxima al límite «meridional de la tercer zona, isothermal, en la linea «que pasa por Ñapóles, Cabo Matapan, Acre, Bender- «Abassi, etciudad etciudad 3 . a «Ochenta y cuatro observaciones termométricas «ejecutadas en 7 pozos diferentes del barrio de Pescadores «han dado 2.° 3 centígrados por ta máxima diferencia entre «la temperatura de sus aguas en invierno y verano. La pro- «fundídad media de estos pozos es de 18 pies De aquí p u e – «de deducirse con bastante fundamento, que la profundi- «dad de la capa invariable en Valencia es de 76 pies con «poco mas ó menos.

4.* «La declinación de la aguja imantada era en diciem- «bre de 1840 de 20″ 33′ NO; promedio de 12 determinacio- «nes diferentes por otros tantos azimutes de sol y estrella.

«Dicha declinación en noviembre pasado, e i a d e 2 0 » 3 1′ «NO; promedio de 18 azimutes y 6 pasos por el vertical «primario.

«La inclinación no se pudo determinar por falta de i n s – «trumentos á proposito sin embargo, por un método apro- «ximativo se fijó entre 64° y 72° y el autor de estas observa- «ciones índica, que el paso de la tierra por la gran faja de «cosmolitos, que se supone giran al rededor del sol, cor- «tando nuestra órbita por los puntos próximos al 12 y 13 de «noviembre , parece haberse retardado este a ñ o ; pues a p e – «nas llegaron á 15 los cosmolitos observados en dichas dos «noches; al paso que en las de los dias 18 y 19 se observa- «ron centenares de ellos, moviéndose la mayor parte en d i – «reccíon poco difereute del E. al O.

Esta altura del barómetro es el promedio de 620 observaciones hechas á las 9 horas de la mañana y á las 4 horas de la tarde. La temperatura media 18°,425 es promedio de 730 observaciones homologas, y solo difiere 0’2 de otro promedio de 220 observaciones hechas á las 8 horas, 30 minutos de la mañana.

Advertiremos ademas, que ambos instrumentos estaban colocados en una sala, cuya elevación sobre el nivel del mar se ha calculado de 232 pies de Burgos, y cuya esposicion es al S. El pluviómetro estaba en una azotea 18 pies mas elevada, y lo mismo el atmidómetro.

MURALLAS , PUERTAS , FORTIFICACIÓN (*) el asiento que tenia esta ciudad desde su fundación , comprendía solamente el ámbito que se contiene en el altizano que se forma desde la calle del Milagro, hasta la plaza de la Constitución, y desde las Platerías por la subida del Toledano de este modo, d e bió correr la muralla desde los baños del Almirante á la calle del Barón de P e t r é s , por la plaza del cementerio de San Esteban, calle del Almodin, abrazando la casa de la c , á la calle del Reloj Viejo , portal del Toledano, cruzando la calle de Zaragoza á la de Cabuleros y á la del Milagro a terminar en los mismos baños. Los árabes en el reinado de Yuzuf, ensancharon este pequeño recinto, tomando desde el Temple, de donde continuaban los muros por el lado de la iglesia

de San Jaime de Veles hacia las puertas de la Trinidad y de Serranos , en d o n d e , torciendo por el t e r r e n o que añora ocupan las casas de la manzana 162, delante de la de las rocas, cerraba por el O. la calle de Roteros, y siguiendo por la acera der. de la calle de Sta. Eulalia , hasta la de Santa Cruz , entraba por las caballerizas del mesón del Ángel y Horno quemado, cruzando la calle del Sagrario y la manzana fronteriza al horno ; seguía al portal de Valldigna , calle de Salinas, y declinando un poco al O. por d e t r a s de las casas que sacan puerta á la calle de Caballeros, salía por la última de la manzana 381, señalada con el número 58; cortaba la calle de Caballeros y cruzaba las casas de éntrente hasta llegar á la columna de piedra , que sostiene la galería de la casa número 2 viejo , en la plaza del Esparto , en que volviendo un poco al E., seguía por dentro de la misma casa á la plaza del Horno de San Nicolás; se introducía por Jas casas de los señores León, saliendo por la calle de las Danzas, hacia la de Cajeros y Cordellats, por el jardin de la Lonja de la seda , hasta poco mas allá de la esquina de la Lonja del a c e i t e ; cruzaba la calle Nueva y la del Trench y se dirigía en línea recta por la de Cerrageros, á la mitad de la cual se inclinaba un poco á la der , para venir á salir á un lado del mesón llamado Hondo, en la calle de San Vicent e cruzaba esta calle y entrándose por el horno de la Pelot a , scguia por dentro «de la casas de la mano der. de la plaza de este nombre y calle de Corredores; cruzaba la de Barcelonina y se dirigía á la plazuela de San Vicente ó Chamorra de allí por tas espaldas del estinguido colegio de San Joiüe se encaminaba á la calle deis Transíts, cruzando esta por la mitad, atravesaba por donde es ahora el palco escénico del actual teatro , salia á la calle de las Ranas , y s i guiendo por las del Cementerio de San Andrés y Bordellet deis Negres á espaldas del colegio de Sto. Tomás (La P r e sentación) , continuaba por dentro de la Universidad, cortaba por la calle de la Nave y casas de la acera izquierda de la plata de las Comedias hasta llegar á la de la Congregación; Entraba y atravesaba á lo largo la actual iglesia parr. de Santo Tomás, y por dentro del huerto del hospital de Pobres s a cerdotes hasta salir junto al horno del Vidrio, do.de inclinándose la á der., corría por todo el actual cas. y palacio del Temple, donde se unía al punto de donde hemos partido.

No constan las puertas que tuviese el primer recinto; rero del que acabamos de r e s e ñ a r , parece que habia 8 en »s puntos y con las denominaciones siguientes Alibufat- Muley; unas 70 varas al E. del actual arco, que llaman portal del Cid, y fue cerrada en 4597 cuando se abrió la del Real Khena-Sarachi; puerta del Sol ó de Levante , donde ahora está la de la Trinidad- Sagunto; casi en el mismo p a – rage donde se hallan las torres de Serranos Bebelaix; que se llama ahora portal de Valldigna Alcantarak; en el m i s mo sitio donde está la columna que hemos citado, en la plaza del Espejo Tudela; en donde ahora se llama la puerta nueva junto al Mercado Boatella ; calle de San Vicente, junto al horno de la Pelota Xarea ; plaza de la Congregación, en el mismo sitio en que hoy está la puerta de la iglesia; pero su frente miraba á la calle de la Congregación, de modo, que los estribos del a r c o , uno estaba deutro de lo que hoy es iglesia y otro en la plaza. Esta muralla y puertas eran las existentes al tiempo de la conquista , y permanecieron en el mismo estado hasta el año 4356 en que el rey D. P e dro IV de Aragón llamado el Ceremonioso, hizo construir la muralla actual, dando á la ciudad gran ensanche por los lados E., S. y O., sobre un plano de figura elíptica , cuyo diámet ro mayor tiene 3,298 varas , y el menor 4,654. Esta muralla, perfectamente conservada, está coronada de almenas en toda su línea (V. el a r t . de la ciudad g . ) ; precedida de un foso, con fuertes torreones en algunos lienzos y otros mas sólidos á la inmediación de las puertas. Tiene también 8 entradas; las 4 se denominan propiamente puertas , y las otras 4 portillos las primeras son la de San Vicente , salida para Madrid, reedificada en 4835, con un arco principal y 2 laterales , sobre los cuales hay grandes targetones con inscripciones dedicadas á S. M. la reina Daña Isabel II y á su e s – celsa Madre la del Mar, que conduce al puerto; fue reedificado el arco de la der. en 4764, y el de ta izquierda en 1842 la de Serranos, salida para Aragón y Cataluña; quedó concluida con sus magníficas t o r r e s , que la flanquean en ambos costados en 4381 la campana que se ve encima del arco de la puerta á la parte interior, perteneció á la iglesia de San Antonio de la calle de Murviedro y fue colocada donde está, para tocar á somaten en las embestidas del r ey D. Pedro de Castilla en 1363 durante la obra de las tórresela de Luarte, que conduce á Madrid por las Cabrillas, abierta en 1444 , y tiene también 2 altísimas torres, que suelen ser el depósito de prisioneros , y en las de Serranos se halla la cárcel principal.

Las clasificada» como portillos son-, la del Beal, construida y hermoseada con 3 puertas, el año 1801 conduce á la alameda ó paseo y á los jardines del real patrimonio la de la Trinidad, reedificada en 1792 la de San José ó nueva, abierta en 1419, y construidas sus t o r r e s en 1514, y la de Buzafa en 1786. Todas las torres que hemos indicado son la principal fortificación de la ciudad , por su elevación y solidez, y forma su complemento la Ciudadela, situado al E. ent re las puertas del Real y del Mar. Este fuerte era antiguamente una gran casa ó depósito de armas , que se fortificó en el vireinato del marqués de Mondejar en 1574 , con motivo de estar amenazadas estas costas , de una invasión de turcos y polacos, que se habian conferedado en 1707 pasó á la propiedad del Estado y tomó el nombre de Ciudadela entonces se fabricó el torreón que mira á la plaza de Santo Domingo, demolido en parte en 184L.

INTERIOR DE LA POBLACIÓN. Hasta mediados del siglo XVI presentaba Valencia un hacinamiento confuso de casas de mal aspecto, y casi todas de un solo piso alto, de puertas bajas y e s t r e c h a s , y de pequeñas ventanas de mal gusto, que apretadas en tortuosos y húmedos callejones, formaban como una especie de alfombra, vieja y agugereada, al pie de los sólidos y espaciosos edificios que habitaban los monges, y de los palacios del Estado; era ya entonces costumbre adornar las calles con r e t a b l o s , en que se colocaban pinturas de mas ó menos mérito, que representaban varios santos declarados tutelares de las mismas calles, y de aqui las fiestas que todavia se celebran en ellas; se contaban mas de 700 de estos altares, que alumbrados por mezquinos faroles, daban un aspecto mas misterioso y triste á la c , el cual venían á completar los cementerios de cada una de las p a r r . , encerrados dentro de las murallas y en los centros de la cap. A fines de aquel siglo, y sobre todo á principios del XVII, comenzó á renovarse el c a s . , pero con pocos adelantos en el ornato público, hasta que en el último tercio del XVIII se emprendieron las mejoras, que de suyo reclamaba una ciudad susceptible de ellas. Durante el reinado de Carlos III desaparecieron una multitud de c a s u -chas situado junto á la puerta del Mar, y en su lugar se levantó el magnífico edificio de la aduana; entonces se construyeron también la hermosa casa enseñanza y la no menos notable de las Escuelas Pias; El mariscal Suchet hizo derribar en los años 4812, 13 y 1 4 , abonando aquel gobierno su imp o r t e , otra porción de casas viejísimas, que ceñian por la parte de-la ciudad la citada aduana, y se formó la estensa plaza que lleva el nombre de este edificio; el capitán general don Francisco Javier Elio hizo plantar el banito paseo de la Glor i e t a e n 1817; pero cuando mas progresos se han hecho y continúan sin interrupción, es desde 1836 en adelante, en que puede decirse, que la c está renovándose en todas sus localidades; mucho le falta todavía para merecer un lugar distinguido en su parte material, como una de las principales de la Península. Las calles, cuya enumeración es casi imposible por las frecuentes revueltas y encrucijadas, son estrechas y tortuosas, como sucede en todas las población ant., y es tal su disposición, que impide la entrada de los rayos del sol, ó hace sumamente fugaz su permanencia en muchas de ellas. Pero dedicadas las autoridades locales con celo y desinterés á mejorar el estado de su c a p . , se está verificando el ensanche y alineación en todas aquellas en que la construcción de nuevas obras ofrece ocasión para esta importante mejora; muchas se ven ya hermoseadas notablemente , y otras construidas de nuevo en su totalidad; entre estas debemos citar las tituladas del Rey D. Jaime, del Moro Zeit y de la Conquista, abiertas en el terreno que ocupaba el vasto conv. de la Puridad; obra importante, que ha dado á aquel barrio gran animación. Las plazas no son mucho mas desahogadas; algunas son tan reducidas, que en otras ciudad no pasarían de el título de una estrecha callejuela, y ninguna ofrece notabilidad de ningún género. Citaremos, sin embargo, como principales la de la Constitución , la de San Francisco, la de Sto. Domingo, la de la Aduana y la del Mercado; en la primera se hallan las casas de la ciudad y del Vestuario; pero situado en esquina, presentan sus fachadas firincipales á otras calles; en otro lado aparece el ábside de a cated. con su puerta de les Apóstoles, y el principal frente lo ocupa la capilla de Ntra. Sra. de los Desamparados, que presenta una fachada sencilla, de poca elevación y escasos adornos; esta plaza era en otros tiempos el sitio destinado r m a la ejecución de las sentencias de muerte pronunciadas contra los nobles; allí estaba la picota. La de San Francisco era á principios de este siglo el huerto del conv.; hoy es un gran espacio triangular con una calle de árboles en su* 3 lados; cajones para la venta de ropas hechas, zapatos y j u g u e t e s , y en el centro una farola alumbrada por gas, sobre una gruesa columna de piedra de mal gusto; la de Sto. Domingo es prolongada de forma irregular; en ella está el palacio del conde de Cervellon, donde se han hospedado los reyes D. Fernando VII y Doña Isabel II; en él se propuso al primero el restablecimiento de la inquisición ; se firmaron los famosos decretos de 4 de mayo de 1814, y abdicó la reina Doña Maria Cristina en 1840 la regencia de España; junto á este palacio se eleva el de Rioflorído, hoy del marqués de Montortal, donde se hospedó D. Rafael del Riego y arengó al pueblo desde los balcones; frente de estos se ostenta el conv. de Sto. Domingo, cuya bonita fachada es mas propia del palacio de un magnate que de una casa monástica; con razón ha sido elegido para la ciudad g. La plaza de la Aduana trazada, según hemos dicho, por el mariscal Suchet, es la mas regular y la mas grande de la c , formando uno de sus lados el palacio que le da nombre, y en los demás las casas de los señores Beltran de Lis, D. Javier Paulino, y otras de sumo gusto y arquitectura moderna.

Concluida que sea la fachada que mira al E . , será la localidad de mejor aspecto de la población; su figura es un cuadrilongo perfecto, adornado con 8 hileras de árboles que forman calle á los 4 frentes. La plaza del Mercado es un dilatado espacio prolongado, sumamente irregular y sin alineación; es el sitio destinado para la venta diaria de comestibles y efectos de consumo, presentándose en prodigiosa abundancia toda clase de a r t . , le cual ofrece una animación estraordinaria; los puestos de vender se colocan sobre las anchas aceras, debajo de toldos sujetos á pilares de hierro fundido, que el ayuntamiento ha empezado á colocar como arbitrio para la casa de Beneficencia; los centros de la plaza, empedrados de adoquines, que forman las direcciones de las calles ad- •ÍCIA. 371 yacentes, quedan páralos transeúntes. Esta plaza fue desde muy ant. el punto destinado á los torneos, justas, fiestas de toros y otras diversiones públicas; era también el de las ejecuciones, y en ella habia una fuente, que se surtía de una noria existente en la calle de la Acenia; y se encuentran el edificio de la Lonja y la parr. de los Stos. Juanes. En uno de los costados se halla también el mercarlo nuevo, construido en 1838 en el solar del conv. de las Magdalenas consiste este edificio en 2 galerias laterales sostenidas sobre 40 columnas cada una, y cerradas en su cabecera por otra galería que presenta 8 columnas de frente; estas galerias de 5 pasos de anchas, sirven de pórtico á 34 casitas á cada lado, con otras tantas tiendas á su frente, é igual número en la parte posterior; en la fachada de cabecera se está construyendo la casa del repeso, y corona toda la obra un antepecho y balaustrada de buen efecto; en el espacio que queda entre las 2 galerias hay otras 2 series iguales de puestos fijos, defendidos por un largo cobertizo de madera pintada de verde, quedando por supuesto entre las 4 líneas de vendedores el espacio necesario para el tránsito de las personas; el piso está elevado 2 gradas sobre el de la plaza, todo embaldosado y perfectamente limpio. Es notable la abundancia de surtido de carnes de todas clases, legumbres, pan y frutas que allí se reúne

(Continua en el original)

VALENCIA

partido judicial de término en la p r o v . , audiencia t e r r ., diócesis y ciudad g. de Valencia se compone de la ciudad cap. con sus 5 arrabales y p a r t . , 2 v . , 42 l . , una baronía y un c a s . , que forman 47 ayuntamiento Las distancias de los pueblos entre sí y de estos á la cap. de provincia, aud., diócesis y e . g.; asi como los datos de población, riqueza, contribución y otros pormenores estadísticos, se demuestran en los estados que ponemos al final de este artículo.

S I T . a l E . d e la provincia, sobre la costa del Mediterráneo, son aplicables á su reducido ámbito cuantas indicaciones hacemos sobre el clima y enfermedades, pues sus circunstancias topográficas son las mismas, y los hab. son en su mayor parte artesanos ó labradores que se dedican al cultivo de hortalizas, cáñamos, trigo y moreras •. confina al N. con el partido judicial de Moneada; E. el mar Mediterráneo; S. el partido de Sueca, y O. el de T o r r e n t e , estendiéndose 4 |leg.

de N. á S. y 2 de E. á O. en toda su estension; pero este t e r r . que realmente compone el partido se halla dividido para la adm. de justicia en 4 juzgados de primera instancia, en esta forma Juzgado del cuartel del Mercado ; comprende el centro de la cap. hacia las 2 terceras partes mas próximas al O.; esto es, una circunferencia, que circuyen los otros 3 c u a r t e l e s , hallándose el del Mar al E. y S . ; el de Serranos á N. y E . , y el de San Vicente á S. á O y le corresponde ademas el pueblo de Ruzafa con su término municipal, cuyo t e r r . r u r a l , quese denomiua cuartel de Ruzafa, y e s de figura irregular , y su estension por el S. alcanza á mas de 3 leg., comprendiendo el gran lago de la Albufera y su frontera, y de lat. tiene mas de una l e g .  en sus 4/5 partes es tierra de h u e r t a , y la restante de arrozal, hallándose en este ámbito una población dispersa de 2,000 v e c , que viven la mayor parte en las barracas y alq. Juzgado del cuartel del Mar comprende los 7 barrios intramuros de la ciudad que forman este c u a r t e l , el 8.° estramuros, los partido de Santo Tomás y San Esteban, pertenecientes al término municipal de Valencia y los pueblos de Alboraya , Benimaclet, Pueblo nuevo del Mar, y Villanueva del Grao, cuyos pueblos, con los part estramuros tienen también la denominación rural del cuartel de Benimaclet este juzgado se estiende una leg de N. á S . , 1/2 de E. á O. y confina al N. con el de Moneada ; E. el Mediterráneo ; S. y O. el cuartel de Mercado, Juzgado del cuartel de Serranos comprende los 5 barrios intramuros , los 3 estramuros, y el partido de la Calle de Murviedro, término municipal de Valencia, con los pueblos de Almásera, Beniferri, Burjasot, Campanar , Orriols y Tabernesblanques que también tienen el nombre rural de cuartel de Campanar su estension es de una lea. de N. á S . , 4/2 de E. á O. y tiene, al N. el juzgado de Moneada ; E. el del Mar; S. el del Mercado, y O. el de San Vicente. Juzgado del cuartel de San Vicente compréndelos 6 barrios intramuros, os. 2 e s t r a m u r o s , los p a r t . de la calle de Cuarte y de S an V’cente estramuros, pertenecientes al término municipal de Valencia, con los pueblos de Benatuser, Mislata, Patraix, Paiporta y Vistabella. La denominación r u r a l , es la de cuartel de Patraix y su estension de N. á S. 4/2 leg. y de E . á O. una , confinando al N. con Moneada; E . el juzgado del Mar; S. este mismo y el del Mercado, y O. el de Torrente por esta pequeña reseña, se advertirá, que cada uno de los 4 j uzgados, comprende 2 c u a r t e l e s , uno intramuros y otro r u ral , con sus denominaciones especiales , y que los segundos forman parte del t e r r . de la huerta, comarca deliciosa que rodea aquella gran c . , y de la cual hemos presentado en su lugar la descripción conveniente-, por esto comprenderán muy bien nuestros lectores, que debemos abstenernos en e s te art. de hablar de producciones, rios, montes y calidad del terreno, porque siendo lo mas importante cuanto á la huerta hace relación, ni pueden ni deben hacerse subdivisiones , que destrozarían el pensamiento que nos proponemos.

E S T A D Í S T I C A C R I M I N A L . LOS acusados en este partido judicial

en el año de 4843, fueron 330 , de los que resultaron absuelt o s d e l a intancia 9 , libremente 8, penados presentes 300, contumaces 43, reiucidentes en el mismo delito 4 , en otro diferente 2, con el intervalo de 4 meses á 2 años; de los p r o cesados 446 contaban de 40 á 20 años , 467 de 20 á 40 y 47 de 40 en a d e l a n t e ; 30o eran hombres y 25 mujeres ; solteros 190 y 4 40 casados; sabían solo leer 4 4 , leer y escribir 40 y 276 carecían de instrucción ; 4 4 ejercían ciencias ó artes liberales y 349 artes mecánicas.

En el mismo periodo se cometieron 424 delitos de homicidio y heridas con 40 armas de fuego de uso l í c i t o , 40 de d i t o , 37 armas blancas permitidas, 36 prohibidas , 24 instrumentos contundentes y 4 instrumentos ó medios no espresados.

VALENCIA (HUERTA DE)

delicioso y fértil t e r r . del ant. reino, y actual provincia de su nombre SIT. en la mediania y hacia el estremo oriental de la misma; comprende una estension de terreno de mas de 3 leg. de á 8,000 varas, de N. á S. desde Puzol, del partido deMurviedro, hasta Catarr o j a , del de Torrente, y 1/4 de E. á O. desde Villamarc h a n t e , pueblo del partido judicial de Liria, hasta el mar Medit e r r á n e o , que ciñe el terF. por el E . ; al N. y O. corre una serie de altos cerros ó montes, con algunas interrupciones, terminados hacia el Oriente, por lomas que forman los Una.

occidentales los montes del valle de Jesús, que son los mas setentrionales, se unen con los de la Calderona y lomas de Bétera; siguen luego los de Villamarchante, Cheste y Chiva hacia el O . , que cierran el llano de Cuarte , y por iln corren hacia T u r i s , Montroy y Niñerola , dejando entre este arco y el mar cuanto riega el Turia. Todos estos cerros son por lo general calizos, y sus raices se esconden en la tierra á 40 y mas pies de profundidad, encontrándose en su interior vestigios y estampas de animales que vivieron en las aguas la playa sin la menor roca es de finas arenas, cuyo espesor, difícil de calcularse, se prolonga hacia los montes, cubierto de greda, sobre la que carga la tierra, cuya capa aumenta de fondo, según se aparta del mar, y es de naturaleza margásea, por lo común arcillosa, bien que en muchas partes arenisca, no solo en las cercanías de aquel sino también en la de algunos montes; inmediato al mar, y aun hasta 1/2 hora dist. de él, se observan varios manantiales, tanto mas copiosos cuanto mas apartados se hallan del cauce del r . , los cuales humedecen el suelo y lo convierten en partes, en pantanos y marjales, cuyas aguas salen al mar por los azarbes que se han abierto todo este terreno es llano, esceptuando algunas pequeñas colinas, donde se asientan el Puig, Burjasot, Moneada, Castillo de P a t e r n a , Torrente y Cuarte. El benigno CLIMA que se disfruta en este recinto , su atmósfera tan risueña, aun en la mas cruda estación del invierno; la continua animación de los campos siempre poblados de industriosos labradores; la verdura de los sembrados y de los árboles; la abundancia y variedad de las p r o d . ; todo, todo ha contribuido á hacerle uno de los mejores t e r r . , no solo de España sino aun de Europa; habiéndose conquistado un renombre que despierta la curiosidad y el interés del viajero. Sin embargo, por la reseña física del suelo, que antes hemos h e c h o , se comprenderá que es de suyo poco feraz; pero lo que la naturaleza le ha negado han sabido adquirirlo aquellos infatigables labradores, con la asiduidad é inteligencia del t r a bajo, que se conserva todavía de generación en generación, como un precioso legado de los árabes, sus antecesores, ha fertilidad de este suelo privilegiado alimenta á la inmensa población que ocupa los 62 pueblos, alq., barracas y arrabales que cercan la c a p . , en número de 72,209 almas, sin contar los que habitan intramuros de e s t a , que situado casi en el cent ro de este hermoso vergel, parece hallarse defendida por innumerables baluartes, pues tales parecen los campanarios que la circundan por todas partes. Todos aquellos pueblos pertenecen á los partido judicial de Murviedro, Moneada, Valencia y Torrente, asombrando en verdad que en tan corta estehsion de terreno pueda mantenerse una población sobradamente crecida, y que cada día va consiguiendo un aumento progresivo y demasiado notable. Lo mas admirable en la huerta de Valencia es la economía, distribución, orden y gobierno de su ant. sistema de riego, por medio d e s ú s 8 grandes acequias, cuya construcción data desde época muy remota. El rey D. Jaime I de Aragón halló ya concluidas en 1238 las grandes obras de esta hermosa canalización, que deben sin duda atribuirse al gobierno de los árabes Abderrahman Anisir Ledinala, y Alhakem Almostansir Bilah, su hijo, por los años 911 al 976. El rey aragonés hizo donación á los hab. de Valencia de todas las acequias de la h u e r t a , reservándose la de Moneada , qu e denominó Real; mas en 1268 la vendió también á los propietarios de las tierras de sus riberas por la cantidad de 5.000 sueldos valencianos. Para gobierno de la acequia de Moneada existe una junta que se compone de 12 síndicos, á saber; de los 10 pueblos primeros, su regidor decano y 2 por turno de los demás. Esta acequia en los años de e s casez , debe socorrer á las de Mestalla, Bascaña, Favara y Godella, con la mitad ó cuarta parte de sus aguas, según fueren las necesidades, conforme á lo dispuesto por el rey D. Jaime II en mayo de 1321; tiene dicha acequia su acequiero particular, nombrado por los 12 síndicos, y se gobierna con independencia de las demás. La citada junta conoce privativamente de todos los a s u n t o s , relativos á r i e g o , que ocurren en los 23 pueblos de su t e r r . Cuando hay alguna dificultad en la división en grande de las aguas, conoce de ella la autoridad civil de la provincia El gobierno de las otras 7 acequias, que son las de Tormos, Mestalla, Bascaña, Cuart, Míslata, Favara y Rovella, si bien corresponde al a y u n t . , tienen cada una un síndico nombrado por el común de regantes, y reunidos componen el tribunal , llamado de las Aguas, que se junta los jueves de cada semana en la plaza de la Constitución ó de la Seo; por un privilegio, cuyo origen es desconocido, tiene su asiento en la puerta de Ja Catedral, donde comparecen los interesados á producir sus quejas sobre las a g u a s , sin que medien letrados ni escribanos, y el fallo de este tribunal se lleva, sin apelación, á puro y debido efecto. El síndico de cuya acequiase ha producido la queja, no tiene voto en aquel fallo. En tiempo de escasez, las 7 acequias disfrutan el privilegio del agua de las v. de Pedralva, Villamarchante, Benaguacil y Ribarroja, por 4 días con sus noches, ó bien repartidas según sorteo, con arreglo a l o dispuesto por el citado rey D. Jaime II en 8 de junio de 1320. La de Moneada debe dar dos días con sus noches la mitad ó cuarta parte de sus aguas , por la almenara tandera á las de Mestalla, Favara, Rascaña y Bovella, en los lunes y martes de cada semana, mientrasdura la escasez y necesidad, la cual es reconocida por el acequiero, quien debe dispensar el tandeo; y cuando no lo hiciere, los interesados en el riego de las 4 acequias , recurren al baile general para que falle sobre la queja, sin que medien escritos ni formas judiciales. La acequia de Bovella tiene por principal obj e t o la limpieza y salubridad de la cap. Discurre por la parte mas alta de e l l a , y soltando el agúalos sábados por cuatro puntos distintos y durante 24 horas, arrastra las inmundicias de los valladares mayores, donde desaguan las acequias madres é inferiores s u b t e r r á n e a s ; da impulso también á las lab. de lana, seda, curtidos y azulejos; á 3 molinos h a r i n e r o s , y riega los huertos y j a r d i n e s ; sale después de la c . , y va á fertilizar la contigua huerta de Ruzafa, que es su objeto secundario. Por estas dos atenciones imp o r t a n t e s , nunca le puede faltar una muela de agua, por grande que sea la escasez de la del r . ; disfrutando igualmente del privilegio de la mitad ó cuarta parte de la de Moneada. Para esto concedió á la ciudad el rey D. Jaime I, en 12ot y 1269, la propiedad de las fortificaciones, fosos, torces y valladares, acequias, puentes y caminos, con el cargo de repararlos y conservarlos.

Las 8 acequias principales que riegan la Huerta de Valencia, reciben del Turia 138 filas (*) de agua , y benefician 21,069 cahizadas, 2 hanegadas y 3 cuartones de tierra (**).

Toman sucesivamente las aguas por otras tantas presas, y dividiéndose después en infinitas acequias ó canales mas angostos, facilitan el riego cada 15 d i a s , y cada 8 ó 9 en ciertas épocas del verano. El agua que debe traer el Turia para acudir á todas las necesidades de la huerta , en la distancia de 24 l e g . , es de 471 filas y 8 plumas; cuando por razón de la sequía, disminuye este volumen, hay escasez y penuria.

como se observa algunos años, en que salva las cosechas la grande industria y mayor economía establecida en el riego; si se aumenta pasa el agua sobrante al mar por el cauce formado al efecto al N. de la c a p . , y junto á sus murallas , donde existen 5 puentes magníficos, de sólida y escelente construcción, de 600 pies de long. y 40 de lat. cada uno. Un malecón de cantería con andenes y pretil de sillares cuadrados, desde Místala hasta Monte-Oli vete en la dist. de cerca de una leg., defiende á la ciudad de los estragos que pudieran causar lasgrandes avenidas; y otro malecón igual desde Campanar hasta San Juan de la Ribera, poneá cubierto los arrabales , huertas, alquerías y barracas donde viven infinitos labriegos. Siendo la población agricultura de 72,209 almas, y 3 2/5 las leg. cuadradas que riegan las 8 acequias, resulta que v i ven en cada leg. 21,364 individuos, número verdaderamente asombroso, si se compara con los puntos mas poblados que existen en la Península asi es que no toca mas t i e r ra en e s ta huerta á cada individuo que 1 3/4 hanegada, ó sean 1,772 varas cuadradas valencianas, ó 2,079 1/2 de Castilla ; y á cada familia de 5 personas, una cahizada, 3 hanegadas y 3 cuartones. Entre este considerable número de cultivadores hay muy pocos propietarios ; son por lo general colonos ó arrendadores; pero toda la población se. halla en continua acción y movimiento; todos tienen ocupación desde el niño hasta el anciano, sin que falte esta al otro sexo , que contribuye con sus brazos á la trabajosa cosecha de la s e d a , á las faenas domésticas, y á la venta de los frutos que también está á su cargo. Los abonos ó estiércoles son muy buscados, pues sin ellos no podria conseguirse t an rápida rotación de cosechas, que se suceden u n a s á o t r a s , y en muchos campos, antes de llegar el fruto á su madurez, ya está sembrado ó plantado el que debe reemplazarle , pues la tierra en esta vega jamas descansa, no faltando el agua. Las prod. de e s ta huerta son granos, frutas y hortalizas de todas especies; legumbres, maiz , algarrobas, seda, alfalfa y vino, todo en abundancia estraordinaria, como es de presumir de tan activo y esmerado cultivo y regadío. En los estados números 1, 2 y 3 que insertamos á continuación, se demuestra el número de c a h i zadas que cada acequia riega; dist. de sus azudes á la cap.; filas de agua que recibe cada una; pueblos que participan del riego, y numero de molinos y artefactos que impulsan estas aguas.

(Continua en el original)

VALENCIA (PROVINCIA DE)

una de las t r e s en que se halla dividido el ant. reino de su nombre ; en lo civil y administrativo es de primera clase; en lo judicial depende de la audiencia t e r r . estaolecida en la c a p . ; en lo militar corresponde á la ciudad g. del mismo nombre, constituyendo también una de las tres com. g. que componen este d i s t r . ; en lo marítimo I)ertecece al departamento de Cartagena; y por último, en o eclesiástico á las diócesis de Valencia, Orihuela y Segorbe.

SITUACIÓN Y CLIMA. Se encuentra en la costa del Mediterráneo entre los 40° 9′ 30″; 38° 5 2 ‘ 30″ l a t . , y los 2o 19′ 35″ y 3» 33’ 20″ long. E. del meridiano de Madrid. Si se hubiese de describir por separado la diferente temperatura de los pueblos que forman esta p r o v . , seria necesario dividirlos en varias secciones, puesto que es tal su variedad, según los puntos donde se hallan, que influye sobremanera hasta para que sus moradores difieran mucho unos de otros en hábitos, temperamento, enfermedades y género de vida.

En efecto, unos viven en cierta opulencia, mientras otros son en estremo infelices; unos arrastran una existencia débil y muy achacosa , en tanto que otros disfrutan de una robustez verdaderamente estraordinaria. Esta diversidad consiste sin duda no solo en que unas población están combatidas por los vientos del N. y otras por los del S., sino también en que se hallan colocadas, bien en llanuras, bien en sitios montuosos, á lo que se agregan otras causas que no pueden menos de influir naturalmente en la salubridad pública. Los pueblos que están situados hacia el O. de la cap. gozan de un clima no tan benigno; en ellos el frió y el calor se hacen sentir con alguna violencia; no son tan raras las nieves y hielos, pero son menos húmedos que Valencia y mucho mas sanos. Los que se acercan al E. de la provincia

son muy templados y mas húmedos, debiéndose en gran parte esta humedad que en ellos reina á las lagunas y á los arrozales que se cultivan en las inmediaciones del Mediterráneo y en los campos de la ribera del Júcar. En estas insalubres tierras, las enfermedades surgen con mas abundancia que en el resto de la p r o v . , y las calenturas intermitentes y los rebeldes males que suelen ser su consecuenc i a , apenas dejan disfrutar de salud á los hab. de esta comarca, precipitándolos prematuramente en el sepulcro. En suma, ei clima de la provincia de que nos ocupamos es suave y templado en los países meridionales, siendo duro y bastante frió en la parte s e t . , y sobre todo en el llano de las Barracas, donde se observan las estremas temperaturas. En toda ella se respira por lo regular un aire p u r o ; las posiciones del t e r r . varían á cada paso, constituyendo unas sitios en que se crian delicadísimas frutas, y formando otras deliciosos jardines, que embalsaman la atmósfera con la fragancia de sus muchas plantas aromáticas, haciendo esperímentar por consiguiente sensaciones en estremo agradables. Diariamente, entre 9 y 10 d é l a mañana, se levantan los vientos del mar, los cuales templan el calor hasta las 4 de la tarde en los puntos en que casi no se conocen los rigores del invierno, y los hielos suelen s e r , según hemos dicho, un fenómeno estraordinario.

TÉRMINO Y CONFINES. Como ya hemos manifestado en otros artículos de esta especie , el territorio español ha sufrido diversas divisiones desde fines del último siglo. La primera, pues, que presentamos á la consideración de nuestros lectores, es la división de la Península en provincia é intendencias, mandada formar por los años de 1789, siendo ministro el ilustrado conde de Floridablanca, y según la cual la provincia

ó antiguo reino de Valencia , se componía do los partidos y poblaciones que se espresan en el siguiente estado (Ver en el original)

En la división de España en departamentos decretada en en el mes de abril de 4 8 0 9 , se designó á Valencia como c a pital del departamento del Guadalavtar bajo , siendo sus confines por el N. los departamentos del Guadalaviar alto y del Ebro; por el E. el Mediterráneo; por el S. el departamento del cabo de la Nao, y por el O. el del Júcar alto.

En 17 de abril de 1810, tuvo lugar otra división del t e r r i torio español en prefecturas por decreto del intruso rey Don José Bonaparte; y en su consecuencia se declaró á Valencia como cap. de la de su nombre , sujetando á ella las subprefecturas de la misma c , Segorbe y Castellón d é l a Plana con una superficie de 330 leg. cuadradas, de 20 al grado, y conservando los mismos lím. que tenia en la anterior división por departamentos, que eran los siguientes. Por el S. confinaba con la prefectura do Alicante, limitándola el r. Júcar desde el punto donde se une con el Cabriel, hasta su d e s embocadura en el mar por el O. con la prefectura de Cuenca, de la cual se hallaba separada por una línea que partía desde el r. Guadalaviar, media leg. mas al S. de Sta Cruz; se dirigía hacia el S . , pasaba al E. de Talayuelas , de Aliaguilla, de Fuenterrobres y de Villalgordo, que pertenecían á la prefectura de Cuenca; seguía por el O. de la Yesa , Ares, Sinarcas, Utiel y Caudete /correspondientes á la prefectura de Valencia ; y encontrando el r. Cabriel cerca y al O. del mismo Caudete, continuaba su dirección basta su confluencia con el Júcar por el NO. confinaba con la prefectura de Teruel. formando sus límites una línea que partía de un punto que se halla un poco mas al S. de Vistabella , entre este lugar y los de Villahermosa y Lucena; pasaba al N. de Víllahermosa , de Cortes de Arenoso y de San Agustín , e n t re las Alcotas y el Toro, e n t r e Avejuela y la Yesa; marchaba hacía el O . , y siguiendo por entre las Aras de Alpuente y el Collado, terminaba en el Guadalaviar, media leg. mas al S. de Sta. Cruz ; por el N. con la prefectura de Tarragona , y la linea que las separaba partía del mismo punto que la anterior, un poco al S. de Vistabella , entre este lugar, y los de Villahermosa y Lucena; y dirigiéndose hacía el E., pasaba al S. de Alcalá de Chisbert, yendo á t e r m i n a r e n las orillas del mar en la t o r r e y cabo del Cuervo , e n t r e Oropesa y Peñiscola finalmente , el Mediterráneo le servia de l í mite por la parte del E. Vuelta á dividir la España en provincia por decreto de 30 de enero de 1822, se le dieron á la de Valencia por confines al NE. la provincia de Castellón de la Plana; al NO. la de Teruel ; al O. la de Cueuca; al S. la de J á t i v a , y al E. el mar Mediterráneo. El lím. O. empezaba en el r. Gabriel un poco al O. de Cofrentes; seguía al N. á buscar la sierra de Mart é s , desde cuyo parage se dirigía como al NO. á pasar por las cabeceras del r. Magro y por el O. de Caudete y Aliaguilla, comprendiendo la vega de Requena; continuaba fuego hacia el N. en dirección á la sierra de N e g r e t e , y cortando el r. Guadalaviar, concluía por debajo de Santa Cruz. En este sitio principiaba el lím. NO. por la orilla izquierda

del r. Arcos; pasaba por la sierra de Jabalambre; iba hacía el SE. á la sierra de Sabinas; atravesaba por entre Alcotas Avejuela, y tomando la sierra continuaba por el N. de oro, O. de Barracas, y E- de San Agustín, terminando un poco hacia el N. El lím. NE. empezaba en este punto, y marchando por la cordillera que divide las aguas al r. Palancia y al Millares, pasaba por el N. de Villanueva de la Reina entre Higueras y Gaibiel, por el pico de Espadan; se dirigía hacia e¡ SE.; continuaba por el O. de Hain, E. de Chova, O. de Alfondeguilla y Cuart, y por el N. de Benifair ó , Faura, Sta. Coloma y Canet, concluyendo en el mar en la torre y cabo Canet. El lím. E. era el mar Mediterráneo desde dicho cabo Canet hasta la orilla izquierda del Júcar en Cullera.

El lím. S . , por último, lo formaba toda la orilla izquierda

del mismo r . , incluyendo á Alcira hasta el monte Caballón confluencia de aquel con el Gabriel, continuando por este asta el punto donde empezó el lím. O. A consecuencia de la reacción del año de 1823, quedó abolido todo lo hecho durante el sistema constitucional, volviendo por lo t a n t o el ant. reino de Valencia á constituir una sola provincia; asi continuó, hasta que por la última división terr. de la Península, decretada en 30 de noviembre de 1833, que es la que hoy rige con muy ligeras escepc i o n e s , s e formaron de aquel las tres provincia existentes de Valencia, Alicante y Castellón de la Plana. Según esta división, confina la de Valencia por el N. con las de Castellón de la Plana y Teruel; por el E. con el mar Mediterráneo; por el S. con las de Alicante y Albacete, y por el O. con esta última y la de Cuenca. Él lím. N. empieza poco mas arriba del mojón de Castilla, Aragón y Valencia, y sigue el mismo que tiene actualmente con la provincia de Aragón hasta la sierra del Toro, desde cuyo punto hasta el mar es el que va se ha descrito para la nueva provincia de Castellón. El hm.

E. lo forma la costa desde este punto hasta 1 /2 leg. mas al S. de la t o r r e de Valldigna. El lím. S. principia en este último sitio, y se dirige por el S. de Tabernas á la sierra de las Agujas, por cuya línea divisoria de aguas sigue por el N. de Beniganim a c o r t a r el r . Albayda entre Baños y Guadasequies, continuando al monte del Tosal por el N. de San Pedro y Ollería; después va por la divisoria de aguas á los r. Albayda y Cañóles ó Mantesa hasta la ant. línea de Valencia con Murcia en el puerto de Almansa, pasando al N. de Fuente de la Higuera. El lím. O. continúa también desde aqui por la ant. línea divisoria de Valencia con Murcia hasta poco mas arriba del mojón de Castilla, Aragón y Valencia, dejando el t e r r . de Ademuz á esta p r o v . , que se le habia segregado en las divisiones anteriores.

Posteriormente, como ya hemos indicado, se han hecho algunas alteraciones en la provincia de Valencia , pues por real orden de 1836 se le agregaron los partido judicial de Albayd a , Gandía y Onteniente, que pertenecían á la de Alicante se han variado las capitalidades de algunos p a r t . , como el de Catarroja que pasó á Torrente , y el de Ayora á Jarafuel, si bien este último volvió otra vez á Ayora y finalmente, por otra real orden de 21 de noviembre de 1847, se han segregado de la provincia de Alicante el partido judicial de Pego, los pueblos de Oliva, P o t r i e s , Fuente-Encarroz, Villalonga y Rafelcofer, incorporándolos á la de Valencia , partido. de Gandía , del cual se desmembraron los de Terrateíg, Montichelv o , Benícolet, Ludiente y P i n e t , que han pasado al partido

de Albayda.

La provincia de Valencia, tal como hoy existe , cuenta sobre 289 leg. cuadradas de superficie. Se compone de 3 c , 82 v., 190 L., 17 baronías y varias pequeñas ald. ó cas.; estando t o das estas población distribuidas en 281 ayuntamiento y 18 partido judicial, los cuales, asi como las dist. que median de unos á o t r o s , á las provincia confinantes y á la Corte, aparecen en la escala que insertamos al final del párrafo de CAMINOS.

COSTA. La v. de Oliva, situado á 3 1/4 millas de la orilla del mar, es el primer pueblo de la provincia de Valencia en la costa por el lado que confina con la de Alicante, comenzando cerca de la embocadura del riach. Bullent ó Calapatar. Al N.. 20- O. de Oliva 4 2/3 millas, está la ciudad de Gandía, en la orilla izquierda del r. Alcoy, y apartada de la ribera del mar 2 1/4 millas-, frente de esta c , desde 16 brazas para tierra, son piedras sin mas abrigo en toda esta costa que para los vientos de tierra. En la medianía de estas dos p o b l . , á la orilla del mar , hav una torre de vigía llamada de Miramar, desde la cual sigue la playa al N. NO. 5° O . , y á dist. de 7 millas hay otra torre con un canon, nombrada de Jarac o. Después continúa la costa baja de arenales en la misma dirección , y á dist. de 5 3/4 millas desemboca el r. Júcar, en cuya punta hay una torre con cañones, y 2 millas antes otra nombrada de Ball. El r. Júcar es de poco fondo y con barra que solo barcos chicos pueden entrar en ella á cargar de arroz, de que hay bastante tráfico. En la márg. set. de dicho r., poco mas de 1/2 milla de su embocadura, se halla la v. de Cullera al pie de la sierra de este nombre , que otros llaman de las Zorras, cuyo estremo set. finaliza haciendo punta, á la que llaman cabo de Cullera, y en el que hay una torre de vigía, é inmediata una islita nombrada de los Pensamientos, que pudiera abrigar embarcaciones pequeñ a s , pero no es posible por estar llena de bancos de arena toda su inmediación; de modo que con poco viento , particularmente del L.» y 2.° cuadrantes, rompe el mar que imposibilita buscar el pequeño abrigo que pudieran tener de ios vientos del N. y NE., que son los mas dañosos en esta parte. Un poco al Ñ. de la embocadura del r . , próximo á la playa, y justamente al NE., 1/4 E. de Cullera, nay una piedra» descubierta llamada el Moro. (En el art. de Cullera damos noticias sobre la formación de un buen puerto en esta villa.)

Pasado el cabo de Cullera continúan las torres Casa del Rey y Nueva. y á su espalda la Albufera , por la costa que sigue» rasa de arenales al N. 17° O. 17 millas hasta el Grao de Valencia poco hondable, y asi es muy peligrosa eu las estaciones de otoño , y los vientos que ofenden mas y con los que suceden diariamente las desgracias, son los del NE. al SE., y el E. no deja rebasadero por ser este parage del Grao el punto mas occidental del golfo en estas playas se encuentra un banco de a r e n a , el arrecife de la barreta y el muelle del p u e r t o , en cuya punta hay una linterna con luz fija , elevada 40 pies sobre el nivel del mar , y puede verse á dist. de 7 millas. Pasado este p u e r t o , sigue la playa 11 millas de largo al N. NE. sin poblado á orilla del mar mas que la torre del Puche, y tierra adentro varios lug a r e s , hasta el Grao de Murviedro , que consiste en una torre de dos cañones y algunos almacenes este tampoco es fondeadero seguro por ser playa descubierta, aunque no tan lleno de escollos como el de Valencia; dista la v. de Murviedro de la orilla del mar tres millas. Desde este Grao sigue la costa al NE. 5U N. 5 1/2 millas de dist., en que hay una punta rasa nombrada cabo Canet, donde finaliza la provincia que describimos y comien/a la de Castellón de la Plana.

TERRITORIO. Al hablar de esta materia nos ha parecido oportuno hacerlo por p a r t . j u d . , recorriendo ligeramente de N. á S. la deliciosa provincia de que nos ocupamos. El partido de Chelva es pues el primero que se encuentra por aquella parte , cuyo terr. ademas de las estensas llanuras que e n cierra , comprende algunas montañas y colinas aisladas, cubiertas de pinos, sabinas, álamos, enebros, encinas ó higueras, y de multitud de diferentes arbustos, plantas aromáticas y medicinales, y ricas yerbas de pasto para la manutención de toda clase de ganados. En el rincón de Adeinuz el terreno es bastante fértil por las muchas aguas con que lo riegan los r. Guadalaviar, Ebron y Boilyues; siéndolo todavía mas en el vizcondado de Chelva por los manantiales que nacen en Tuejar y dicha última v., cuvas aguas forman el r. de su nombre; pudiendo muy bien decirse que en general, todas sus tierras son á propósito para el cultivo de granos. El partido de Villar del Arzobispo es montuoso en sus estremos del N. y S., quedando solamente en el centro una llanura de bastante estension, la cual constituye parte del campo de Liria y de la baronía de Chulilla. El titulado Pico de Andilla y mucho mas la Bellida, famosa por sus muchas nieves, destemplan estrordinariamente la atmósfera; pero Quedando hacia el S. y SE. diferentes hondonadas al abrigo el N., se dan en ellas gran número de prod. Con frecuencia se ven canteras de mármoles negros, entre los c u a l e 5 se distingue el conocido con el nombre de Alcublas, de c o lor pardo y sin manchas ni benita; blancas, como son r e gularmente los de aquellos montes hasta Segorbe. Las c e r canías de la v. de Alcublas están cultivadas en una estension de mas de 1/2 hora , y en ellas se encuentran frondosos sembrados y viñedos; cesando del todo el cultivo hacia la parte del E. en donde empieza el grupo montuoso de Cue_va S a n t a , correspondiente ya al partido judicial de Segorbe, provincia de Castellón de la Plana. A la izquierda del Turia se encuentran las pedrizas de Gestalgar con recortes hacia el SO., habiendo atravesado antes dicho r. el grupo de Chulilla, entrecuyos montes se distinguen losnombradoslaMuela, Pedriza, Punta y Carrasquilla, separados en la actualidad por profundos y estrechos surcos formados por la corriente de las aguas. Es muy digna de examen la parte set. de la punta titulada Salto de Chulilla, no porque las aguas del Guadalaviar se precipiten en cascadas magníficas como en otros r., sino Í)or la escasa dist. de los muros que las contienen, y la proundidad del cauce por donde corren; quedando hacia el S. de Chulilla y á la der. del espresado r. un desierto de algunas leg. de estension , que después entra en el partido judicial de Chiva , y continúa por Castilla , en cuyo terreno se oponen al cultivo los frecuentes riscos y peñascos , entre los que se crian gran porción de pinos, enebros, romeros, jaras y mucha maleza , que sirve de guarida á c o r z o s , lobos, cabras monteses y otros animales dañinos , y de pasto á bastante número de ganados.

El estremo N. del partido judicial de Liria está compuesto de muchos cerros, que formando cadena con los de Portaceli y Naquera por el E . , y con los de Cueva Santa al O., se e s tienden muchas leg. separando las aguas del r. Turia de las del Palancia. Su suelo es calizo, y en su superficie se descubren canteras de mármol negro con vetas blancas, bast a n t e esparto y algunos pinos, siguiendo de este modo hasta el barranco de Carraixet situado entre Marines y la ald.

de Olla, el cual circunda á Olocau por el O. y S . , abandonando en seguida el partido por la Cartuja de PortacelL. Por la parte meridional se levantan en cuadro los 4 montes Rodanas, denominados Rodana Grande ó Loma del Lestisco, Rodaría Blanca, Rodana Parda y Rodana del Pico; los cuales se componen de piedra roja y jaspe de diferentes colores, habiéndose encontrado en ellos algunas minas de plata y cobre, que se están esplotando en el dia por particulares aunque con escasos resultados. Al estremo N. del término de Liria se encuentra el monte de Lacobas formado de peña viva, elevándose también en las inmediaciones de la misma población los cerros de Sta. Bárbara al O. y de San Miguel al S. aquel se compone de bancos y pedruscos de color morado oscuro con mezcla de greda y arena , y este es calizo y por lo general de un mármol sonrosado con vetas espáticas, habiendo también en su falda SE. una cantera de mármol amarillo, sembrado de manchitas de rosa con puntos blancos y negros. Hállase, finalmente, en este partido el célebre campo de Liria, plantado en toda su estension de olivos y frondosas viñas, siendo la parte mas piivilegiada de este hermoso terr. las deliciosas y siempre verdes huertas de Benaguacil yValIbona, que se hallan á la márg. izquierda del r. Turia ó Guadalaviar. Las montañas del partido judicial de Murviedro principian á Hna hora del mar, y á ellas siguen otras cordillera

que van elevándose progresivamente á proporción que se internan, para introducirse después en ios partido de Liria, Segorbe y Nules, cuyos dos últimos pertenecen á la provincia

de Casteílon. Las cumbres de dichas montañas y las laderas mas pendientes se hallan peladas por lo general; pero sus faldas, asi como también los valles que ellas mismas forman, están plantados de higueras, algarrobos, viñas, olivos y a l gunos pinos. La mayor parte del terreno que comprende es calizo con mezcla de» guijarros, arena y bastante arcilla , y en los montes existen canteras de cal y y e s o , y de piedras silíceas, conocidas con el nombre de rodeno. Hay por último en este partido dos estensas llanuras, de las cuales la una llega desde el mar hasta mas allá de Rafelbuñol, y la otra está cerrada por su lado occidental por la sierra llamada de Espadan. El terreno del partido judicial de Moneada, empieza á elevarse á la dist. de poco mas de 1 leg. del Mediterráneo, formando una cordillera aislada de pequeña altura, la cual arranca desde el N. del partido v lo atraviesa en toda su estension, perdiéndose por el S. en el de Torrente. Esta parte alta dejiue hablamos , está toda poblada de algarrobos, olivos, viñas, romeros, aliagas, retamas, sanguinaria y otras yerbas medicinales; abundando también en cariteras’de piedra sillar y de cal. Comprende asimismo una dilatada llanura , que desde la falda de dichos cerros va estendiéndose hasta la orilla del mar; toda ella se halla plantada de copudas moreras, de manera que vista desde un punto elevado, no puede menos de presentar una brillante y bella perspectiva, á lo que también contribuye mucho la multitud de casas de campo que se ven salpicadas en diferentes sitios de esta deliciosa llanura, beneficiada por las aguas del Guadalaviar.

El t e r r . del partido judicial de Torrente es casi todo llano como parte constituyente de la hermosa huerta de Valencia. A la der. del barranco de Chiva se ven deliciosísimas huertas regadas con las aguas de varias fuentes , y también dilatados secanos en que se levantan algunas lomas que, humildes en las inmediaciones de la v. de Torrente, van elevándose por el lado del O., hasta que últimamente llegan á formar cerros y montañas que se dirigen en seguida hacia Turis; siéndola mayor parte de ellos de naturaleza caliza, y algunos de mármol amarillo, que puesto á fuego lento se transforma en rojo con manchasá manera de nubes. A la izquierda de dicho barranco de Chiva, se encuentra, en fin, el magnífico llano de Cuart e , poblado todo él de olivos y algarrobos, formando un ameno y dilatado bosque. Casi todo el t e r r . que abraza el partido

judicial de Chiva se halla sembrado de montes y asperezas, y muy especialmente en la parte que linda con Chera, en cuyo punto hay también un inculto y despoblado desierto de no pequeña estension. Al SE. se elevan los cerros de Carencio, en los que existen canteras de mármol rojo-oscuro con manchas de varios colores caminando hacia Torrente se encuentran otras de color amarillo, que se altera por medio del fuego, tornándose en rojo y encarnado; y en las lomas de la Dehesa las hay igualmente de mármoles sumamente duros y de un pardo que tira á negro. Al SO. de Yátova e s – tan situado los montes de Malacara, de donde proceden generalmente las tempestades; mas encontrando estas al paso el nombrado de Azafareche, que se halla en la parte occident a l , las obliga á dirigirse por dos valles muy dist. uno de otro. El terreno de este partido es por lo regular bastante fértil y abundante en buenos pastos para toda clase de ganado ; existiendo en él diferentes llanuras q u e , por falta de a g u a s , no pueden convertirse en deliciosas h u e r t a s , como son las que hay en los término de Chiva, Buñol y Turis. El t e r r. del partido judicial de Ayora está compuesto en su mayor parte de un grupo de montañas mas ó menos elevadas, entre las cuales son bastante notables la escabrosa sierra de Martes, cuyas vertientes aparecen rápidas y aun perpendiculares en diferentes puntos el monte Caballón, que va sirviendo siempre de muro izquierda al r. Júcar; el conocido cerro de Caroche, cuya altura es tan estraordinaria, que los navegantes distinguen su cima con el nombre de Sierra de Enguera ó Pico de Caroche las sierras de Ayora, que procedentes de la de Aleóla en jurisd. de Jarafuel, continúan hasta el puerto de Almansa, después de haberse enlazado con el espresado monte de Caroche y las sierras de Bicorp, Queso y Enguera el titulado Monté Mayor, que elevándose al SO. de Aycra, á una altura bastante considerable, marcha en la misma dirección hasta formar el collado de San Juan, por cuyo medio se enlaza con el Mugrón de Almansa; y por último la Muela del Oro, de la cual se desprenden multitud de montes escarpados que parecen sus raices. Entre los valles que comprende este partido es el mas notable el amenísimo llamado deCofrentes, cuyo suelo está formado de colinas y pequeños cerros, que alternan con algunas vegas, vallejos y riberas de poca estension su terreno se halla cubierto de árboles de diferentes clases, ofreciendo ademas una vegetación lozana, que solo se interrumpe en alguna que otra altura del interior, por estar compuesta de yesares y piedras de amolar.

En el mismo partido hay canteras de mármol negro, alabastro y yeso, y en ellas ó en sus inmediaciones suelen encontrarse también jacintos de Compostela, de color de castaña, blancos y encarnados.

(Continua en el original)

VALENCIA

tercio naval del departamento marítimo de Cartagena (42 l e g . \ y comprende las 2 provincia marítimas de Valencia y Tortosa el tercio está mandado por un brigadier ó capitan de navio de la armada nacional, con un 2.° gefe, capitan de fragata de la misma. Tiene juzgado privativo compuesto del comandante del t e r c i o , asesor, fiscal, esci ¡baño y 3 alguaciles. La provincia marítima de Valencia se subdivide èn 3 d i s t r i t o s ; el de la c a p i t a l , el de Castellón y el de Cullerà ; y la de T o r t o s a , en los de Tortosa y Vinaroz al primer distrito de la provincia corresponden los puntos del Grao y Cabañal ; al de Castellón , los ae Burriana, Moncofar y Oropesa; al de Cullerà, los de Gandía, Oliva y Miramar ; en cuanto á Tortosa (V. su art.)  el distrito y puerto de Valencia está mandado por un capitan del p u e r t o , de la clase de capitanes de fragata, cuyo destino solo dura 3 años; los otros 2 distritos están igualmente mandados por sus respectivos capitanes; y hay ademas una contaduría de marina al cargo de un oficial L.° del cuerpo administrativo de la armada , con un subalterno y un portero , á las órdenes del comandante de la provincia

Presentamos la matrícula de embarcaciones y gente de mar de este tercio; la pesca beneficiada en todos sus d i s t r i t o s ; los buques naufragados desde el año 1800 hasta el dia , y los construidos en Ta misma época en las playas del Grao y Cabañal del distrito de Valencia. (Ver en el original)

VALENCIA (ARZOBISPADO DE)

tiene por sufragáneos los ob. de Segorbe, Orihuela, Mallorca y Menorca su diócesis confina al N. con las de Segorbe, T e r u e l , Zaragoza y Tortosa; al E.’con el mar Mediterráneo ; al S. con las de Orihuela y Cartagena , y al O. con las de Orihuela y Cuenca la dist. mayor de la cap. son los estrenaos S y O., que están á 45 l e g . , y la menor 4/2 hasta el mar. Tiene un terr. discontinuo á la p a r t e del N. enclavado entre las diócesis de S e gorbe , Teruel, Z iragoza y Tortosa, que comprende unas 20 población; mas dentro de su perímetro no hay pertenencia agena. No hay divisiones en arciprestazgos para el gobierno e c l . ; solo se clasifican las parr. por las gobernaciones civiles ó en 32 veredas para la mejor dirección de las órdenes, contándose en todo 303 parr. matrices y 436 anejos, con unas 60 vicarias. Comprende sobre 428 pueblos, en cuyo número incluimos las ald. y grandes cas. que no tienen municipalidad propia, y que en la matrícula ecl. figuran como anejos, los cuales corresponden 272 á la provincia civil de Valencia, 4 31 á la de Alicante y 25 á la de Castellón. La cated.

restaurada por D. Jaime I de Aragón en 28 de setiembre de 4238, tiene en la actualidad 7 dignidades, 24 canónigos, 40 pabordes y 233 beneficiados hay ademas 2 col. con parr.

en Játiva y Gandía, fundada la primera en 4 444 , y erigida la segunda en 4499, las cuales tienen de servicio 72 canónigos y capellanes, y se encuentra también un seminario conciliar del arz. La historia de este arz. la encontrarán nuestros lectores al final del art. Valencia c , y el número de pueblos, parr., oratorios, conv., clero parr., dependientes y categorías de los curatos en el adjunto

VALENCIA y MURCIA (C. G. DE LOS REINOS DE)

distrito militar ó ciudad g. que comprende las provincia civiles de Albacete, Alicante, Castellón, Murcia y Valencia , que cada una forma una comandancia general, subdivididas ademas en t a n tos cantones militares cuantos son los juzgados de primera instancia. Confina al N. con las c . g. dé Cataluña y Aragón; E. el mar Mediterráneo ; S. ciudad g. de los reinos de Granada y J a é n ; 0 . la de Castilla la Nueva en su recinto se encuent r a n las plazas fuertes y de armas que constituyen la defensa del t e r r . , que según el orden de su importancia y c a t e goría son Cartagena , Alicante , Peñíscola, Denia , Murviedro , Morella , Valencia, Alcañiz y Peñas de San Pedro; pero en su descripción seguiremos «el orden de localidad, como mas propio de nuestro objeto.

Valencia cap. del dist., residencia de la c g. y maestranza del segundo departamento de artillería ; se halla s i t. en una espaciosa llanura á orillas del r . Turia y 4 /2 leg.

del Mediterráneo se considera como plaza por ser residencia del gefe superior del d i s t r . , mas no por su importancia sus recursos de defensa solo consisten en un ant. muro de 2 5 pies de elevación, coronado de almenas aspilleradas; varias torres que flanquean algunas puertas, y la Ciudadela en forma trapezoide con dos fuertes torreones en la puerta de Socorro; el frente que mira al r . se halla defendido por un baluarte; al costado del S. dentro de los muros se halla la casa aduana, que ocupada militarmente puede servir por su construcción de t a n t a ó mas resistencia que aquella , y al lado N. se halla el palacio del capitán general, parque de artillería y maestranza que también pueden ponerse en estado de defensa.

Denia al S. de Valencia , dist. 4 6 4 / 2 leg. y en la misma costa del Mediterráneo, se halla esta plaza á la falda del monte de su nombre, de 7 5 varas de elevación y coronado por el c a s t . , que tiene una posición ventajosa y despejada hasta mas allá del último alcance de la artillería la plaza se halla cercada por su ant. muralla , flanqueada por torreones y protegida por su c a s t . , que ofrece una regular defensa.

Alicante siguiendo la misma c o s t a , á 27 leg. de la c a p ., se encuentra esta c . , en el interior de su bahia su recinto es irregular y defendido por murallas apoyadas en los baluartes de Ramiro, San Carlos, San Francisoo, Purísima y Sta. Faz, y los torreones de Roig , San Nicolás y San Cayetano la rada la forman el cabo de la Huerta y el de Santa Pola. A la parte E. y coronando el cerro se halla el cast. de Sta. Bárbara, con todos sus aproches escarpados ; se compone de 4 emplazamientos ; el macho , que es el mas alto, mira á la pobí., sieodo capaz de mucha resistencia. El cast.

de San Fernando corona al N. el cerro de T o s a l , dist. 12 varas, con el objeto de defender aquella posición que domina la plaza. La isla Plana , ó sea la nueva Tabarca, situado al S . d e l a ciudad y dist. 3 4 / 4 leg. del cabo de Sta. Pola , adquirió su segundonombre, por haber sido la residencia de 6 0 0 g e – noveses que en 4 7 6 8 se rescataron de Argel; tiene 4 , 4 8 0 varas de long., y 5 0 0 de l a t . , y en dirección de E. á O. defendida por la torre de San José.

Cartagena en la misma costa del Mediterráneo á 3 7 leg.

de Valencia, hallamos esta importantísima población una cordillera

de montes que corre de E. á O., se interrumpe en este p u n to, haciendo una cortadura, que forma un p u e r to de los mejores de Europa, debiendo á esta circunstancia su origen en edades remotas, y sus vicisitudes. Construido en este puerto un suntuoso arsenal, se t r a tó de asegurarle por mar y tierra, y este fue asimismo el origen de su principal fortificación.

Las murallas que constituyen la plaza , forman por la parte de tierra unos frentes de fortificación moderna , pero de reducidos baluartes y con algunos accesorios el arsenal se halla rodeado de una robusta muralla, protegida por 3 pequeños baluartes para artillería de corto calibre la plaza contiene el famoso cuartel del Parque , en el que llaman la atención dos salas de armas de una estension estremada, y la buena colocación y amplitud de sus oficinas , almacenes y talleres-, el cuartel de Antigones, capaz de 4 , 9 0 0 hombres; el de artillería, para 4 , 0 0 0 ; el de Marina, para 2 batallones, y el Hospital militar , suntuoso y bien entendido edificio, capaz de 2 , 0 0 0 enfermos , con todos los departamentos y oficinas para su uso. Las obras esteriores son el c a s i , de Galeras, sobre un monte al S O . , unido á la plaza por 3 r e ductos, dominando al monte de la Podadera, y las avenidas de las montañas inmediatas, y que sirve de Ciudadela su figura es rectangular, con baluartes en los 4 ángulos , un rebellín de entrada y en el centro una elevada torre cuadrada, base del asta-bandera y residencia del vigía para las señales. El cast. de la Atalaya se halla al O. de la plaza, sobre una montaña y á la altura del do Galeras, siendo su figura un cuadrado con sus baluartes es de grande utilidad para_defensa del acceso á la ciudad , cuyas avenidas descubro enseñoreando la llanura del almacén. El cabezo de los Morros sil. al NE., con su fortaleza defiende por aquel punto la plaza ó impide que el enemigo pueda dominar sus t e r r a p l e nes, y por fin, las alturas del Molinete , Monte-Sacro , San Diego y la Cruz , ocupados por pequeños fuertes y baterías forman una segunda linea de defensa muy importante. Sobre el cerro llamado del Cantón, está el fuerte de la Concepción en estado de ruina , y que se cree ser el mas a n t .

de España.

Penas de San Pedro abandonando la c o s t a , y dirigiéndose al interior , se encuentra esta pequeña, v. , de la provincia

de Albacete , á 39 horas de Valencia tiene un cast. susceptible de alguna defensa , pues se halla situado en la mitad de una elevada peña , que domina la estensa llanura que caracteriza la topografía del p a i s , considerado ya como de la Mancha aunque de reducido recinto es á propósito para ampararse de un golpe de mano, tanto mas, siendo el único punto que desde Castilla la Nueva puede servir de aDrigo en un caso desgraciado.

Alcañiz aunque de la ,provincia de Teruel, pertenece esta plaza á esta ciudad g. en virtud de las circunstancias , en la última guerra del Maestrazgo se halla situado á la márg. der. del Guadaloja en un terreno escabroso tiene un cast. capaz de una brillante defensa, habilitándolo en estado de guerra, y es de suma importancia , por ser un punto de comunicación deMurviedro con Aragón.

Morella ciudad ant., y el imperio de la morisma en la dominación sarracena se halla en el centro del Maestrazgo, t e a t ro de todas las guerras que han asolado este distrito, siendo de suma importancia, bien para recursos de un cuerpo de ejército que opere en el centro de las montañas; bien como protector del enlace con Aragón, formando una zona militar su fortificación consiste en antiquísimas murallas, defendidas por torreones y por el rápido descenso que por todos los puntos ofrece, en particular al E. y O. su cast. se halla practicado en una elevada y cortada peña ala parte N. de la ciudad y sostenido por 3 recintos capaces de una sangrienta y obstinada defensa, como se ha demostrado en varias épocas.

Peñíscola á 20 leg. N. de Valencia se la ve sobre un p e – ñon de 210 pies de altura en forma de península entrante en el mar 600 varas comunica con la costa por un istmo ó lengua arenisca de 60 varas de ancho , que en los temporales le cruzan los golpes de mar, por cuya razón se ha construido para su entradaun arrecife defendido por dos baluartes, por ser el único aproche, que la ciudad tiene, pues en todo su perímetro es inaccesible, por estar circuida de costa peñascosa y perpendicular el cast. ocupa la culminante del peñón es obra sólida, con una espaciosa plataforma y aboreda á prueba, almacenes , cuarteles y algibes en el perímetro de este peñón hay 41 fuentes ó manantiales de agua dulce, esquisita y cristalina y otra en lo interior de’ la plaza.

Murviedro-, volviendo al S. por la misma costa se halla e s ta última plaza á 4 leg. de la c a p . , situado á la parte NE. del elevado cast. de Sagunto, el cual constituye su defensa; el primer recinto de este cast. es de una enorme estension y p r o tegido por otros hasta su principal fortaleza, residencia del gobernador, con cuarteles, almacenes y algibes; su planta irregular y antiquísima es susceptible de mucha resistencia, como lo han demostrado las heroicas defensas que allí han sostenido las armas españolas. Su importancia , por ser el paso del camino de Cataluña y la avenida del de Aragón, es sobrado conocida.

Reasumiendo estas breves noticias, resulta que Cartagena y Alicante son las dos plazas mas importantes , tanto por su posición comercial, cuanto por ofrecer recursos á un ejército que se vea obligado á retirarse á ellas, como únicos puntos de seguridad en la parte SE. de la Península la ventaja de ser puertos de mar hace mas imposible su bloqueo, y mas fácil la evacuación y salidas de las fuerzas que en ellas s e a b r i g e n , ó adquirir refuerzos para la resistencia. En la parte N . del distrito, aun cuando Peñíscola debe considerarse como la mas fuerte, su reducido recinto y el hallarse separada de la carretera de Cataluña, no le dan la importancia que tiene fuera de estos dos casos, con relación á sus defensas ; por lo tanto, Morella y Murviedro adquieren su verdadero carácter, por su situado en la confluencia delasavenidas de Aragón y Cataluña, y poder ser los almacenes en todas las guerras de montaña, que son las que nías agitan el país, sobre todo en las contiendas intestinas Alcañiz y ias Penas de San Pedro pueden considerarse como plazas de a r mas sin mas importancia que con relación al pais que ocupan.

No se hace mención de otros puntos que se han considerado cerno fuertes, tales como Murcia, Albacete, Castellón, Vina- • roz, Onda, etciudad, e t c . ; pues solo han figurado en tal concepto I en virtud de circunstancias especiales, y sus fortificaciones solo se consideran como pasageras ó de campaña.

El distrito está mandado por un general, teniente general y un general segundo cabo y camandante general de la provincia afectos ala ciudad g. se hallan el estado mayor, los cuerpos de las guarniciones, los de artillería, ingenieros y sanidad, laadm. militar, la subdelegacion eclesiástica castrense y el tribunal de Guerra el primero se subdivíde en estado mayor del ejército y de la plaza, y el primero de estos se compone de un gefe, un segundo gefe, 5 oficiales de secretaria y dos del archivo; el de plaza del gobernador, un sargento mayor , dos primeros ayudantes . un segundo, el comandante de la Ciudadela y los 4 gefes de cuartel en que se halla dividida la cap. La adm. militar consta del intendente, secretario, 2 oficiales, 2 aspirantes , un portero y un mozo de oficios, un interventor comisario de guerra , 9 oficiales, 3 aspirantes, un portero y un mozo un pagador, comisario de guerra, 2 oficiales y 2 aspirantes 3 comisarios de guerra, un contralor del hospital militar y un pagador de fortificación. La subdelegacion ecl. castrense, de un t e niente de vicario general, un asesor, un fiscal, un notario y secretario y un nuncio, y componen por último el tribunal de Guerra, el capitán general, un auditor, un fiscal, un alguacil mayor, 2 abogados y 2 procuradores de pobres , un escribano principal, otro de diligencia y 1 oficial mayor de la escribanía. Los cuerpos de artillería, ingenieros y sanidad están representados por sus respectivos comandantes y gefes, y la guarnición varia según las necesidades.

Es Valencia capital del segundo departamento de artillería con un subinspector y un gefe de escuela está allí destinado el segundo regimiento del arma con un coronel y un teniente coronel mayor le componen la primera y segunda brigada , y brigada montada con sus respectivos comandante y segundo comandante. Se encuentran en este departamento la maestranza de Cartagena y la fábrica de pólvora de Murcia , en que hay director y subdirector; las salitrerías de Zaragoza y Lorca y las minas de azufre de Helliu, también con un director; y últimamente, las comandancias generales de Cartagena , Valencia , Alicante , Zaragoza, Jaca , Peñíscola, Morella y Murviedro, siendo el comandante general de la primera director de su maestranza

VALENCIA

ant. reino situado en la parte oriental de Españ a , que comprende 651 leg. cuadradas de superficie, emendólo por E. el mar Mediterráneo desde el r. Cenia que está mas allá de Vinaroz , hasta la torre de la Horadada en los confines del ant. reino de Murcia. Sigue limitándole dicho reino por el S. y O. (hoy provincia de Murcia y Albacete) hasta un poco mas arriba del r. Cubrid, desde donde empieza á confinar también por O. con Castilla la Nueva (provincia de Cuenca) siguiendo adelante con varios senos, de los cuales los mayores se encuentran en las cercanías de Requena y Sta. Cruz de Moya. Continuando el mismo límite con Castilla se ve luego el mojón divisorio de este reino, de Valencia y Aragón, quedando como aislado el Rincón de Ademuz, que «pertenece al de Valencia. Sigue este los límites con Aragón (hoy provincia de Teruel) con varios ángulos y dientes hasta la punta m a s s e t . del de Valencia, que es el Tosal del Rey en la Tenencia de Benifasá, en donde se encuentra el mojón trifinio divisorio de Aragón , Valencia y Cataluña, con cuyo principado (en el dia provincia de Tarragona) confina hasta la desembocadura del r. Cenia, que sirve de limite.

En todo este tan celebrado reino, cuyos confines hemos t r a zado rápidamente, se disfruta por lo común de una atmósfera clara y despejada ; sus aires son puros y saludables, á escepcion de los cortos marjales de Oropesa y arrozales de las riberas del Júcar , cuyos perniciosos efectos hemos d e mostrado en sus lugares correspondientes. El clima no es igual en todo el reino batida su parte set. por los crudos vientos del N . , y coronados sus montes con frecuencia de abundantes nieves, el frío es muchas veces insoportable en.

el interior es también bastante tria la estación del invierno, especialmente en algunos sitios elevados; pero en toda la zona que limita con el Mediterráneo , y en la parte meridio- El estado núm. 6.° se refiere ú la proporción que las diferentes especies de penas tienen con la población, los acusados y los penados ; y con estos mismos términos y entre sí las penas mayores y las menores. La primera observación que del espresado estado surge es, que siendo 35 el número de penas de muerte en proporción con la población, es de 1 á 27,341′!4; con los acusados 1 á 83’65, y con los penados 1 á 75,62, r e lación infinitamente mas desventajosa que la de todos los t e r r . escepto los de Navarra, Granada y Madrid que la in nal del reino, apenas se conocen los rigores de aquella cru – da estación. Los yelos son un fenómeno estraordinario , y en el estío, como ya se indicará en el art. de provincia, se levant a n diariamente de 9 á 10 de la mañana los vientos del mar, que, siempre húmedos y saludables, templan el calor hasta las 4 de la t a r d e ; de manera que bien puede decirse se goza de una primavera continuada en este sitio privilegiado de la naturaleza.

Por todos los confines del reino se encuentran montañas ue dificultan el paso , á escepcion de las cortas llanuras por onde se va á Villena y Murcia en el interior de este hermoso pais se levantan escarpados cerros y montes de mucha altura , entre los cuales, recorriendo e l t e r r . de N. á S , d e s cuellan los siguientes la Peña del Bel y la Muela de Ares, en el partido judicial de Morella (provincia de Castellón); el Tosal de Zaragoza en el p a r t . d e Albocacer; Peñagolosa, en el de Lucena; Desierto de las Palmas, en el de Castellón ; Pina, en el de Vivel; Pico Espadan en los confinesdel de Lucena y Segorbe; Monte-mayor en este último; Pico de Chelva en el de su nombre (provincia de Valencia), Caroche en el de Ayora; Muela de Bicorp en el de Enguera; Mondubcr en el de Gandía; Benicadelly Moncabrer en el de Concentaina (provincia de Alicante); Mongó en el de Denia; Serrellay Altana en el de Callosa de Ensarriá ; Puig-campana en el de Villajoyosa ; Peña de Jijona y Maigmóen el de J i | o n a ; el Cid en el de Monovar ; el Rollo en el de Novelda ; la sierra de Callosa en los confines del de Dolores y Orihuela, y en este último la sierra de su nombre. Toda esta gran masa de elevados montes dejan profundos barrancos formando entre sí ora grupos ó laberintos intrincados como en la parte set. del reino; en la occidental entre los r. Guadalaviar ó Turia y el Júcar, y en otros puntos, ora dilatadas cordillera

que se estíenden por muchas leg. sin interrupción aparente, siendo las principales ; la que constituye el Peñagolosa, que siendo una ramificación de los montes»ibéricos , se esparrama por el.N. hacia Morella y la ant. Tenencia de Benifasá, no interrumpiéndose hasta el Ebro y sembrando al paso de asperezas buena parte del maestrazgo de montesa ; la que forma la sierra de Espadan, que empezando por humildes colinas en las inmediaciones de Almenara y Valletes de Sagunto ó valle de Segó, sigue aumentando su latitud y altura hacia el N., declinando luego al O . , en donde se levanta el famoso pico de su nombre permite después estrechos y tortuosos pasos á los r. Mijares y Villahermosa, y cerca de la v. asi llamada se confunde y entrelaza con el mencionado Pañagolosa la que principia en las cercanías de Murriedro Í montes de Portaceli, que corre hacia el O. por muchas leg.

asta Peñaescabía y sierra de Javalambre, que pertenece ya á Teruel; sirviendo de muro meridional á la gran conca»ó valle de Segorbe por donde discurre el r. Palancia, que t i e ne su origen al estremo O. de dicha cordillera, por cuyas crestas corre la línea divisoria de las provincia de Castellón y Valencia la que comenzando en los montes de Valldigna se entrelaza con Serra-grosa que después continúa al O. por i leg. sirviendo de límite set. al valle de Albayda, y terminando por humildes lomas muy cerca de Fuente la Higuera paralela á esta cordillera de montes corre otra mas set. que baja desde el puerto de Almansa, y reducida á cerros y lomas en las cercanías de Rotglá, se dirige al puerto de Cárcer y montes de la Llosa y finalmente el monte de Benicadell que por el E se halla unido al Coll de Llanto, que sirve de estribo occidental á la huerta de Gandía , forma por sí solo el muro que separa el valle de Albayda del condado de Concentaina, queda al parecer interrumpido en el puerto de Albayda , y contíuuando luego los montes de Agullent al O., cuya unión con el Murióla es bien patente , llegan á perderse en el ant.

reino de Murcia.

Cuando se examinan los barrancos que yacen entre las montañas elevadas , todo parece confusión» y desorden . el horizonte es generalmente limitado sin descubrirse salida por parte alguna; en una parte se ven cortes perpendiculares de hasta mil palmos ; en otras , cuestas rápidas sembradas de enormes cantos, que parece van á desprenderse.

Desde las alturas se registran con sorpresa los profundos surcos que quedan entre las cordillera v los montes; se descubre que unas corren paralelas entre s í , y otras en direcciones contrapuestas Peñagolosa, Espadan v Altana ofre- 3 0 9 cen este espectáculo, y son ano dudarlo los puntos mas apropósito para estudiar la naturaleza del reino. La multitud y variedad de plantas que se pisan por mas de 3 horas, indispensables para llegar á la cumbre de estos montes; las diferentes tierras y p e ñ a s las conchas petrificadas ó sueltas que se hallan á cada paso; los «ortes pelados y desmoronados hacia el S. ó SE; la vasta estension de montes, c e r r o s , barrancos y poblaciones que se descubren; todo este cúmulo de objetos arrebata y deleita el ánimo de un atento naturalista. Los montes y cerros que cubren la mayor parte del reino, deben, al parecer, su origen á los cuerpos orgánicos que vivieron en el mar; porque no solóse componen de peñas calizas casi todos ellos, sino que también se notan bancos de hasta 30 palmos de grueso, formados de conchas amontonadas y dispuestas por familias, muchas veces con su barniz natural, y casi siempre con su forma primitiva. No cabe duda que no siempre es completa la petrificación en dichos bancos, pero su posición casi horizontal y su paralelismo dan indicios ciertos del origen que debieron tener en el fondo de las aguas. Asi se ve que en el monte Meca, que parte los terna, de Almansa y Ayora, alternan gruesos bancos de peña caliza con otros mas g r u e sos de aquellas ostras que los naturalistas llaman peines; la muela de Aras de Alpuente, cuya corona es de bancos calizos, antes de llegar á aquella altura se compone de ostras rellenadas de mármol e n l o m a s alto de Penagolosa y en los montes de Cervera se hallan buccínos petrificados, que conservan las espinales y la forma esterior; en los de Jijon a , Cullera, Castalia y otros se notan con frecuencia muchas conchas, y hasta estampas de pescados conocidos se conservan en los de Pego. Aunque comunmente es caliza la sustancia de todos los montes del reino , se encuentran, sin embargo, muchos de piedras arenisco-gredosas, mayormente hacia el N . , ya mezclados con otros marmóreos, ya encerrados entre cordillera calizas. En los calizos se ven con frecuencia vetas espáticas y ocres endurecidos de varios colores entre los areniscos y de amoladeras se observan algunos sumamente duros y otros al contrario blandos, que se descomponen y reducen á tierras arcillosas, granugientas y ásperas al principio , las cuales van adquirieudo suavidad con el tiempo, encontrándose en sus grietas espato pesado y cuarzo en los montes de Ayodar y Pavias y mucho mas en Eslida, que está en el centro de la cordillera de Espadan, se halla cinabrio, cobre, hierro y cobalto, y en los inmediatos á Segorbe minas de plomo en los areniscos de Naquera, sumamente duros, se ven vetas de mas de 4 palmos de v e r dadero alabastro, cuyas fajas varían infinito en color, posición y dibujos; y finalmente en los inmediatos á Planes, Mogente y Ayodar se halla gran número de cristales conocidos con el nombre de Jacintos de Compostela. Abundantes canteras de preciosos mármoles se encuentran en todo el reino; su minuciosa descripción sería enfadosa en este artículo, toda vez que en sus localidades hacemos mención de ellas ahora solo nos incumbe dar una noticia de los puntos en donde se hallan , que son ; en Alcublas , Alfahuir, Aspe, Biar, Buixcarró, Callosa de Ensarriá , Castellonet de la Conquista, Caudiel, Cervera, Cuevas de Viurromá, Marchuguera, Margarida, Pego, Peñíscola, Portaceli, P o t r i e s , Bollo, Rosell, Soneja y algunos otros.

Entre la multitud de rios y riacn. que bañan en distintas direcciones el terr. de este hermoso ant. reino, son los de mas consideración los siguientes el Mijares, el Palancia, el Monleon , el Bergantes, el Cenia y el Cerval, en la provincia

actual de Castellón de la Plana; el Turia, el Júcar, el Albayda, el Sellent, el Escalona, el Juanes, el Magro, el Chelva, el Clariano y los barrancos de Carraixet y Chiva, en la de Valencia ; y el Alcog, el Vinalapó, el Ja- Ion, el Segura, el Vergel, el Castalia y el Algar, en la de Alicante; de cuyas descripciones no nos parece necesario ocuparnos en este lugar, por haberlo ya hecho con bastante amplitud, no solo en~los a r t . que de cada uno de ellos figuran en nuestra obra, sino también en los de las t r e s provincia

en que se halla dividido el reino actualmente, en los cuales puede verse asi mismo las producciones y demás circunstancias relativas al terr. de que hemos hablado; concluyendo por último este art. con el estado que ponemos á continuación.