concejo ant. en la provincia y partido de Leoo, compuesto de los pueblos de Cuevas, Matalavüla, Palacios. Susañe y Valdeprado, los cuales corresponden actualmente al partido judicial de Murías de Paredes, ayuntamiento de Palacios del Sil.
SIL DE ABAJO
concejo ant. en la provincia de León, partido judicial de Ponferrada, compuesto de los pueblos de Añilares, Anllarinos, Argavos, Canseda , Páramo del Sil, San Pedro de Paradela, Sta». Cruz del Sil y Sorbeda.
SIL
r. en la provincia de León, partido judicial de Murías de Paredes desciende de un enorme estribo de los Pirineos Asturianos , hacia Rioscuro v Robles; corre en dirección SO.
hasta Villarino, desde donde baja impetuosamente hacia Ponferrada; aquí tuerce un poco mas al O., designando en Sobrádelo la línea que separa las provincia de León, Valladolid y Orense y parece destinado á separar ía cuenca del Miño de la del Duero, preparando en su unión con las montañas del Portugal set. por las sierras de Trevinca y Segundera, un obstáculo que debe allanar aquel último r. circula por un valle estrechísimo al abrigo de todos los vientos, sobie un terreno tan fértil como llano , y adornado de|la mas vistosa y variada cultura , recibiendo el tributo de vaiios r. como el Valcarce, Selmo, Boeza, Cabrera y Silvan , y multitud de riach. y de gruesos torrentes que descienden de elevadísimas montañas aquel valle favorecido de la naturaleza y hermoseado por la ind. de los hombres, donde la vid se mezcla con el almendro y otros árb oles frutales, y donde el naranjo madura su fruto al aire libre, cuando todas las cercanías están como de luto cubiertas de, escarcha, roció y nieblas, alimenta una población numerosa repartida entre gran número de ald., L. y v., tales como las de Bembibre, Ponferrada y Villafranca.»La calzada de Galicia después de atravesar la cordillera de montañas pirenaicas que sirve de límite oriental á este delicioso valle, le corta de nuevo para pasar por entre las montañas enormes que le separan del Miño para reunirse á este r. corre el Sil hacia el SO. atravesando el Monte Furado, al que llega por el rico valle de Orres ; en este punto, curiosísimo para el diligente observador, recibe las aguas del Bibey, aumentado con las que envian las sierras Segundera, Seca y San Mamed; atraviesa el valle de Quiroga , y serpentea por último en la tierra llana donde absorbiéndole el Miño le asocia á su curso en todo su tránsito tiene de trecho en trecho puentes bien de piedra, bien de madera, y algunas barcas que facilitan su paso; fertiliza porción de terreno de casi todos los pueblos por donde pasa, impulsa varios artefactos, y cria pesca de truchas , barbos, anguilas v otros peces
SIJUELA
arroyo en la provincia de Málaga, partido judicial de Ronda se forma del nacimiento que existe en las tierras del coto de la Chavera, sigue por el pie de la heredad de Avala, riega 23 huertas que componen ei partido del mismo nombre, y llegando por bajo de la cueva del Pastor á las tierras de la hacienda del Duende, se incorpora con el de Guadalevin.
SIJOAS
L. en la provincia de Lugo, ayuntamiento de Pol y fehg. de San Lorenzo de Tomeiros (V ) . POBL. 5 v e c , 25 alm
SIJENA
real monast. en la provincia de Huesca, part judicial de Sariñena, diócesis de Lérida, SIT. en la hondonada ó valle que forma el r. Alcanadre á 300 pasos N. de su orilla izquierda
y á 4/4 de hora O. de Villanueva. El sitio donde está fundada esta real casa es melancólico y mal sano; en cuyas circunstancias se apoya la razón de permitir á las señoras que salgan á pasear por los alrededores hasta la dist. de una hora; á sus casas nativas por un año, y á los banos cuando el estado de su salud lo exige. Asi, cuando el concilio de Trento decretó ó mas bien restableció en su vigor la clausura para todos los conv. de mujeres, el de Sijena, fundándose especialmente en la insalubridad de! clima, sostuvo una larga y vivísima lucha con los ob. de Lérida y los castellanos de Amposta, como priores de la orden de San Juan en la cotona de Aragón, é impetró del Pontífice la exención de clausura, que aun conserva. Con no menos constancia habia contrarrestado durante los siglos XIV y XV la pretensión de los mismos castellanos, de ponerla bajo su j u risdicción , lo cual evitaron las religiosas, sometiéndose directamente á la autoridad del gran maestre de Malta. El primer edificio que se construyó en tiempo de Doña Sancha, reina de Aragón, esposa de Alfonso II hacia el año 1181, es un cuadr.longo, en cuyo centro hay un patio descubierto adonde dan las puertas y locutorios de las señoras. Este edificio ó sea el monast. ant. se halla como oculto y estrechado entre las nuevas construcciones hechas por las mismas religiosas para su habitación y á su gusto y espensas, faltando á su esterior aquel conjunto uniforme y grandioso que aparece en las fáb. destinadas á la vida de comunidad, en que la institución lo es todo y el individuo nada. Y sin embargo, cuadra mejor á la vista esta falta de plan y concierto, que si un arquitecto del siglo pasado se hubiera propuesto reedificarle en regla, convirtiéndolo en un cuadro monótono. Siquiera ahora el rojo color de sus paredes, las torrecillas que lo flanquean, los*fuertes y salientes estribos que lo aguantan, y el mismo desorden é irregularidad de las ventanas le prestan de lejos una ilusión de antigüedad.
Siquiera al buscar la entrada del monast., el artista algo burlado en sus esperanzas, se detiene de pronto ante el ant. apside de la iglesia, que asoma por fuera de la moderna envoltura, y le contempla en su esbelta convexidad, flan queado por otro mas pequeño, con el cual formaría antes collateral el cuerpo cuadrado que corresponde al moderno panteón de las religiosas, manifestando que á cada lado de la capilla mayor existieron otras dos semicirculares aunque menos profundas, de cuyas laboreadas ménsulas cuelgan festones de yerba; en el centro de cada uno se ve una ventana bizantina como para ostentar el grueso del muro. Después de pasado el dintel de la puerta á la der. del primer patio corre á lo largo la fachada lateral del templo flanqueaos por robustos machones, adornada con ventanas bizantinas y sostenida su cornisa por esculpidas ménsulas de adornos y formas caprichosas. A un lado está la única puerta del templo, obra de la edad media; 13 arcos cilindricos, disminuyendo en gradación, apoyados en otras tantas columnas a cada lado, sin contar otros mas pequeños y menos salientes, y las angulares aristas que entre arco y arco asoman . forman una ancha bóveda semicircular, que con luz mas opaca y con vista menos perspicaz imitaría el efecto óptico de una larga galería vista de frente, y en cuyo fondo se abriera la puerta. Todo respira una sencillez que raya en rudeza; las columnas están sin base y apoyadas sobre un ancho banco de piedra, y la mitad de ellas interpoladas con las otras, sin capiteles, riqueza principal del género bizantino. Formando ángulo con la portada, se eleva un antiguo y bajo campanario, al parecer no concluido, al pie del cual se ve un tosco nicho can una graude y maciza urna sostenida por cuatro pilares. Ningún resto de adorno ni de inscripción se observa en aquella mole cuadrilonga; pero la tradición dice que allí descausa Rodrigo de Lizana, muerto en Muret con su rey Pedro II; su piadosa hermana Osenda, priora entonce» del monast., ya que no pu lo enterrarle en la misma iglesia, privilegio en aquel tiempo rarísima vez concedido, le levantó un sepulcro ala entrada. Otraikimba igual existia enfrente, que destruyeron en 4809 los franceses, y y otras habrían ya desaparecido, si es cierto lo consignado en la historia., de que todos los caballeros fenecidos eu torno do Pedro ll en aquella infeliz jomada, ocupaban despuos de muertos el atrio cono una guardia de hoaor, y debieron al hijo ó nieto de su rey honrosa» sepulturas que supouen contemporáneas de la portada. La iglesia de este monast., que es severa y de gusto bizantino, se encuentra hoy blanqueada y casi enteramente disfrazada; aunque dividida de su parte inferior, que ocupa el coro cerrado de las religiosas, en su ancho crucero y sencilla cúpula , no deja de respirar cierta grandiosidad, por sus pilastras, cornisas y pesados capiteles con que la revistieron osados reformadores. Fastuosas inscripciones sepulcrales alfombran el pavimento y las gradas del presbiterio. Un monumento barroco se presenta desde luego sobre la der. en el crucero, cuya historia es mas interesante que su arquitectura. Allí yacen las dos hermanas Olivon, ambas prioras, promediando el siglo XVL.
Encima de este sepulcro cuelgan en derredor algunos retablos sobre fondo dorado , que representan á los apóstoles, y que formarían parte del altar primitivo. Una antiquísima pila recuerda allí mismo los tiempos en que Sijena servia de parr. á los dependientes del monast. Dos arcos rebajados ocupan el frente de este brazo der. del crucero el uno sirviendo de nicho de un sepulcro sin inscripción, y el otro dando paso á la oscura capilla de la Trinidad, fundación de una condesa y fáb. de un moro en el siglo XIV. Tres sepulcros de madera puestos en alto es lo único que registra el curioso á la luz de una vela; flores doradas los esmaltan; blasones de familia los distinguen; hermosas efigies pintadas en su tapa de ataúd eternizan las facciones de aquel polvo antes animado. El de enmedio entreabierto deja ver los huesos y las ropas de Ja fundadora, la condesa de Barcelós, la viuda de D. Pedro de Portugal mas arriba citada; la belleza de su retrato es portentosa; sus galas manifiestan que no profesó, sino que se retiró simplemente al monasterio, y.sus apellidos de Giménez Cornel manifiestan haber sido de origen aragonés; los dos sepulcros de cada lado ofrecen una efigie de religiosa. En forma, colocación, adornos y belleza de las efigies son muy semejantes á los ya descritos, los dos sepulcros del brazo izquierda del crucero, de los cuales el uno contiene los restos de una priora de la ilustre familia de Erill; el otro los de una simple religiosa, pero vastago de la desgraciada estirpe de los condes de Urgel. En el frente de este brazo del crucero se abre un grueso arco de medio punto, desnudo de adornos y molduras, sostenido á cada lado por dos columnas bizantinas de lisos capiteles, é introduce á la capilla llamada de la Parroquia ó de San Pedro, aunque el altar colocado á la der., y que es de ios últimos tiempos del gótico, pertenezca á la Virgen de los Dolores, y el santo titular no ocupe allí sino un lugar muy subalterno Su bóveda de algibe y el espesor de los muros dan á aquella capilla, ó por mejor decir panteón, una apariencia de subterráneo, del cual no desdeciría la opaca luz de las ventanas bizantinas, que se estrechan hacia afuera hasta llegar á ser rendijas, si no penetrara harto copiosamente por una de ellas, que desmochada de intento, presenta una estraña y casi arábiga figura. Los bancos, que corriendo alrededor le dan una apariencia de coro, reúnen en ciertos aniversarios á las religiosas, que ruegan por los regios difuntos alli sepultados. Las toscas urnas ocupan en toda su estension ¡os nichos formados por un arco algo rebajado y sin mas adornos que las sencillas molduras que los coronan apoyadas en pequeños y lisos capitales que les sirven de adorno y de remate. La’ grosera pintura con que se han embadurnado los arcos hacen casi imposible leer las ant. inscripciones pintadas en ellos , únicas á que se lió al parecer la memoria de aquellos personages. Sin embargo, aquella madre enmedio de sus tres hijos y el recuerdo de su tan distinta historia, presta á aquel sombrío recinto, á mas de la veneración á la antigüedad, el interés de un cuadro de familia. Ocupa el primer nicho á la izquierda Dulce, que unió casi la cuna con el sepulcro; su madre ofreció á Dios la virginidad de su hija predilecta; pero Dios le exigió el sacrificio de su vida, llamándola á si á los 41 años de su edad y á los nueve meses de religiosa. El sepulcro inmediato tiene la inscripción borrada, si bien en una memoria ant. sobre los hechos de Doña Sancha se dice que fue «sepultada la condesa Leonor al lado de Sor Dulce.» En el nicho de enfrente yace el rey D. Pedro II, muerto en el cerco del cast. de Muret; y en el último nicho mas cercano al altar, la fundadora, que murió 6 años después que la condesa de Tolosa y 5 antes que el rey D. Pedro. No siempre aquel sepulcro estuvo, como en el dia, desnudo de toda memoria v distinción; dos siglos hace que se veian aun pintadas en é l , desde los tiempos de la priora Doña Oseada de Lizana, la efigie de la fundadora y los pasages de su vida, y su alma llevada por dos ángeles al cielo; si el tiempo y los indiscretos embadurnamienios han hecho desaparecer aquellas antiquísimas pinturas, no es que haya dejado de ser el sepulcro uno de los mas preciosos tesoros para las religiosas, altar de oraciones y estímulo de virtudes.
Después de la tumba de la fundadora, y cruzando las grandes puertas que cierran el coro situado al nivel de la iglesia y á los pies de su nave principal, se venera en un altarcito lateral á la antiquísima Virgen de Sijena, pequeña efigie ennegrecida por los siglos, que trocó su humilde altar de parr. por una morada regia, y sus aldeanos adoradores por monarcas y princesas; viendo pasar inmóvil desde allí durante tantas generaciones á la flor de la nobleza de Aragón, consagrada á su servicio. Solemne y magestuosa liturgia hizo su asiento en aquel coro. La armonía y gravedad en el canto, el número de cantoras, los sobrepeliices.de ricas y delicadas telas, los grandes cetros de plata que empuñan al entonar los himnos y salmos. la solemnidad en cantar los Evangelios, la magestad en ofrecer incienso al Altísimo, son tradiciones y ceremonias dignas de una metrópoli venerable.
Reálzalas, y no poco, el hábito de las que ocupan á uno y otro estrenáosla sillería; hábito, que á la modestia y sencillez religiosa, reúne la elegancia cortesana; una especie de concha sujeta sobre la frente la blanca y ahuecada toca; desciende hasta la mitad del cuerpo un justillo negro ajustado á la cintura, prendido con una cruz sobre el pecho, y bastante entreabierto para dejar ver la bien plegada camisa; negra es la túnica y negro el manto que en los actos solemnes revisten, y qué bajando en graciosos pliegues de sus espaldas v de sus brazos hasta arrastrar por el suelo en forma de cola, ostenta sobre el hombro la blanca cruz de Malta.
Tjn tall, que reemplaza á la c r u z , es lo único que distingue á las religiosas conversas, llamadas con este motivo medias«ruces, cuya cuna ya que no aristocrática, suele pertenecer á una honrada medianía. Un trage.no menos lindo, pero mas apropiado á su edad v candor, usaban las n ¡ñas educandas ó escolaras, que crecían dentro de aquel santo recinto, para acostumbrarse desde muy temprano á la soledad, ó para fortalecerse contra los peligros del mundo en que iban á brillar. Sin embargo, el edificio dista mucho de la elegancia de sus moradoras; las habitaciones son espaciosas, pero faltas de adorno y de risueño aspecto; el claustro, aunque bizantino, se ve desfigurado por las capillas construidas posteriormente alrededor, cerrado con claraboyas, y por fuera revestido de ladrillos, cuyos arcos dejan ver los ant. de piedra, tan sencillos y hasta rudos como todo lo restante. La única pieza notable es la capitular, rica en pinturas y en adornos, que por su construcción y artesonado pertenece al siglo XVI, no menos que la portada y el t e cho plateresco de la capilla de mármol, situado á un estremo de ella, en la cual se venera á Jesucristo en el sepulcro con la Virgen y sus compañeras.
SIGUIREI (SAN PEDRO DE)
feligresia en la provincia y diócesis de Lugo (5 leg.), partido judicial de Becerrea (1 4/2), y ayuntamiento de Neirade Jusá (4/2). SIT. en una llanura entre las montañas de Peuamayor y Monte Pico; CLIMA templado y sano; comprende los L. de Sigirei y Vilarello con 24 CASAS, escelente arbolado y varios manantiales de buen agua; la iglesia parr.
(San Pedro) está servida por un curato de entrada y patronato lego; está colocada en una famosa campiña bastante espaciosa, y ofrece vistas agradables; es punto de reunión del denominado valle de Lejo, para acordar cosas del procomunal.
El término confina por N. con el de Penamayor; E. con la misma feligresia; S. las de Lejo y Vale, y por O. San Salvador de Piñena. El TERRENO es de buena calidad; varios arroyos le recorren y forman el riach. de Rivera ó Riocobo.
Los CAMINOS son vecinales, y el CORREO se recibe en Ferreiros y Cerezal, PROD. centeno, trigo, cebada, maiz, otros granos y semillas, y toda clase de legumbres; cria ganado vacuno y de cerda; recria muletas; hay caza de liebres y perdices, IND. la agrícola y pecuaria, 3 molinos harineros, y COMERCIO el que le proporciona sus ganados.
PORL. 24 veciudad, 476 almas CONTR. con su ayuntamiento (V.).
SILANES
v. con ayuntamiento enla provincia, audiencia terr.. c g- y diócesis de Burgos (10 leg».), partido judicial de Miranda de Ebro (4), SIT. entre dos elevadas colinas , que hacen su cielo sombrío y su CLIMA frió y húmedo; reinan con frecuencia los vientos del N. y O.; las enfermedades comunes son hidropesías y afecciones de pecho. Tiene 50 CASAS, la consistorial, escuela de instrucción primaria, dotada con 30 fan. de trigo; una iglesia parr. (San Reman) servida por un cura párroco. El término confina N. Miraheche; E. Ventosa; S. y O. Villanueva del Conde y Sta. Maria de Ribaredonda. El TERRENO es de buena calidad; la parte montuosa está poblada de hayas; le fertiliza un riach. que divide la población en do> barrios, que se comunican por medio de un puente de piedra; aquel tiene su nacimiento al pie de una sierra, y le denominan la Canaleja, porque sus aguas se conducen por canales para el abasto del pueblo y para el regadio. Los CAMINOS son locales, y se hallan en mal estado, PROD. cereales, legumbres y hortalizas; cria ganado lanar, caballar y vacuno; caza de perdices, codornices, conejos, palomas torcaces y jabalíes, POBL. 22 v e c , 82 almas CAP. PROD. 575,900 reales
LMP. 54,747. CONTR. 2,¿28 reales 22 mreales
SIGÜIREI
L. enla provincia de Lugo, ayuntamiento de Neirade Jusá. feligresiade San Pedro de Siguirei (V.). POBL..- 41 veciudad 53 almas
SIGÜEYRO DEL DEAN
i jurisd. de la ant. provincia de Santiago , cuyo juez ordinario, era nombrado por el Dean de Santiago.
